Austria practica a¨²n la esterilizaci¨®n forzosa

Las denuncias por las operaciones de esterilizaci¨®n a las que se ha sometido forzosamente a deficientes mentales y otras personas consideradas "asociales" han traspasado ya la frontera de Suecia, donde comenzaron. Los Gobiernos de Austria, Suiza y Noruega tambi¨¦n pusieron en pr¨¢ctica una pol¨ªtica destinada a purificar la sociedad y a eliminar de ella elementos distorsionadores. Mientras en Suecia el Gobierno ha anunciado una investigaci¨®n del esc¨¢ndalo, algunos grupos denunciaron ayer que las esterilizaciones forzosas contin¨²an efectu¨¢ndose en Austria. Las v¨ªctimas son disminuidas ps¨ªquicas.

"Cerca del 70% de las mujeres disminuidas ps¨ªquicas son esterilizadas en Austria, y eso ocurre mayoritariamente en contra de su voluntad", declar¨® a la agencia Reuter Theresia Haidlmayr, portavoz en materias de sanidad del Partido Verde. El asunto es un tab¨² en Austria y no hay cifras oficiales, pero la pr¨¢ctica est¨¢ extendida y es legal. La Constituci¨®n austriaca prohibe la discriminaci¨®n contra los disminuidos ps¨ªquicos, pero no existe una ley en contra de la esterilizaci¨®n forzosa, lo que abre v¨ªas para esa pr¨¢ctica. As¨ª lo denunci¨® ayer tambi¨¦n la asociaci¨®n de ayuda a los minusv¨¢lidos Lebenshilfe."La esterilizaci¨®n forzosa se realiza a menudo bajo falsos pretextos", dice Haidlmayer. La mayor parte de las operaciones tienen lugar antes de que los pacientes alcancen la mayor¨ªa de edad, normalmente a los 10 u 11 a?os.

Cuando Adolf Hitler lleg¨® al poder en Alemania, en 1933, una de las primeras leyes aprobadas fue la de la esterilizaci¨®n de las mujeres disminuidas. M¨¢s tarde orden¨® la ejecuci¨®n de todos los disminuidos f¨ªsicos y ps¨ªquicos por considerar que "no merec¨ªan vivir".

Debate sobre la eugenesia

Como tel¨®n de fondo estaba, desde los a?os veinte, el debate sobre la eugenesia y la purificaci¨®n de la raza que se viv¨ªa en el norte de Europa. En el cant¨®n suizo de Vaud, las esterilizaciones forzosas fueron aprobadas por una ley de 1928, y continuaron hasta hace 20 a?os, seg¨²n declar¨® ayer un profesor de Historia de la Universidad de Lausana. Una copia de esa ley fue pasada en 1934 a Hitler.

"Hasta Hitler pidi¨® una copia de la ley como base de las propias leyes racistas de Alemania", declara el profesor Hans Ulrich Jost. "Es dif¨ªcil decir cu¨¢ntas esterilizaciones se realizaron, pero el n¨²mero debi¨® ser muy alto".

Las esterilizaciones forzosas comenzaron en el cant¨®n de Vaud, francohablante y situado en el oeste de Suiza, por iniciativa del psiquiatra suizo Auguste Forel, que lleg¨® all¨ª desde Z¨²rich y convenci¨® a los funcionarios de la necesidad de una campa?a de "higiene racial". Aunque la ley se reduc¨ªa a Vaud, el profesor Ulrich Jost cree que se aplic¨® en toda Suiza.

En Suecia, el Gobierno anunci¨® ayer la creaci¨®n de una comisi¨®n oficial para investigar por qu¨¦ 60.000 mujeres fueron esterilizadas a la fuerza entre 1936 y 1976. La ministra de Asuntos Sociales, Margot Wallstr?m, declar¨® que se considerar¨¢ tambi¨¦n una compensaci¨®n a las v¨ªctimas que a¨²n est¨¦n vivas, una cifra que se calcula en unas 25.000.

Por falta de gafas

Una de ellas es Mar¨ªa Nordin, de 72 a?os, de momento, la ¨²nica afectada que se ha atrevido a hablar en p¨²blico. "Cuando comenc¨¦ el colegio era muy t¨ªmida. Ten¨ªa problemas de vista, pero yo no pod¨ªa permitirme unas gafas. No pod¨ªa ver bien lo que escrib¨ªan en la pizarra. Por eso me enviaron a una escuela especializada", cont¨® Mar¨ªa a uno de los principales diarios suecos, el Dagens Nyheter. S¨®lo sali¨® de esa escuela a los 17 a?os, despu¨¦s de firmar un documento sobre su propia ovariotom¨ªa. "Yo firm¨¦ porque sab¨ªa que deb¨ªa hacerlo si quer¨ªa salir de all¨ª".

El asunto, que ha sido silenciado durante d¨¦cadas en Suecia -se ha eliminado de los libros de historia y medicina todo rastro de la pr¨¢ctica y los doctores, que en su d¨ªa fueron populares- ha saltado a la palestra pol¨ªtica a un a?o de las elecciones. La esterilizaci¨®n fue impulsada y llevada a cabo por los socialdem¨®cratas, que han dominado los Gobiernos suecos durante la mayor parte del siglo. El l¨ªder de la oposici¨®n, el conservador Carl Bild, se ha erigido en la voz cr¨ªtica que pide responsabilidades, en un momento en que, gracias al prestigio adquirido durante su misi¨®n en Bosnia, puede arrebatar el Gobierno a los socialdem¨®cratas.