Sombras en la oscuridad
El Teatro Negro de Praga recala en Alcobendas con 'Peter Pan' antes de comenzar su gira por Australia
, Vuelan, navegan y brincan sobre un fondo negro. Los 18 componentes del Teatro Negro de Praga -que interpretaron ayer su peculiar versi¨®n de Peter Pan en el Teatro -Auditorio Ciudad de Alcobendas (83.000 habitantes)- se transforman en seres de carne y hueso horas antes de la funci¨®n. Entre todos montan un peculiar entramado de hierros triangulares, del que aflora una magia sutil.La clave de esta original forma de hacer teatro, reinventada por Jiri Srnec en 1961, es el principio de la c¨¢mara oscura. Sobre un fondo negro, unos actores invisibles para el p¨²blico -ya que visten de negro de pies a cabeza- mueven diversos objetos. Delante de ellos, est¨¢n los actores del espect¨¢culo, que pululan sorprendentemente entre luces y sombras. No hay di¨¢logos hablados. S¨®lo danza, m¨²sica y m¨ªmica. La c¨¢mara es capaz de hacerles volar o bregar por los mares sin que el ojo del espectador se percate del truco.
"El p¨²blico japon¨¦s suele acercarse al escenario al acabar la obra y nos pide ver los ordenadores que controlan nuestra magia. Se sorprenden mucho al ver que se trata de simples juegos de luces y de otros mecanismos rudimentarios", explica Marec Feit, director art¨ªstico de la compa?¨ªa.
Los actores viajan por el mundo 10 meses al a?o. Despu¨¦s de Alcobendas, su gira internacional les llevar¨¢ a Australia. Se jactan de no conocer los escenarios de un solo continente: la Ant¨¢rtida. "Creo que aguantar¨¦ en el Teatro Negro tres o cuatro a?os. Es un ritmo de trabajo duro y no puedes mantener una relaci¨®n estable o disfrutar de una familia", dice Martina Schlechterov¨¢, de 24 a?os, una fr¨¢gil bailarina cl¨¢sica que da vida a Wendy. Todos los actores coinciden en esto y aunque amen el teatro, echan de menos su Rep¨²blica Checa natal. Pero, a pesar de todo, cada a?o centenares de artistas checos acuden a las pruebas de selecci¨®n de la compa?¨ªa. S¨®lo dos o tres se incorporan a la plantilla para aprender a actuar como una aut¨¦ntica sombra en la oscuridad. Y lo aprenden sobre la marcha, ya que no hay escuela de Teatro Negro en ninguna parte.
Seg¨²n Jos¨¦ Mar¨ªa Pastor, el traductor espa?ol que les acompa?a, "son muy civilizados" y en sus ratos libres hacen turismo: visitan una alcazaba en Almer¨ªa o pasean por las playas mediterr¨¢neas, mientras esperan la noche para transformarse en seres de otra dimensi¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.