Correos instala en la calle varios prototipos de un buz¨®n blindado

Vivir a la intemperie es duro: hay que soportar lluvia, fr¨ªo, calor o pintadas. En Correos saben lo que les espera a sus buzones y han sacado los primeros prototipos del superbuz¨®n a la calle. Dos de ellos llevan ya casi una semana en Sol y en la Gran V¨ªa, luciendo su nuevo dise?o y su piel de acero. Fibra de vidrio y poliamida son los materiales b¨¢sicos de los otros prototipos que se expondr¨¢n en pr¨®ximas fechas.Todos llevan una especie de bandeja que impide la introducci¨®n de jeringuillas y objetos punzantes; as¨ª protegen tanto las cartas como a los empleados que trabajan con los buzones. Un doble cierre a¨ªsla la correspondencia y aumenta su incombustibilidad. Tambi¨¦n han sido mejoradas las cerraduras y los anclajes de puertas y al suelo. Estos prototipos casi se clasifican de alto secreto: Correos no facilita sus croquis por razones de seguridad.

Sobre sus colores, gris, negro y amarillo, la limpieza de las pintadas y la eliminaci¨®n de publicidad es m¨¢s f¨¢cil. Hay otras medidas contra los pulverizadores: el s¨ªmbolo, en relieve, no se puede tapar; la forma, de base ovalada, ofrece menos superficie. Adem¨¢s, ocupan menos espacio en las aceras, manteniendo un volumen parecido al de los antiguos.

Un concurso de dise?o convocado en septiembre de 1993 fue la primera semilla de estos superbuzones. Las condiciones, seg¨²n el jefe de servicio e imagen de Correos, Modesto Fraguas, exig¨ªan la inclusi¨®n de los dispositivos de seguridad. Eran el material y el aspecto los puntos m¨¢s abiertos para las cinco empresas que se presentaron. Un nuevo concurso asign¨® la empresa encargada de construir los prototipos, hasta entonces en planos

En un mes se prueban otros ocho en el resto de Espa?a. Jaca, Santander, San Sebasti¨¢n, Sevilla, Tenerife y Valencia son las ciudades elegidas por su clima y sus condiciones ambientales como ¨®ptimas para verificar la resistencia de los materiales. Los otros dos modelos de buzones, uno de fibra de vidrio y el otro de poliamida, estar¨¢n al aire libre antes del final de a?o. La sustituci¨®n de los antiguos tardar¨¢ m¨¢s: ir¨¢n cambi¨¢ndose seg¨²n se rompan y tienen una vida media de unos diez a?os.