Las atracciones de feria carecen de normas de seguridad espec¨ªficas

No hay una regulaci¨®n espec¨ªfica para la seguridad de las atracciones de parques y ferias ambulantes. As¨ª lo reconocieron ayer a EL PA?S fuentes del Ministerio de Industria, quienes aseguraron que cada aparato se rige por sus propias normas de fabricaci¨®n. Mientras, organizaciones de consumidores y usuarios denuncian la falta de control y prevenci¨®n de accidentes tras los cinco ocurridos este verano, tres de ellos mortales.

La instalaci¨®n de una atracci¨®n en una feria o parque, que es competencia de cada Ayuntamiento, exige tres requisitos: un seguro de responsabilidad civil, un certificado de instalaci¨®n el¨¦ctrica y la inspecci¨®n de un t¨¦cnico sobre la seguridad del aparato. En la tercera exigencia es donde surge un vac¨ªo legal, seg¨²n denunci¨® ayer Antonio de la Torre, miembro de la Organizaci¨®n de Consumidores y Usuarios (OCU).Fuentes del Ministerio de Industria confirmaron ayer la ausencia de regulaci¨®n, aunque dieron a conocer que la Asociaci¨®n Espa?ola de Normalizaci¨®n (AENOR) -organismo integrado en la instituci¨®n europea de normalizaci¨®n- est¨¢ realizando un estudio de campo que permitir¨¢ la' pr¨®xima creaci¨®n de una normativa europea de seguridad. "En principio, las normas se iban a incluir en la Directiva de M¨¢quinas de 1992, pero luego se excluy¨® expresamente", explicaron en Industria.

Mientras que un seguro se puede obtener en cualquier compa?¨ªa aseguradora especializada y la revisi¨®n el¨¦ctrica la hace una empresa de inspecci¨®n -que verifica que se cumplen una serie de requisitos (conexiones bien hechas, toma de tierra ... ) que establece cada Comunidad Aut¨®noma para su territorio- la seguridad de la atracci¨®n resulta bastante m¨¢s arbitraria.

En principio, se rige por el Reglamento de espect¨¢culos. "?ste s¨®lo indica que los aparatos deben ser seguros, sin se?alar las condiciones que deben cumplir. Los Ayuntamientos carecen as¨ª de una referencia para poder exigir a las atracciones", explic¨® ayer De la Torre. Seg¨²n ¨¦l, el inspector local se limita a verificar que la instalaci¨®n ha sido dise?ada por un ingeniero y que cumple las normas de seguridad de fabricaci¨®n. Pero ¨¦stas var¨ªan seg¨²n el aparato y muchas veces ni siquiera son controladas por la Administraci¨®n espa?ola, sino que proceden del pa¨ªs de origen de la atracci¨®n. La mayor¨ªa de ¨¦stas, seg¨²n Industria, proceden de Alemania y Estados Unidos.

Autorregulaci¨®n

De la Torre resalt¨® que, en definitiva, la seguridad "depende de la propia responsabilidad del due?o de la atracci¨®n y de lo que haya intentado hacer". En su opini¨®n, los t¨¦cnicos pueden comprobar que un aparato funciona correctamente, pero no tienen por qu¨¦ comprobar si se dan requisitos adicionales de seguridad para las personas: "Pueden comprobar si los cierres funcionan adecuadamente, pero no est¨¢n obligados por ejemplo a probar que la velocidad que coge el aparato es adecuada para las personas".

La paradoja, seg¨²n De la Torre, es que existen atracciones donde se trabaja al m¨¢ximo nivel de seguridad, como ocurre en una gran instalaci¨®n como Port Aventura en la que se hacen pruebas con cargas o incluso con maniqu¨ªes, que conviven con peque?as atracciones donde se hacen las pruebas m¨ªnimas, a veces por falta de medios.

La OCU ha realizado adem¨¢s un estudio en siete parques de atracciones y en seis ferias ambulantes de todo el pa¨ªs, en el que ha detectado que los problemas m¨¢s habituales de las instalaciones son la falta de seguridad y las deficiencias en el mantenimiento, as¨ª como la ausencia de instrucciones de uso a la vista de los clientes. "La falta de vigilancia, la pobre informaci¨®n de las personas encargadas y la imprudencia de los usuarios" son factores que aumentan el riesgo, seg¨²n el mismo informe.

Desde la OCU se lamenta que no exista tampoco un registro de los accidentes que se producen. "Si una atracci¨®n da fallos, como es el caso de El Saltamontes [atracci¨®n en la que se han producido dos de los ¨²ltimos accidentes], conocer su existencia puede ayudar a revisar esta atracci¨®n en otros sitios", explic¨® De la Torre.

La Uni¨®n de Consumidores de Espa?a (UCE) es otra de las organizaciones que se ha sumado a las cr¨ªticas a la falta de prevenci¨®n de los accidentes. "Queremos que se aumenten las inspecciones y la. periodicidad de ¨¦stas", pidi¨® su responsable de salud y seguridad infantil Rafael Urrialde, "si hace falta que vayan todos los d¨ªas, que lo hagan".

Aunque Urrialde reconoce que muchos de los accidentes producidos este verano se deb¨ªan a la imprudencia y el comportamiento de los usuarios, se quej¨® de que no exista la obligaci¨®n de mostrar al p¨²blico las normas de uso. "Tambi¨¦n deber¨ªa existir un distintivo que muestre cu¨¢ndo se hizo la ¨²ltima inspecci¨®n", a?adi¨®.