Ordenadores que no llegaban

Algunas de las sospechas contables m¨¢s documentadas de la Comunidad de Madrid sobre los manejos de la Asociaci¨®n Pro Cultura del Olivo Mediterr¨¢neo se refieren a sus suministros inform¨¢ticos. Secanella confi¨® el alquiler de los equipos a la empresa Ekinsa, adjudicatar¨ªa habitual de la Universidad Complutense, sobre todo de la propia Facultad de Periodismo. Pero en la Consejer¨ªa de Econom¨ªa han devuelto las facturas de Ekinsa por irregularidades, seg¨²n el director general de Empleo, Javier Vallejo.Petra Secanella asegur¨® ayer que los equipos hab¨ªan funcionado desde el primer d¨ªa: "Ten¨ªamos una instalaci¨®n por todo lo alto y todo se ajustaba al dinero aprobado". Su testimonio, sin embargo, se contradice con el de algunos participantes en los cursos de Periodismo Escrito que se impart¨ªan en el centro de formaci¨®n Pedro Pati?o de Getafe. "Los ordenadores tardaron en llegar, como poco, tres semanas, y cuando llegaron eran s¨®lo tres McIntosh", relat¨® un inteizrante del grupo.

Durante ese periodo, los alumnos deb¨ªan conformarse con utilizar computadoras poco potentes que tomaban prestadas del propio centro de formaci¨®n. No s¨®lo eso: seg¨²n ese relato, esas pr¨¢cticas period¨ªsticas acababan maquet¨¢ndose en la redacci¨®n de una publicaci¨®n local, El buz¨®n de Getafe. La idea inicial era que el trabajo de los alumnos se encartara los domingos en El buz¨®n, pero nunca se materializ¨®.