"En el teatro no hay que mezclar las emociones personales", afirma Jacques Lecoq

No le gusta mezclar en escena asuntos que se aparten de su m¨¢xima: "EI teatro es s¨®lo juego y no sirve para nada m¨¢s". De ah¨ª que el franc¨¦s Jacques Lecoq, uno de los pedagogos fundamentales del teatro, se declare "al¨¦rgico a los psicologismos del actor". El maestro est¨¢ en Madrid para asistir a un homenaje que, con motivo del 40? aniversario de su escuela, le ofrece el Teatro de la Abad¨ªa de Jos¨¦ Luis G¨®mez, alumno de Lecoq, como tambi¨¦n fueron Arianne Mnouchkine, Steven Berkoff, Jorge Lavelli, Dario Fo, Joan Font o el oscarizado Geoffrey Rush.

Jacques Lecoq ha sido tambi¨¦n deportista y reeducador de paral¨ªticos, actividades que considera en total relaci¨®n con su profesi¨®n de pedagogo teatral: "Todo se basa en el cuerpo, hablamos de lo mismo, del juego". Es una conclusi¨®n a la que lleg¨® en 1945, cuando descubri¨® el juego de la m¨¢scara, puso en pr¨¢ctica un entrenamiento del actor en movimiento y trabaj¨® en una nueva concepci¨®n de un mimo abierto al teatro: "Luch¨¦ much¨ªsimo en contra del mimo bloqueado, me ayud¨® adentrarme en la Commedia dell'Arte..., aquello fue la base de muchas cosas".Una base que parte de una m¨¢xima en la ense?anza de Lecoq: "No hay diferencia entre el gesto y la palabra". Y a?ade: "En el principio de la vida s¨®lo hay dos cosas, o estiramos o empujamos, es lo ¨²nico que hacemos y ambas funciones son fundamentales, ponen de relieve que acci¨®n y verbo son la misma cosa". Lo que s¨ª distingue este hombre que, antes de fundar su propia escuela parisina en 1956 fund¨® la del Piccolo de Mil¨¢n con Giorgio Strehler y Paolo Grassi, son la palabra y el discurso: "La palabra es entrar en acci¨®n, el discurso es otra expresi¨®n".

Grito de ilusi¨®n

Detesta la tesis de que el cuerpo es el ¨²nico instrumento del actor y no le interesan aquellas tendencias, como las de Stanislavski o Grotovski, que pasan porque el int¨¦rprete ponga sus propios sentimientos a la hora de trabajar: "El teatro es un juego y nunca mezclar¨ªa las emociones personales con las del teatro, los actores que lo hacen toman el 10% de su trabajo para ellos y no se lo dan al p¨²blico", dice, "soy al¨¦rgico a los psicologismos del actor que confunde el grito real con el grito de una ilusi¨®n". El hecho de que su escuela -por la que desfilan cada temporada actores, de m¨¢s de 30 pa¨ªses diferentes- haya sido el embri¨®n de numerosas compa?¨ªas teatrales, como El Th¨¦?tre du Soleil de Arianne Mnouchkine, los brit¨¢nicos Th¨¦?tre du Complicit¨¦, los suizos Mummenschanz, los brit¨¢nicos Foostbarn Theatre o los espa?oles Comediants, lo achaca a que sus alumnos tienen deseos de seguir juntos: "Casi todos son grupos que no dependen de la comprensi¨®n de la palabra, aunque la utilicen. Es un teatro de gesto donde el lenguaje es un juego", se?ala refiri¨¦ndose a sus alumnos, a los que les ha propuesto una ense?anza que define como mimo-din¨¢mica.Lecoq destaca como aportaci¨®n de los espa?oles en su escuela la generosidad y el no temer lo prohibido. Recuerda que el primero en llegar fue Albert Vidal, luego otros muchos como Anna Lizar¨¢n, del Teatro Lliure; Joan Font, de Comediants; los componentes de El Tricicle y muchos otros. A todos, espa?oles o no, les pide una cosa: curiosidad. "Parece sencillo, pero no lo es", dice Lecoq, que en los a?os sesenta descubri¨® el mundo de los payasos y los bufones. "No hay nada mejor que la burla hacia uno mismo", declara. "Observ¨¢ndonos vemos que todos tenemos una parte irrisoria. Nos creemos siempre maravillosos, pero ah¨ª est¨¢ la realidad. En los setenta, e incluso despu¨¦s, exist¨ªa la capacidad de burla; ahora no, porque la juventud quiere ser algo y no sabe qu¨¦, no sabe en qu¨¦ creer y por tanto no puede burlarse".

Lecoq, primero desde la Facultad de Arquitectura y posteriormente desde su Laboratorio de Estudio del Movimiento, imparte clases a arquitectos y otros profesionales sobre las relaciones entre el cuerpo, la arquitectura y el teatro: "All¨ª investigamos sobre la influencia del espacio sobre el cuerpo", explica el pedagogo.

Las actividades que se ofrecer¨¢n hasta el pr¨®ximo, d¨ªa 6 en el curso homenaje -charlas, proyecciones, coloquios en los que participar¨¢n alumnos como G¨®mez y Dar¨ªo Fo- estar¨¢n abiertas a todos los interesados, a excepci¨®n de las clases que impartir¨¢ Lecoq a actores previamente seleccionados. Entre las sesiones destaca la lecci¨®n p¨²blica El cuerpo de las cosas, que Lecoq impartir¨¢ el pr¨®ximo s¨¢bado. El Teatro Pradillo tambi¨¦n se ha sumado al homenaje.