Verano fotogr¨¢fico de oasis y de estrellas
El 'reportero' Yul Brynner y los paisajes de Jordi Esteva se muestran en Par¨ªs y Madrid
Varias son las propuestas fotogr¨¢ficas que nos trae este verano, tan plurales como la diversidad de su naturaleza est¨¦tica. Desde im¨¢genes rescatadas de colecciones personales a una infinidad de documentos que quieren dejar de serlo porque, traducidos en instant¨¢neas, su autor acent¨²a lo personal m¨¢s que las fr¨ªas descripciones de lo objetivo. En la galer¨ªa de la FNAC de Madrid Jordi Esteva presenta Los oasis de Egipto, donde refleja un mundo que ya sedujo a los fot¨®grafos del XIX. Entretanto, la FNAC de Par¨ªs recoge una galer¨ªa de retratos que plasm¨® el actor Yul Brynner, en su faceta de fot¨®grafo.
Los oasis de Egipto, el proyecto de Jordi Esteva, nacido en Barcelona en 1951, registra el microcosmos cerrado en el paisaje infinito de ese ¨¢rea mediterr¨¢nea -como el autor lo define- Son personajes perdidos en islas de un desierto rodeado de carreteras que poco saben del tiempo y que huyen de las tomas con vocaci¨®n fara¨®nica por la que sintieron una fuerte atracci¨®n los fot¨®grafos rom¨¢nticos desde el siglo XIX.Desarrollo de una primigenia exposici¨®n de fotograf¨ªa colgada por el autor en Luxemburgo' Atelier du Caire sobre los derviches de Omdurmann. Son im¨¢genes de corte cl¨¢sico en l¨ªnea con la est¨¦tica de los instantes decisivos y las tomas del famoso Henri Cartier-Bresson.
Dos a?os en el desierto
"Alguien deb¨ªa no s¨®lo inventariar, sino fotografiar todas aquellas cosas que estaban desapareciendo d¨ªa a d¨ªa". De este modo justifica la intencionalidad de este proyecto su autor, Jordi Esteva. Hechizado por los oasis, durante dos a?os se dedic¨® a recorrer el desierto b¨ªblico. Para la realizaci¨®n de sus registros cont¨® con la complicidad de los uahit¨ªes que le dieron acceso y lo integraron en sus actividades cotidianas. Parti¨® de una premisa, jam¨¢s le interes¨® captar ni las dunas ni los espejismos que tanto fascinaron a sus colegas que por all¨ª anduvieron unas cuantas d¨¦cadas antes, tampoco las tomas de los templos fara¨®nicos que hicieron las delicias de los ilustradores de enciclopedias durante todo el siglo XIX. Un ¨¢lbum del que Sami Na?r escribi¨® acertadamente que se trata de un viajero fara¨®nico, b¨ªblico, testamentario y cor¨¢nico.En el mismo circuito, s¨®lo que en Francia, (Fnac, Saint Lazare, Par¨ªs; hasta el 6 de septiembre) una interesante galer¨ªa de retratos sobre el mundo del cine que huye de las producciones al uso realizadas por Yul Brynner en su faceta de fot¨®grafo, principalmente durante los rodajes. El actor calvo sol¨ªa llevar una c¨¢mara de la que no se despegaba ni un momento y con la que disparaba de forma constante; sus tomas relatan bellamente lo que la parafernalia del rodaje omit¨ªa. As¨ª, su autorretrato con Ingrid Bergman (1955), durante el rodaje de Anastasia, de Anatole Litvak, o el realizado con Cecil B. DeMille durante la filmaci¨®n de Los diez mandamientos (1955).
Pero lo cierto es que su verdadera vocaci¨®n fue la de realizador a la vez que la de un gran fot¨®grafo, puesto que para ¨¦l aquella actividad sintetizaba todas las facetas de la creatividad, como lo explica y justifica Victoria Brynner, su hija, que subraya que sobrepasaba con mucho pasionalmente su profesi¨®n de actor. Explica en la presentaci¨®n de la exposici¨®n que "era un hombre con curiosidad por todo; c¨¢mara en mano, buscaba lo verdadero de cada uno, sab¨ªa escuchar y observar con su coraz¨®n. Sus retratos est¨¢n llenos de amor y de un verdadero sentido de la intimidad".
Actividad paralela
Como por circunstancias diversas no pudo realizarse en esta profesi¨®n -de realizador-, cubri¨® la laguna con la actividad paralela de fot¨®grafo. Sus instant¨¢neas las guard¨® celosamente y las ense?aba solamente en la intimidad. Con ellas construy¨® un ¨¢lbum ¨ªntimo, realizado d¨ªa a d¨ªa en el que incardinaba biogr¨¢ficamente las an¨¦cdotas de los rodajes disparadas, con vocaci¨®n de diario y de la construcci¨®n de un relato visual autobiogr¨¢fico.Se trata de tomas tan personales que su propia hija -que fecha la faceta de fot¨®grafo de su padre a ra¨ªz de la producci¨®n de la pel¨ªcula El rey y yo- confiesa: "A trav¨¦s de ellas he descubierto una singular autobiograf¨ªa que me han ayudado a descubrir una serie de facetas que desconoc¨ªa de mi padre".
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