"Nueve horas sin poder ir al servicio"

Los j¨®venes detenidos salieron de los juzgados profiriendo numerosas quejas sobre el trato recibido durante la detenci¨®n y la estancia en comisar¨ªa. Algunos declararon ante el juez haber sido golpeados por los agentes y presentaron partes de lesiones.Jos¨¦, de 22 a?os, arrestado en el interior de la casa okupada, asegura que en el segundo d¨ªa de detenci¨®n tuvieron que esperar hasta nueve horas para que les dejasen ir al servicio en el registro central de detenidos de Moratalaz.

"Nos obligaban a quitarnos los pendientes y collares y a los chicos que usan gafas tambi¨¦n les hicieron estar sin ellas", a?ade este joven, que, como otros detenidos, se queja de la escasa y mala comida que recibieron.

Otras dos chicas que permanecieron arrestadas en el mismo centro corroboran los problemas para hacer sus necesidades. "Tras mucho protestar nos dejaban salir al ba?o despu¨¦s de siete u ocho horas", aseguran.

"Algunas necesit¨¢bamos compresas y nos dijeron que no nos las pod¨ªan facilitar, nos las tuvieron que traer las abogadas", a?aden. "Nosotras est¨¢bamos unas doce en cada celda; peor lo tuvieron los chicos, que yo creo que estaban m¨¢s hacinados", apostillan.

"Hay algunas chicas que necesitaban tratamiento m¨¦dico y no dejaron que se lo diesen", concluyen.

Otra joven que fue detenida en los alrededores del edificio de La Guindalera asegura que en los calabozos de la comisar¨ªa de Ventas una docena de arrestadas durmieron las dos noches muy apretadas y sin apenas ventilaci¨®n.