Moret, asegura que "en el mundillo literario todos son unos impostores"

Ha sido cocinero antes que fraile. O mejor dicho, es ambas cosas. Periodista, novelista y traductor, Xavier Moret (Barcelona, 1952) conoce como pocos las entretelas de editoriales y escritores. De las bambalinas de estos ambientes ha nacido una divertida parodia, El impostor sentimental (Emec¨¦), publicada ya en catal¨¢n y traducida ahora por el propio autor al castellano. "En el mundillo literario todos son impostores", confiesa Moret, quien a?ade: "He pretendido destacar que hoy pesa m¨¢s la comercializaci¨®n que la calidad de un libro".

"Hasta Flauber", comenta Moret con mucha iron¨ªa, pero con conocimiento de causa "tendr¨ªa hoy problemas para publicar sin una buena campa?a de promoci¨®n". En opini¨®n del novelista, "todo est¨¢ hoy muy orientado hacia la mercadotecnia hasta el punto de que en muchas edito riales adquieren m¨¢s importan cia los directores econ¨®micos que los responsables literarios". Por supuesto que Moret salva a algunos buenos editores y, poco dado al masoquismo, agrega que prefiri¨® escribir una parodia antes que rasgarse las vestiduras. Editores engolados, profesores extravagantes, escritores narcisistas, bibli¨®filos enloquecidos y esp¨ªas de cart¨®n-piedra desfilan por las p¨¢ginas de El impostor sentimental, ambientada en un congreso literario en Inglaterra. Admirador de escritores brit¨¢nicos como David Lodge, Torri Sharpe o Evelyn Waugh, el escritor catal¨¢n recorre con varias miradas el mundillo literario con el tel¨®n de fondo de una novela de acci¨®n. En realidad de dos novelas: la de Moret y la de Victor Mas, el escritor en la ficci¨®n. Las interioridades de la concesi¨®n de un premio donde el ganador,implicado en un esc¨¢ndalo, ya se conoce con antelaci¨®n sirven como uno de los ejemplos de que nadie es lo que parece. Como guinda, un camarero resulta ser, un aut¨¦ntico experto en galardones literarios.

No deja t¨ªtere con cabeza Moret, pese a que se reconoce un apasionado del periodismo y de la literatura, dos actividades que simult¨¢nea desde que en 1982 publicara L'americ¨¢ que estimava Moby Dick, una novela muy bien acogida por el p¨²blico en Catalu?a. Tampoco se escapan los periodistas de sus cr¨ªticas, si bien admite que "son impostores con un carne que les permite observar en primera fila". En cualquier caso, remacha sus opiniones al afirmar: "El mundillo editorial es uno de los m¨¢s endog¨¢micos que conozco. Siempre ves a los mismos alrededor, de las croquetas en las presentaciones o las fiestas". Tras se?alar que la mayor¨ªa de escritores son muy narcisistas, Moret hace una distinci¨®n: "Los que escriben son fabulosos, pero los que van de escritor, por encima del bien y del mal, resultan detestables".

Contra la opini¨®n de algunos amigos, Xavier Moret ha preferido traducir ¨¦l mismo su novela del catal¨¢n y no ha sucumbido a la tentaci¨®n de cambiar cosas. Al publicar su primera obra en castellano Moret se alegra de que cada d¨ªa se traduzcan m¨¢s autores en catal¨¢n, gallego o euskera. "De todos modos" agrega, "parece que exista una cuota y que el mercado espa?ol s¨®lo est¨¦ dispuesto a aceptar a un autor por cada lengua minoritaria que ser¨ªan Quim Monz¨®, Manuel Riva¨¢y Bernardo Atxaga".