"El ajuste econ¨®mico no esta finalizado, ni mucho menos
Emilio Ybarra (San Sebasti¨¢n, 1936) acaba de cerrar, como presidente del BBV, el proceso de modernizaci¨®n que persegu¨ªa con el Programa 1.000 d¨ªas. Ahora se dispone a afrontar la etapa que se abre con la entrada en la moneda ¨²nica, en la que prev¨¦ un proceso de concentraciones bancarias.Sostiene que la situaci¨®n econ¨®mica ha mejorado, pero que todav¨ªa el ajuste est¨¢ por terminar.
Relajado, Emilio Ybarra parece sentirse a gusto con el tama?o alcanzado por el Banco Bilbao Vizcaya (BBV) para hacer frente a los cambios que traer¨¢ la moneda ¨²nica y con los resultados del Programa 1000 D¨ªas que el banco acaba de culminar. En los ocho a?os que cumple en estos d¨ªas como presidente de la entidad, ha tenido que superar los desencuentros que llegaron tras la fusi¨®n de los antiguos Bilbao -su banco originario- y Vizcaya. Ahora comienza otra etapa, en la que Ybarra cree que se van a producir concentraciones bancarias irremediablemente. Tambi¨¦n subraya que la implantaci¨®n en Latinoam¨¦rica es una plataforma considerable para abordar con ¨¦xito ese proceso.Pregunta. ?Qu¨¦ opini¨®n tiene de la situaci¨®n de la econom¨ªa espa?ola?
Respuesta. La mejora de la econom¨ªa espa?ola en los ¨²ltimos a?os es evidente. Es verdad que la situaci¨®n econ¨®mica internacional ha ayudado, pero tambi¨¦n lo esque el Gobierno ha sabido aprovechar esa bonanza con una pol¨ªtica econ¨®mica acertada. Entre los aspectos m¨¢s favorables de esa pol¨ªtica yo citar¨ªa el decidido recorte del d¨¦ficit p¨²blico y las medidas liberalizadoras en diversos ¨¢mbitos.Todo ello ha permitido rebajar la inflaci¨®n, crear empleo y situar a Espa?a en las puertas de la uni¨®nmonetaria. Como aspectos pendientes, se?alar¨ªa el de la reforma de la fiscalidad, con la reducci¨®n de determinadas cargas impositivas, tal como nos prometi¨® el Gobierno y como parece dispuesto a poner en marcha. Adem¨¢s, no hay que olvidar la fiscalidad del ahorro, que actualmente discrimina entre instrumentos, lo que no es positivo para una asignaci¨®n eficiente de los recursos. Tambi¨¦n hay que profundizar en el proceso de desreglamentaci¨®n de determinados ¨¢mbitos y sectores.
P. ?Considera que se est¨¢n haciendo las reformas estructurales necesarias, no ya para incorporarse al euro, sino para mantenerse en el sin apuros?
R. El criterio de d¨¦ficit p¨²blico se ha logrado cumplir de forma bastante ajustada. Por ello, tenemos que reducirlo bastante m¨¢s para que cuando la coyuntura econ¨®mica cambie, y haya autom¨¢ticamente un nuevo impulso al alza en el d¨¦ficit p¨²blico, no lleguemos al umbral a partir del cual nos afecten las sanciones establecidas. El proceso de ajuste no est¨¢ finalizado, ni mucho menos. La eficacia en el control del gasto p¨²blico tiene que ser algo permanente en el nuevo contexto monetario en el que se va a mover Espa?a.
P. ?Cree que persistir¨¢n durante mucho tiempo las turbulencias que provienen de Asia? ?Qu¨¦ efectos pueden tener para la econom¨ªa espa?ola?
R. Tengo la impresi¨®n de que lo peor de la crisis ha quedado ya atr¨¢s. Aunque, ahora, queda el ajuste de las econom¨ªas asi¨¢ticas para reconducir sus desequilibrios situarse en condiciones suficientemente competitivas. La crisis afectar¨¢ a algunas econom¨ªas-asi¨¢ticas, pero su efecto directo sobre, la econom¨ªa y la banca espa?ola es escaso, porque las relaciones econ¨®micas entre aquellos pa¨ªses y Espa?a no son intensas. M¨¢s importante puede ser el efecto indirecto a trav¨¦s del menor crecimiento mundial.
