L¨¢grimas y lazos azules en la aldea gallega donde conocen al secuestrado desde ni?o

Los desvencijados h¨®rreos de la aldea orensana de Reboredo aparecieron ayer con lazos azules. Por los caminos y al pie de las fincas, las mujeres lloraban y una anciana de 80 a?os se recuperaba a duras penas del choque psicol¨®gico que le produjo la noticia del secuestro de su nieto. La familia, preocupada por su quebradiza salud, logr¨® ocult¨¢rselo hasta ayer por la ma?ana, pero una llamada del Pa¨ªs Vasco le descubri¨® la tr¨¢gica realidad. En ese lugar del municipio de Xunqueira de Espada?edo, a unos 25 kil¨®metros de Ourense, se esperaba a Miguel ?ngel Blanco para dentro de 15 d¨ªas.La, historia de la familia del concejal secuestrado es la de miles de vecinos de esta zona de Galicia que han echado ra¨ªces en el cintur¨®n urban o de Bilbao, gentes que "con su trabajo tambi¨¦n han contribuido al desarrollo econ¨®mico de Euskadi", como destac¨® el presidente del Parlamento gallego, Victorino N¨²?ez, en una declaraci¨®n conjunta de todas las fuerzas pol¨ªticas gallegas. Hace 30 a?os, el padre de Blanco se march¨® con su esposa, nacida en el vecino municipio de A Merca, para trabajar de alba?il en Vizcaya. All¨ª naci¨® su hijo, medio vasco y medio gallego, porque nunca hab¨ªa dejado de cumplir el rito veraniego de las vacaciones en la aldea.

Miguel Angel tiene muchos amigos en la zona. Ya hab¨ªa confirmado que estar¨ªa de vuelta el 1 de agosto para asistir a la boda de un primo, seg¨²n recordaba ayer compungido su t¨ªo Antonio Blanco, un ceramista muy popular en la comarca. De ah¨ª que la movilizaci¨®n de los vecinos de Xunqueira fuese inmediata. La mayor¨ªa de los 1.000 habitantes del municipio se concentr¨® ante el Ayuntamiento al mediod¨ªa, acompa?ados de autoridades auton¨®micas y provinciales y de los desconsolados familiares del secuestrado: una t¨ªa abuela, t¨ªos, primos...

El chico de todos los veranos

"Ha sido una sorpresa total, nunca pens¨¦ que -me iba a ver en- una situaci¨®n semejante", resum¨ªa perplejo el alcalde, Ricardo Gonz¨¢lez. "ETA ha metido la pata hasta el fondo, pero a¨²n est¨¢ a tiempo de rectificar". Una de la pan,cartas portadas por ni?os rezaba: "Miguel, queremos verte".Gonz¨¢lez, compa?ero de partido de Blanco, nunca le trat¨® personalmente, aunque lo reconoci¨® en cuanto vio por televisi¨®n la foto de aquel chico que andaba por el pueblo todos los veranos. Los vecinos, que ayer se afanaban en la confecci¨®n de lazos azules, se trasladar¨¢n hoy en autobuses fletados por el Ayuntamiento a Santiago de Compostela para asistir a la manifestaci¨®n convocada a iniciativa del presidente de la Xunta, Manuel Fraga.

Tambi¨¦n en la ciudad de Ourense se multiplicaron las iniciativas ciudadanas de solidaridad. La m¨¢s llamativa fue la organizada por las juventudes de los tres principales pol¨ªticos gallegos -PP, PSOE y Bloque Nacionalista Galego que iniciaron una acampada en las riberas del r¨ªo Mi?o hasta las cuatro de la tarde de hoy, cuando expira el ultim¨¢tum de ETA. En la ciudad de Ourense vive otro de los t¨ªos de Miguel ?ngel, Aurelio Garrido, un comerciante que ya no conf¨ªa m¨¢s que en la providencia divina. La familia est¨¢ destrozada y ya s¨®lo nos queda pedirle, a Dios que haya suerte".