Manuel Caballero: tres avisos y toro al corral
El quinto toro se lo devolvieron al corral a Manuel Caballero. Se lo devolvieron porque dio tiempo a que sonaran los tres avisos mientras intentaba escabecharlo.El fracaso de Manuel Caballero fue may¨²sculo. El fracaso de Manuel Caballero se produjo no ya con el estoque sino con el toreo tambi¨¦n. Manuel Caballero era incapaz de torear.
No se crea que el toro devuelto ,al corral le sali¨® pregonao. El toro devuelto al corral era un borrego, como todos. Se diferenci¨® de los dem¨¢s en que tom¨® tres varas con cierta bravura y se ca¨ªa menos. Los cinco restantes se cayeron v¨ªctimas de una invalidez extra?a que alguien deber¨ªa investigar. La fiesta de los toros va transcurriendo feria a feria y d¨ªa a d¨ªa bajo sospecha de que siniestra mano la altera, con la evidencia de que los toros no salen cat¨®licos al redondel, por algo ser¨¢. Y nadie investiga nada. Los taurinos con corromper y conspirar, sus corifeos con mentir e insultar, tienen bastante. Y, mientras tanto, la autoridad se llama andana.
Dominguez / Rodr¨ªguez, Caballero, V¨¢zquez
Toros de Mar¨ªa Luisa Dominguez P¨¦rez de Vargas, tres primeros de discreta presencia, resto con trap¨ªo; muy flojos, varios inv¨¢lidos; aborregados y sumisos. Miguel Rodr¨ªguez: media muy atravesada a mi tiempo, estocada trasera - aviso con retraso- y descabello (silencio); estocada pescuecera baja y dos descabellos (silencio).Manuel Caballero: media atravesada perdiendo la muleta y saliendo perseguido, estocada delantera y rueda de peones (vuelta por su cuenta); cuatro pinchazos bajos, media estocada tendida descaradamente baja, rueda de peones, descabello -primer aviso-, cuatro descabellos -segundo aviso-, estocada corta escandalosamente baja, tres descabellos -tercer aviso- y el toro es devuelto al corral (bronca monumental con lanzamiento de almohadillas). Javier V¨¢zquez: estocada y rueda de peones, que tira al toro (oreja); pinchazo, media, rueda de peones y tres descabellos (silencio). Plaza de Pamplona, 9 de julio. 4? corrida de San Ferm¨ªn. Lleno
A los pol¨ªticos que ejercen la autoridad, cuando llegan las ferias lo que les gusta es darse banquetes, hacer relaciones p¨²blicas, pegarles abrazos a las figuras, salir en las fotos, vestir el cargo, sentirse importantes. Y que no les vengan con problemas. Su mejor t¨¢ctica consiste en negar la existencia de los problemas, para lo cual hacen causa com¨²n con los que insultan, con los que mienten, con los que conspiran, con los que corrompen. Menuda pe?a.
Pero los problemas existen. El problema principal es el toro. No tiene explicaci¨®n que la corrida de Mar¨ªa Luisa Dom¨ªnguez -en realidad, guardiolas- apareciera en el ruedo pamplon¨¦s tan inv¨¢lida, aborregada y sumisa. Los, guardiolas de Mar¨ªa Luisa Dom¨ªnguez no parec¨ªan ni toros. Porque un toro no se desploma de repente; un toro no camina tambaleante y moribundo; un toro no acude al reto del cite cansino y derrotado.
Con esos Guardiola los toreros no ten¨ªan enemigo. Pero semejante oportunidad no les vali¨® para pas¨¢rselos cerca haciendo el toreo. Antes al contrario, se los pasaban lejos, les pegaban pases desastrados, desarrollaban sus faenas a lo que saliera y el resultado era una caricatura insoportable e indecorosa del arte de torear.
S¨®lo Manuel Caballero en el toro que mat¨®, Javier V¨¢zquez en el que logr¨® una oreja, llegaron a dar pases con mediana templanza y relativo gusto. El resto consisti¨® en pegar trapazos. Tal como suena: trapazos. Y se suced¨ªan los enganchones, entre docenas de pases planteados al buen tunt¨²n y tirados desde la lejan¨ªa.
Miguel Rodr¨ªguez se atrevi¨® a banderillear y lo hizo con facilidad en el primer toro, con desacierto en el cuarto. Eso s¨ª, saludaba mucho. Miguel Rodr¨ªguez es un virtuoso de los saludos y los desplantes. Es moda contradecir la evidencia mediante desplantes marchosos. Y este diestro, que los prodig¨® en sus descompuestas faenas, tras cobrar unos espadazos horribles se descaraba se?alando con el ¨ªndice la fechor¨ªa. No es ¨²nico Miguel Rodr¨ªguez en semejantes ardides. Forman parte de la moderna forma de torear y son tan falsos como la forma de torear misma. ?El toreo!: esa historia, ese recuerdo vago, ese arte secular, monumental y heroico, que engrandeci¨® pasadas ¨¦pocas y que unos cuantos desaprensivos han hecho desaparecer.
Rasgos de toreo bueno sac¨® Javier V¨¢zquez en su primer borrego; el otro era un inv¨¢lido que no aguantaba un pase mediano sin desplomarse. La negaci¨®n del toreo sac¨® Manuel Caballero, mech¨® al borrego que hizo quinto, en plena carnicer¨ªa le salt¨® el verduguillo al callej¨®n y de poco ensarta all¨ª a un fot¨®grafo. Los s¨®rdidos incidentes provocaron un gran esc¨¢ndalo. Cayeron al redondel almohadillas por cientos. Y al sonar el tercer aviso, el toro, ya devuelto al corral, era un cuerpo sanguinolento hecho girones, que sigui¨® a los cabestros, trastabillante y ag¨®nico.
Y a eso lo llaman fiesta. Qu¨¦ verg¨¹enza.
La corrida de hoy
5? de la Feria de San Ferm¨ªn. Toros de Torrestrella para C¨¦sar Rinc¨®n, Enrique Ponce y Rivera Ord¨®?ez.A las 18.30. El encierro empieza a las ocho de la ma?ana.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.