P. ?C¨®mo ha afectado al BBV?
R. El banco no ha resultado afectado en ninguna de las insolvencias que se han producido en la regi¨®n. Teniendo en cuenta el deterioro de la situaci¨®n financiera de muchos pa¨ªses, el BBV adopt¨® una pol¨ªtica de prudencia para disminuir su exposici¨®n al riesgo con la regi¨®n. As¨ª nos adelantamos a acontecimientos posteriores. Las actuaciones se iniciaron en marzo en Corea del Sur, reduciendo las l¨ªneas de cr¨¦dito. Esa pol¨ªtica continu¨® aplic¨¢ndose en Tailandia, Indonesia y Malaisia.
Actualmente, sin incluir Jap¨®n, BBV mantiene riesgos en la regi¨®n por 400 millones de d¨®lares [unos 60.000 millones de pesetas] concentrados en los lugares mejor calificados por su solvencia (Singapur, Taiwan y Hong Kong) por operaciones a corto plazo. Pr¨¢cticamente los riesgos son nulos con el resto de los pa¨ªses. En cuanto a Jap¨®n, con unos riesgos por 2.000 millones de d¨®lares [300.000 millones de pesetas] hemos reducido selectivamente sus l¨ªneas y clientes, concentr¨¢ndonos en las entidades y empresas de mejor calidad y a plazos muy cortos. En octubre se cerr¨® la oficina operativa de Tokio.
P. ?Cree que es el fracaso de un sistema ultracapitalista, llevado asta su extremo?
R. Creo que el sureste asi¨¢tico llevaba demasiados a?os seguidos un ritmo vertiginoso. Ahora comienzan a aparecer los grandes pa¨ªses asi¨¢ticos, como China, India, que empiezan a crear sus instrumentos y a ser competencia de los peque?os.
P. El efecto contagio sigue. As¨ª se ha vuelto a ver con la ca¨ªda de la Bolsa de Nueva York el viernes las menores de las europeas. Eso afecta, adem¨¢s, a los mercados latinoamericanos, donde precisamente est¨¢ el BBV muy implantado. Ah¨ª s¨ª hay riesgo.
R. Es verdad. Am¨¦rica se va a ver m¨¢s afectada que Europa como consecuencia de su proximidad. Pero nosotros hemos invertido siempre en primeras marcas de cada pa¨ªs y, por ello, tenemos consolidadas nuestras inversiones. Esamos satisfechos de estar mejorando la gesti¨®n de esos bancos, el riesgo, la eficiencia. ?Teme que a la crisis asi¨¢tica se sumen las turbulencias que, seg¨²n algunos expertos, se pueden producir a medida que se implante del euro?
R. El temor a las turbulencias derivadas del euro afecta, m¨¢s bien, al periodo anterior a la decisi¨®n sobre pa¨ªses y paridades. Pero muchas de las incertidumbres sobre el euro est¨¢n ya resueltas, lo que ha contribuido a que hayamos asistido a un ejercicio de 1997 con una notable ausencia de inestabilidad. Sobre lo que puede pasar en 1998, creo que est¨¢ bastante asumido que van a tener euro todos los pa¨ªses que lo deseen, salvo Grecia, y s¨®lo la fijaci¨®n de los tipos de cambio podr¨ªa ser un elemento distorsionador, pero no creo que vayan a producirse grandes turbulencias.
P. ?Qu¨¦ supondr¨¢ para Espa?a?
R. Un cambio radical. Para un pa¨ªs, como Espa?a, que hist¨®ricaente no ha gozado de suficiente credibilidad econ¨®mica, supone entrar en una nueva era con tipos de inter¨¦s bajos, ausencia de desquilibrios econ¨®micos sustanciales y un tipo de cambio estable. Supone, tambi¨¦n, incorporarse a un mercado globalizado que, a partir de ahora, s¨ª que va a ser verdaderamente ¨²nico, con todo lo que ello supone para las empresas, para los costes, para la movilida de los factores de producci¨®n, etc¨¦tera. La apertura al exterior va a ser decisiva. Tenemos que darnos cuenta de que va a haber mucha m¨¢s competencia. Se liberaliza m¨¢s. Son m¨¢s problemas, pero no hay que asustarse.
