"Desde que Llodio no es de HB hemos recuperado la libertad en la calle"
El alcalde de Llodio (?lava), el peneuvista Antonio Aiz, vive sus ¨²ltimos d¨ªas al frente de la corporaci¨®n municipal. El pasado lunes consigui¨® preservar la unidad de los partidos democr¨¢ticos y rechazar la moci¨®n presentada por Herri Batasuna en la que esta coalici¨®n esponsabilizaba al Gobierno de la muerte del preso de ETA Juan Carlos Hernando. Despu¨¦s de seis a?os al frente de la alcald¨ªa llodiana, Aiz tendr¨¢ que abandonar el cargo al haber sido inhabilitado por los tribunales. El motivo: negarse a facilitar a los concejales de HB una copia de las n¨®minas de los funcionarios municipales por temor al uso que pudiera hacerse de estos datos. Su negativa fue considerada como un delito, al impedir a los ediles de HB el ejercicio de sus derechos c¨ªvicos.Desde 1979, Llodio -segunda localidad m¨¢s poblada de ?lava (20.000 habitantes)hab¨ªa sido gobernada por HB, convirti¨¦ndose en el emblema del radicalismo en la provincia. En las dos ¨²ltimas elecciones municipales (1991 y 1995), Aiz desbanc¨® a los radicales. A partir de entonces, los ataques contra ¨¦l se han sucedido.
Pregunta. El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, le puso a usted como ejemplo de la no colaboraci¨®n pol¨ªtica con HB, pero los tribunales le han inhabilitado por eso mismo.
Respuesta. Los concejales y alcaldes del PNV estamos pagando por no ser ambiguos. Despu¨¦s de aguantar insultos, agresiones, vejaciones, ataques a mis propiedades y de ver c¨®mo pon¨ªan mi cara en un cartel pidiendo que me dieran ca?a, los tribunales pagan con mi inhabilitaci¨®n mi radical oposici¨®n a HB. Llodio ya no es el pueblo que gobernaba HB, hemos recuperado la libertad en la calle. Hasta que HB no ha conseguido terminar conmigo, no ha cejado. Su objetivo era desbancarme de la alcald¨ªa, fuera como fuera.
P. El PNV es criticado a menudo por su ambig¨¹edad en el tema de la violencia...
R. En Euskadi hay muchos ejemplos a nivel municipal de todo lo contrario, pero desde la lejan¨ªa no se tiene la misma perspectiva. Siempre hemos mantenido una postura distante y de aislamiento pol¨ªtico absoluto, al ver las salvajadas que comet¨ªa HB. Lo que HB no me perdona es que gan¨¦ dos veces a su candidato. Lo ¨²nico que ha hecho HB durante sus mandatos fue enga?ar al pueblo, adem¨¢s de saquear el Ayuntamiento con su gesti¨®n.
P. ?Comprar¨ªa pan en un local de un votante de HB?
R. A m¨ª no se me ha dado el caso. Los partidos democr¨¢ticos no a¨ªslan a HB; son ellos los que nos a¨ªslan a todos los dem¨¢s. Nos han convertido en sus enemigos. A m¨ª, por ejemplo, no me dejan entrar a determinados bares y locales. Pero aunque est¨¦ vetado por ellos, nunca les devolver¨¦ la misma moneda.
P. ?Comprende la postura de Julio Anguita justificando a los concejales de IU de Mondrag¨®n y Arrigorriaga porque estar a pie de obra es muy diferente a verlo todo desde fuera?
R. Le comprendo, pero le dir¨ªa que no se puede caer en la trampa de HB de la manera en que los partidos lo hicieron en Arrigorriaga.
P. Usted consigui¨® preservar la unidad del bloque democr¨¢tico ante la moci¨®n presentada por HB tras la muerte de Juan Carlos Hernando en la c¨¢rcel de Albacete.
R S¨ª, pero la intervenci¨®n del PP fue m¨¢s all¨¢ de lo hablado. Parece que al PP y a HB les interesa mantener vivo el conflicto. No se puede acabar con el problema manipulando el fen¨®meno terrorista.
P. ?Tiene miedo?
R. En momentos determinados s¨ª he pasado miedo. He sufrido agresiones e insultos, pero nunca he pensado en tirar la toalla. He tenido escolta de la Ertzaintza y es una situaci¨®n muy desagradable, pero me adapt¨¦. Mi familia tampoco me ha animado a retirarme. Que me haya acostumbrado no quita para que sepa que ETA me pueda hacer una aver¨ªa gorda.
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