Convivencia ling¨¹¨ªstica
Hace unos d¨ªas estuve de vacaciones en Barcelona y, aparte de admirar su encanto y se?or¨ªo, lo que m¨¢s me llam¨® la atenci¨®n fue el grado de cohabitaci¨®n del castellano y el catal¨¢n.Por eso me ha cogido de sorpresa la pol¨¦mica que ¨²ltimamente se viene orquestando acerca de la necesidad de que el catal¨¢n sea la ¨²nica lengua oficial de Catalu?a. A no ser que los pol¨ªticos, en su af¨¢n por justificar el sueldo y el calificativo de mareadores de perdiz, hayan decidido remover una vieja controversia, que por lo visto no est¨¢ en la calle, Esta vez, y por el bien de todos, conf¨ªo en que la sabidur¨ªa popular no se deje enga?ar por ese grupo que de forma peligrosa est¨¢ tratando de provocar un enfrentamiento que podr¨ªa soliviantar innecesariamente la convivencia pac¨ªfica de todo un pueblo. Ojal¨¢ no tengamos que asistir, de nuevo, a la dictadura ling¨¹¨ªstica del pasado, pero al rev¨¦s- .
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