P. Aquellas guerras con el actio y el pasivo parecen ya pasadas a la historia, ?qu¨¦ guerras de competencias se avecinan ahora con m¨¢s protagonistas y con el euro de fondo?.
R. Realmente las grandes guerras con grandes diferencias de precios van a ser muy peque?as. Si las hay, puede ser peligroso. Ahora, la banca debe cuidar mucho los m¨¢rgenes. La competencia va a estar en la calidad.
P. ?Qu¨¦ grandes transformaciones espera para el sector financiero con la llegada del euro?
R. Al sector financiero le van a cambiar la materia prima b¨¢sica con la que trabaja, el dinero y a partir de ah¨ª muchas cosas m¨¢s. Yo distinguir¨ªa dos tipos de consecuencias. A corto plazo, los aspectos operativos son los m¨¢s importantes, y tendremos que cambiar la mayor parte de nuestras aplicaciones inform¨¢ticas, adem¨¢s de preparar toda nuestra organizaci¨®n para el nuevo entorno. Pero el cambio decisivo va a ser a medio y largo plazo: cambios en los productos, en las relaciones con la clientela o en los niveles de competencia. En definitiva, con la llegada del euro necesitamos definir una nueva estrategia adecuada para hacer frente al nuevo escenario. Y es que Europa cada vez va a ser un continente m¨¢s coordinado. Y eso llevar¨¢ a concentraciones, fusiones, compras..., bancos que se apoyen para hacer cosas conjuntas en otros pa¨ªses, para fortalecer servicios, para compartir clientes, para hacer servicios generalizados en todo el mundo entre varios. A partir de ah¨ª habr¨¢ que ponerse a trabajar, a discurrir, para poder entenderse con otros. Hay m¨²ltiples posibilidades. Las concentraciones son favorables, aunque no la soluci¨®n. No son buenas en s¨ª mismas. Aunque es verdad que ese proceso de concentraciones se acelerar¨¢ en Europa con la llegada del euro.
P. En esa concentraci¨®n, ?cree que se producir¨¢n fusiones en Espa?a?
R. Desde luego, la estructura del sistema bancario espa?ol no est¨¢ consolidada. Es necesario depurar el exceso de capacidad que existe y debe darse soluci¨®n a las entidades con estrategia menos definida. Por ello pienso que, al menos te¨®ricamente, se van a producir fusiones o adquisiciones a medio plazo. En la pr¨¢ctica, esos procesos son m¨¢s dificultosos.
P. ?Y el BBV qu¨¦ papel jugar¨¢?
R. No renunciamos a nada de antemano. Todo depender¨¢ de la mejora de posici¨®n competitiva y de los t¨¦rminos financieros de la misma. Te¨®ricamente podemos tomar participaciones en bancos, con alianzas o cruce de participaciones, acuerdos comerciales... Nuestro crecimiento debe ir por lo financiero, aunque en el sector industrial, donde ya tenemos una posici¨®n muy s¨®lida, seguiremos apostandos. Tambi¨¦n podemos hacer cosas industriales en Am¨¦rica.
P. Pero, ?dentro de Espa?a qu¨¦ quieren hacer? Se habla del Popular, tambi¨¦n de Argentaria.
R. Argentaria est¨¢ cerrada administrativamente.
P. ?Y con el Popular?
R. ?A qui¨¦n no le gusta el Popular, que es uno de los bancos m¨¢s rentables del mundo! Es un banco muy bueno, con el que siempre se pueden hacer cosas.
P. ?Pero interesa?
R. Puede ser interesante, dependiendo de qu¨¦ condiciones. Ellos tambi¨¦n tienen que estar interesados. No parece que, por el momento, haya nada. Antes de que me siga preguntando sobre los dem¨¢s grandes bancos espa?oles, le dir¨¦ que casi todas las combinaciones son te¨®ricamente posibles. Ahora bien, su concreci¨®n depender¨¢ de la conveniencia mutua y de los t¨¦rminos de cada operaci¨®n.
