Arbolitos s¨ª, belenes no
La Iglesia cat¨®lica cubana recibi¨® con satisfacci¨®n la decisi¨®n del Gobierno de Fidel Castro de decretar festivo el d¨ªa 25, si bien expres¨® p¨²blicamente su deseo de que "el car¨¢cter excepcional" que tendr¨¢ este a?o la fiesta -"s¨®lo como un gesto hacia el Papa en v¨ªsperas del viaje que realizar¨¢ en enero a la isla"-, se transforme pronto en algo definitivo, en una restauraci¨®n plena de la Navidad.Para la Iglesia, en cambio, es muy dif¨ªcil comprender las razones por las que las autoridades cubanas transigen con los arbolitos de Navidad, las guirnaldas o con Pap¨¢ No?l y, en cambio, tienen absolutamente prohibidos los belenes.
Esta medida sui generis fue dictada hace dos a?os, cuando la fiebre navide?a de algunos cubanos hizo que apareciesen como hongos adornos navidenos en hospitales, escuelas y diversas dependencias estatales. Cuba viv¨ªa entonces un momento de fuertes contradicciones ideol¨®gicas (tambi¨¦n ahora), lo que provoc¨® que el Partido Comunista prohibiese la colocaci¨®n de adornos navide?os en los centros estatales y redujese la festividad s¨®lo a los hoteles, tiendas y centros tur¨ªsiticos de la isla.
La disposici¨®n tomada en aquel momento estableci¨® que quedaba absolutamente prohibida la colacaci¨®n de nacimientos, incluso en los hoteles, esgrimiendo una raz¨®n que no convenci¨® a muchos: el arbolito era un adorno pagano, no identificable con ninguna religi¨®n en concreto, mientras que el bel¨¦n era un adorno de indudable filiaci¨®n cat¨®lica. Esto, seg¨²n la tesis oficial, hubiese favorecido a la religi¨®n cat¨®lica en detrimento de las otras que se practican en el pa¨ªs, lo cual hubiera ido en contra del principio de la igualdad que preconiza la revoluci¨®n.
No obstante, las autoridades han aclarado que los cubanos son libres de poner en su casas los adornos que deseen, ya sean arbolitos o belenes. S¨®lo hay un problema. No se venden nacimientos ni las tradicionales figuritas en las tiendas que se pagan en d¨®lares, las ¨²nicas que tienen el mejor surtido de productos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
