El arzobispo de Mil¨¢n pide a la Iglesia un examen de conciencia

El ¨¦xito de las convocatorias papales -el ¨²ltimo viaje de Karol Woityla a Par¨ªs el mes pasado atrajo a un mill¨®n de j¨®venes procedentes de todo el mundo- no ciega los ojos de la Iglesia Cat¨®lica.La alta jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica es consciente de la p¨¦rdida de poder de la instituci¨®n milenaria, y busca desesperadamente una soluci¨®n a los problemas del cristianismo en nuestro tiempo. Para el arzobispo de Mil¨¢n, Carlo Mar¨ªa Martini, uno de los candidatos m¨¢s firmes a la sucesi¨®n de Juan Pablo II, la recuperaci¨®n de la Iglesia: pasa por una profunda reflexi¨®n interna que la salve de la situaci¨®n actual de esclerotizaci¨®n.

El arzobispo de Mil¨¢n pertenece al sector de los que no se dejan enga?ar por las manifestaciones de masas. Esas concentraciones millonarias que tienen m¨¢s que ver con el mundo del espect¨¢culo que con el de la espiritualidad.

En su ¨²ltima carta pastoral, que acaba de publicarse en Italia bajo el t¨ªtulo Tres cuentos del Esp¨ªritu, Martini, uno de !os nombres m¨¢s respetados entre la jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica italiana, pone el dedo en la llaga de los problemas de la instituci¨®n cat¨®lica.

Alerta contra la "burocratizaci¨®n" de una Iglesia que ha practicado durante demasiado tiempo el absolutismo ideol¨®gico y que debe, a su juicio, regresar a las esencias espirituales, reflexionar sobre s¨ª misma y sus responsabilidades propias, para ejercer el liderazgo moral.

Abuso medi¨¢tico

El arzobispo utiliza la par¨¢bola del "amigo inoportuno" para reclamar el espacio moral esencial de la Iglesia frente a la sociedad de hoy, poniendo de relieve que la misi¨®n pastoral en este mundo es la de "importunar" a una sociedad que vive al margen de la "trascendencia", al m¨¢rgen del "Esp¨ªritu", preocupada exclusivamente por el bienestar material.

Pese a los esfuerzos de los expertos vaticanistas por emparejar esta visi¨®n con el impulso reformador del actual Papa, Juan Pablo II, especialmente a ra¨ªz de su intervenci¨®n del mes pasado en Par¨ªs, cuando pidi¨® publicamente perd¨®n a los protestantes, la propuesta de Martini se aleja notablemente del toque medi¨¢tico que ha caracterizado el papado de Karol Wojtyla.

La visi¨®n que da Carlo Mar¨ªa Martini de la nueva Iglesia Cat¨®lica es la de una instituci¨®n dispuesta al "examen de conciencia". En un tono que huye deliberadamente de todo triunfalismo, el arzobispo de Mil¨¢n propone, pues, la autocr¨ªtica. "La apuesta que est¨¢ en juego", escribe el arzobispo, "no es balad¨ª, ni se mide con c¨¢lculos menores como un mezquino juego de poder dentro de la Iglesia o de la propia sociedad", afirma en la mencionada pastoral que ha colocado su dardo en la conciencia cat¨®lica.