P. ?Tiene el BBV participaci¨®n en Argentaria?
R. No.
P. Tambi¨¦n son posibles alianzas, como usted dice, en Europa?
R. Lo que es evidente es que con banca universal es muy dif¨ªcil entrar en pa¨ªses con niveles tecnol¨®gicos superiores. Y a los grandes extranjeros les pasa lo mismo aqu¨ª. Pero s¨ª podemos hacer cosas en Latinoam¨¦rica porque el nivel tecnol¨®gico es distinto. Y all¨ª el BBV ha conseguido implantarse, lo que permite una plataforma muy importante para prestar servicios financieros entre aquella zona y Europa. Esto nos permite estar muy bien situados ante cualquier tipo de colaboraci¨®n.
P. ?Puede ser un buen aliado el Deutsche Bank?
R. Para que un aliado sea bueno, debe tener algo de lo que nosotros carezcamos. Y debe adolecer de algo que nosotros podamos ofrecer. S¨®lo una alianza planteada en t¨¦rminos como ¨¦stos, con beneficios mutuos, y bien instrumentada, tiene posibilidades de ¨¦xito. Te¨®ricamente, el Deutsche podr¨¢ ser un buen aliado, como tambi¨¦n lo pueden ser otros. En cualquier caso, el BBV ha reforzado su posici¨®n de forma decisiva en los ¨²ltimos tres a?os y hoy tenemos qu¨¦ intercambiar. Estamos en una posici¨®n de mayor fortaleza para cualquier negociaci¨®n. Pero el Deutsche es uno de los pocos que parece que aspira a hacer todo por s¨ª solo.
P. Ustedes tienen 400.000 millones de capacidad para comprar.
R. Hoy por hoy seguimos estudiando el mercado americano. No s¨®lo estamos comprando bancos, tambi¨¦n gestoras de pensiones. Pero en casi todos se ha establecido un sistema de pensiones privados y se han abierto las puertas para gestionar planes de pensiones, lo que da una capacidad de crecimiento muy grande. Queremos ampliar donde ya estamos y abrir donde no estamos.
P. ?Qu¨¦ opina del futuro de las cajas?
R. Van por un sendero de concentraci¨®n, que ya se ha producido en gran parte, aun manteniendo la especializaci¨®n regional. Pero sigue habiendo un n¨²mero excesivo de cajas en Espa?a. Ahora estamos asistiendo a un proceso en que est¨¢n saliendo de los entornos territoriales tradicionales e incluso compiten en otros sectores. A unas les est¨¢ saliendo bien.
P. ?No hay demasiado protagonismo de los gobiernos aut¨®nomos?
R. Las cajas tienen un problema de dependencia pol¨ªtica.
P. ?Y sobre su naturaleza jur¨ªdica, que les permite tener ventajas sobre la banca al expandirse?
R. Lo l¨®gico es que se tienda a una renovaci¨®n del sistema financiero.
P. El BBV acaba de culminar el Programa 1000 D¨ªas, ?cu¨¢l es su balance?
R. Lo fundamental es que hemos dado un salto significativo tras la fusi¨®n, que supuso un periodo dif¨ªcil que llev¨® tiempo. Cuando ya acabamos ese proceso y ten¨ªamos un banco con una cultura unificada e implantado, nos lanzamos a un proceso de crecimiento. Hemos pasado de ser un banco dom¨¦stico a uno internacional; de un banco que hac¨ªa la banca cl¨¢sica (comercial y corporativa) a un banco con muchos m¨¢s negocios con vol¨²menes de aportaciones al conjunto de beneficios. Nos hemos configurado como un banco moderno con presencia en ¨¢reas que antes eran marginales. Hemos hecho la gran operaci¨®n de internacionalizaci¨®n apostando por una posici¨®n geogr¨¢fica que nos va a permitir tasas de crecimiento muy importantes y en la aportaci¨®n de nuestro know how [conocimiento] frente a los competidores nos permitir¨¢ mejorar mucho.
El ¨¦xito ha sido conjuntar el esfuerzo de todos, habernos comprometido con objetivos anuales con los accionistas y con nuestros directivos. Frente a objetivos de incremento del 10% anual en el volumen de negocio, beneficios y dividendos, el crecimiento acumulado en estos tres a?os ha oscilado entre el 85% y el 125% en estos conceptos. La capitalizaci¨®n burs¨¢til, o valor de mercado del BBV, se multiplic¨® por cuatro en esos tres a?os y ha superado los 3,3 billones, la mayor del sector espa?ol con una diferencia cercana a un bill¨®n con el banco siguiente.
