Un informe del Parlamento de Kuwait limita la gesti¨®n de Torras a De la Rosa
"La administraci¨®n real [del Grupo Torras] estaba limitada al vicepresidente, Javier de la Rosa". As¨ª de contundente es un informe elaborado en 1993 por una comisi¨®n de parlamentarios de Kuwait. El informe, que sorprendentemente ha sido aportado por el propio De la Rosa a la Audiencia Nacional, donde la magistrada Teresa Palacios instruye la querella de Torras contra ¨¦l y otros ex gestores del grupo, es un demoledor alegato contra la forma en que se manej¨® en Espa?a el dinero de KIO, la oficina de inversiones de Kuwait.
Un periodo el de la gesti¨®n de De La Rosa que ha cobrado actualidad tras las. ¨²ltimas declaraciones de antiguos directivos y consejeros de la empresa ante la juez Palacios. Esta misma semana declarar¨¢n uno de los socios de De la Rosa, el empresario Narciso de Mir, y el ex secretario del consejo y abogado, Joan Piqu¨¦ Vidal, en libertad bajo fianza por su presunta implicaci¨®n en el caso del ex juez Pascual Estevill."De la Rosa aseguraba la direcci¨®n de la compa?¨ªa y tomaba ¨¦l solo las decisiones. Tambi¨¦n nombraba la mayor¨ªa de los administradores de las filiales, con contratos injustos por, los altos salarios y los privilegios" que consegu¨ªan. "Incluso tom¨® decisiones que estaban en conflicto con la opini¨®n de la Qffice", nombre este ¨²ltimo con el que se conoce la sede de la Kuwait Investment Office (KIO) en Londres.
El informe fue elaborado por un equipo de tres diputados del Comit¨¦ de Asuntos Financieros y Econ¨®micos del Parlamento de Kuwait, encabezados por su presidente, Ismail Khadr Al Shatti, que viaj¨® a Espa?a y Gran Breta?a para recabar informaci¨®n. Los comisionados se entrevistaron con ex responsables de KIO y de Torras, entre ellos el propio De la Rosa, que hab¨ªa sido el primer ejecutivo de Torras, y Manuel Guasch, presidente de la azucarera Ebro.
El documento comienza con un balance escalofriante de las inversiones kuwait¨ªes en Espa?a entre 1987 y 1992. Llegaron a representar el 27% de las inversiones directas de KIO en el mundo. "El coste de las inversiones es de unos 5.000 millones de d¨®lares (unos 500.000 millones de pesetas de 1992). 2.800 se gastaron en la compra de acciones de la compa?¨ªa [Torras]; alrededor de 700 m¨¢s, en intereses por cr¨¦ditos".
El documento cifra en 700 millones de d¨®lares (70.000 millones de pesetas) el dinero perdido "en sostener el precio de las acciones en los mercados de valores", es decir en la manipulaci¨®n de las bolsas para mantener artificialmente alta la cotizaci¨®n de unas compa?¨ªas con serios problemas financieros y de funcionamiento.
Finalmente, otros " 510 millones (51.000 millones de pesetas) fueron transferidos a cuentas desconocidas". Se trata de las opacas operaciones de env¨ªo de grandes cantidades de dinero a cuentas bancarias en para¨ªsos fiscales. Hasta ahora poco se sabe de su destino.
De la Rosa reconoci¨® haber abierto una de las cuentas, en el Bankers Trust de Ginebra (Suiza)con la clave Stuart, que recibi¨® por los menos 105 millones de d¨®lares. Tambi¨¦n declar¨® en Londres haber enviado otros 100 millones de d¨®lares al banco Sogenal, en este caso a nombre de Manuel Prado, a quien la juez ha citado a declarar el pr¨®ximo mes de mayo. El informe cierra la suma de p¨¦rdidas con otros "170 millones de d¨®lares como gastos de la sociedad desde l989".
El informe critica paso a paso la gesti¨®n de los responsables de KIO en Londres; el presidente, Mohamed Fahad Al Sabah; el director general, Fouad Jaffar, y su socio en Espa?a, Javier de la Rosa. Un ejemplo. Las compa?¨ªas adquiridas ten¨ªan algo en com¨²n, "fueron compradas por el doble de su valor" y por procedimientos -"a trav¨¦s de gran n¨²mero de intermediarios"que elevaban el coste y "provoca dudas sobre si el objetivo era obtener beneficios particulares".
El comit¨¦ se extra?a asimismo de que la c¨²pula de KIO mantuviera a De la Rosa en su puesto, a pesar de las m¨²ltiples advertencias sobre su pasado: "Lo que increment¨® las sospechas acerca de la elecci¨®n de este socio fueron las advertencias de las autoridades espa?olas contra los contactos con esa persona, debido a su historial de problemas y comportamientos financieros que hab¨ªa cometido en el pasado. El ministro espa?ol de Econom¨ªa [Carlos Solchaga] mencion¨® en una reuni¨®n con el comit¨¦ que ¨¦l hab¨ªa advertido a las autoridades de Kuwait en dos ocasiones".
Asimismo, el informe critica que las inversiones en Espa?a buscaban casi siempre compa?¨ªas en p¨¦rdidas o en suspensi¨®n de pagos. Tambi¨¦n se menciona la "ineptitud" de los directivos del equipo de De la Rosa para mover las grandes cantidades de fondos que pasaron por su manos. A pesar de ello, De la Rosa estableci¨® un contrato de gesti¨®n en favor de su empresa que le permit¨ªa cobrar comisiones en todas las compra y ventas de acciones, inclu¨ªdas las que se realizaban entre empresas relacionadas directamente.Respecto a los gastos de los gestores, el informe no es menos contundente. Para relaciones p¨²blicas se pagaron 3,1 millones de d¨®lares a la Agencia A, de Alfredo Fraile. Casi 2 millones de d¨®lares se evaporaron en seguridad para De la Rosa y el presidente de Torraspapel, Jorge N¨²?ez. Se gastaron 3 millones de d¨®lares en publicidad de dos torneos de golf patrocinados por Torras y 42 millones de pesetas en entradas para los juegos ol¨ªmpicos de Barcelona.
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