Un "sheriff" para el ciberespacio
Alemania se convierte en el primer pa¨ªs que quiere implantar una polic¨ªa especial para combatir pornograf¨ªa y violencia en Internet
Alemania es tal vez el pa¨ªs con m¨¢s apego a los reglamentos en el mundo. Esa obsesi¨®n por las reglamentaciones y las leyes, que ha llevado a que algunos observadores recuerden lo que el psicoanalista Eric Fromm llamaba el "miedo a la libertad", se recrudece cada vez que se discute sobre avances tecnol¨®gicos o cient¨ªficos.El ciberespacio es, en la imaginaci¨®n de muchos alemanes, una especie de coto vedado donde los agentes de la Oficina Federal de Protecci¨®n de la Constituci¨®n no pueden perseguir a los ultraderechistas que distribuyen propaganda nazi ni a los marxistas que quieren destruir la econom¨ªa social de mercado, y donde el Ministerio de Familia est¨¢ inerme frente a los distribuidores de pornograf¨ªa infantil y otras aberraciones. Esas angustias son las que han llevado al Gobierno federal a redactar una ley de control del espacio cibern¨¦tico, algo que hasta ahora no hab¨ªa realizado ning¨²n pa¨ªs. "Internet tiene que ser un espacio abierto. Eso es claro. Pero eso no quiere decir que no deba estar sometido al derecho y a la ley", ha explicado el ministro, de Ciencia y Tecnolog¨ªa, Jurgen Ruttgers.
La proposici¨®n de ley, llevada el pasado viernes por el Gobierno federal de Helmut Kohl al Bundestag (C¨¢mara baja), quiere posibilitar un control efectivo de los contenidos que se distribuyen por Internet. La intenci¨®n: proteger a los j¨®venes de los peligros de la pornograf¨ªa y toda clase de material ilegal que pueda circular por la red. Para ello, proyecta incluso la creaci¨®n de una especie de polic¨ªa cibern¨¦tica, dirigida por una suerte de cibersheriff que cabalgue por el espacio virtual.
El principio b¨¢sico de la iniciativa, seg¨²n el ministro de Justicia, Edzard Schmidt-Jortzig, es "de l¨®gica". Del mismo modo que no se puede castigar a Correos porque las cartas contengan instrucciones para hacer un c¨®ctel m¨®lotov, propaganda nazi o pornograf¨ªa infantil, la ley no debe perseguir a los proveedores de Internet, que s¨®lo proporcionan los medios de la transmisi¨®n. Por ello, su compa?ero de Gabinete Ruttgers reclama que los proveedores deben poder actuar cuando sepan de contenidos ilegales y tener "la posibilidad de bloquearlos".
En declaraciones al prestigioso semanario Der Spiegel, el ministro lo ilustr¨® con una gr¨¢fica analog¨ªa con el servicio postal: "El correo no es responsable del contenido de una carta, pero puede llamar a la polic¨ªa si ve que en el sobre hay una bomba". La ley, que si es aprobada entrar¨¢ en vigor, el 1 de agosto, no hace m¨¢s que extender a Internet las actuales restricciones que rigen en Alemania sobre el material escrito. Se parte de la premisa de que el Estado, sin convertirse en censor, tiene la obligaci¨®n de vigilar los l¨ªmites morales de los contenidos con el fin de evitar expresiones nazis o racistas, que tantas ampollas levantan en la memoria hist¨®rica de aquel pa¨ªs. Tanto Ruttgers como Schmidt-Jortzig han dejado claro que la ley no puede terminar por estrangular las posibilidades que Internet abre para las comunicaciones y las investigaciones en el futuro. Por ello, el Gobierno federal aboga por un autocontrol de los proveedores, que deber¨ªan llamar a la polic¨ªa cibern¨¦tica cuando adviertan que "bombas ideol¨®gicas o morales" se est¨¢n transmitiendo por Internet. Los proveedores ya han prometido, a su vez, elaborar un c¨®digo de conducta interno.
Una de las propuestas de la ley es la creaci¨®n de unos funcionarios que vigilen la red en las oficinas de los proveedores de Internet. Si detectaran material ilegal, requerir¨ªan al proveedor para que lo bloquease. Despu¨¦s, tendr¨ªan que informar a una central en Bonn, "un organismo federal para el examen de textos peligrosos para la juventud", que lo analizar¨ªa y decidir¨ªa si emprender acciones legales contra el emisor de la informaci¨®n, contra el proveedor o contra ambos.
Sin embargo, hay cr¨ªticos que opinan que se est¨¢ abortando la posibilidad de que se cree el tipo de radio que una vez so?¨® Bertold Brecht, en el que cada receptor tiene a la vez la posibilidad de ser un emisor. Aunque la ley ser¨¢ seguramente aprobada en el Parlamento con los votos de la mayor¨ªa gubernamental, los ex comunistas del PDS y algunos diputados socialdem¨®cratas y verdes votar¨¢n en contra.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.