La Universidad Cat¨®lica de ?vila no podr¨¢ eludir las normas generales

El Consejo de Estado ha marcado con claridad los l¨ªmites de las universidades del obispo, creadas en ?vila y en Murcia por ls correspondientes prelados. En un dictamen de 23 folios arobado el jueves y enviado a la ministra de Educaci¨®n, Esperanza Aguirre, se reconoce a los obispos el derecho a crear universidades, pero ¨¦stas deben someterse a las normas de funcionamiento de las privadas, sin que puedan acogerse a peculiaridades derivadas de los acuerdos de Espa?a con la Santa Sede. Adem¨¢s, se rechaza que un prelado pueda crear una universidad en beneficio de una fundaci¨®n, como ha sucedido en ?vila.

"No es viable configurar sin m¨¢s las universidades creadas por la Iglesia Cat¨®lica como una tercera categor¨ªa distinta de las universidades p¨²blicas y privadas", se afirma en el dictamen, que reproduce los argumentos jur¨ªdicos incluidos por el letrado Ernesto Garc¨ªa-Trevijano en su proyecto de dictamen, dado a conocer por este diario el pasado 26 de diciembre. En consecuencia, todas las que no son p¨²blicas son privadas, por lo que "las universidades que eventualmente establezca la Iglesia cat¨®lica deber¨¢n cumplir los requisitos exigidos" a las privadas.La pol¨¦mica de las universidades del obispo surgi¨® a partir de las iniciativas del prelado de ?vila, Antonio Ca?izares, (actualmente destinado en Granada), y del de Cartagena, Javier Azagra (con jurisdicci¨®n sobre la comunidad murciana). Ambos obispos se, ampararon en los acuerdos de 1979, entre Espa?a y la Santa Sede sobre ense?anza y asuntos culturales para crear sus universidades, cuyo funcionamiento pretend¨ªan mantener al margen de las normas generales, prescritas por la Ley de Reforma Universitaria y el real decreto de requisitos m¨ªnimos.

La escasa credibilidad cient¨ªfica y educativa de los proyectos provoc¨® la alarma de la comunidad universitaria, incluido el anterior equipo de Universidades, formado por el ex secretario de Estado Fernando Tejerina y su director general, Alfonso Fern¨¢ndez-Miranda. Ambos recomendaron a la ministra, Esperanza Aguirre, que solicitara al Consejo de Estado un dictamen, que no es vinculante, aunque ser¨¢ previsiblemente atendido. Aunque el escrito se refiere a ?vila, su contenido es aplicable a cualquier caso similar.

El Consejo mantiene que cualquier universidad cat¨®lica, excluido el acto formal de la creaci¨®n (a cargo de los obispos), "para ejercer sus actividades y para el reconocimiento a efectos civiles de los estudios en ella realizados, debe sujetarse ala legislaci¨®n vigente del Estado".