P. ?Qu¨¦ objetivo se ha marcado para el nuevo plan estrat¨¦gico su banco?
R. El nuevo plan lo anunciar¨¦ en la junta general de accionistas que este a?o adelantamos al 31 de enero, por lo que no puedo anticipar su contenido. En cualquier caso, dicho plan va a incluir objetivos ambiciosos y va a contener la respuesta estrat¨¦gica del BBV al entorno con que nos vamos a enfrentar cara al a?o 2000. Adem¨¢s, marcar¨¢, muy claramente, las v¨ªas a trav¨¦s de las cuales el BBV va a continuar creando valor para el accionista. Prevemos un crecimiento al menos de dos digitos.
P. ?Est¨¢ el BBV blindado ante una posible OPA hostil?
R. Nadie est¨¢ blindado de forma absoluta. El mejor blindaje es la revalorizaci¨®n permanente de nuestro propio capital. Mientras el mercado aumente el valor a nuestras acciones, ser¨¢ m¨¢s dif¨ªcil que nadie nos compre.
P. ?Est¨¢ interesado en que entren grupos industriales en el BBV?
R. Es estudiable, no estamos en contra de nada de eso.
P. ?Tiene previsto realizar cambios en su pol¨ªtica de inversiones industriales? ?Mantendr¨¢ sus participaciones en Telef¨®nica, Repsol o Iberdrola?
R. Nuestra pol¨ªtica de participaciones industriales tiene solera y nos ha proporcionado fuertes beneficios de manera estable, por lo que no tenemos por qu¨¦ hacer cambios sustanciales. S¨®lo irla adaptando a cada escenario. Pero la liquidez, la rotaci¨®n y la rentabilidad continuar¨¢n siendo sus principios clave. En cuanto a las participaciones que usted menciona, las consideramos estrat¨¦gicas y tienen un car¨¢cter de estabilidad. Pero eso no significa que no puedan ser sustituidas por otras, cuando llegue su periodo de maduraci¨®n. Este no lo contemplamos, por ahora.
P. ?Le inquieta la agresiva pol¨ªtica que mantiene Telef¨®nica en cuanto a toma de participaciones en medios de comunicaci¨®n?
R. Ante todo, quiero recordar que nuestra participaci¨®n no significa que participemos en la gesti¨®n. Todo lo que afecte a la evoluci¨®n futura de los beneficios de la empresa s¨ª que nos preocupa. Pero en Telef¨®nica existen temas estrat¨¦gicos bastante m¨¢s importantes que el de los medios de comunicaci¨®n y, sea como fuere, la cotizaci¨®n de la acci¨®n de Telef¨®nica se encuentra en sus m¨¢ximos niveles, por lo que no parece que el mercado se encuentre excesivamente inquieto por este asunto.
P. ?C¨®mo influyen en la vida normal del BBV, una instituci¨®n se?era en el Pa¨ªs Vasco, los continuos actos violentos de ETA?
R. Lamentablemente, tenemos que sufrir frecuentes ataques en nuestras instalaciones, al igual que el resto de las entidades financieras presentes en el Pa¨ªs Vasco. Yo s¨®lo puedo esperar y desear que en alg¨²n momento se supere este problema que est¨¢ deteriorando extraordinariamente la convivencia en el Pa¨ªs Vasco, y que est¨¢ empa?ando su imagen en el resto de Espa?a y en el ¨¢mbito internacional.
P. ?Por qu¨¦ ya no se hacen las reuniones entre los presidentes?
R. Sinceramente, se daba una sensaci¨®n de oligopolio que no exist¨ªa.
P. Va con frecuencia a La Moncloa.
R. Bueno, cuando me llaman, que han sido algunas veces, o cuando yo lo pido. No se trata de ir muchas veces, sino cuando hay cuestiones importantes.
P. ?Se siente el primer banco espa?ol?
R. Me siento el mejor banco espa?ol.
P. Con el permiso del Santander y de su tocayo, Emilio Bot¨ªn.
R. Nos estimula la competencia. El Santander tambi¨¦n es un gran banco y debido a las circunstancias estamos los dos en un lugar destacado.
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