Sectores de IU pedir¨¢n medidas contra Granados por la cesi¨®n de datos

Las viejas rencillas de Izquierda Unida y el af¨¢n de mantener la independencia de cada una de las federaciones han impedido enterrar definitivamente el uso de los datos confidenciales de los afiliados. Sectores de IU consideran que Pedro Granados, secretario de organizaci¨®n, deber¨ªa poner su cargo a disposici¨®n de la presidencia federal. Las federaciones de Navarra y Andaluc¨ªa plantear¨¢n batalla en la reuni¨®n que ma?ana tienen los coordinadores. Sectores como la Tercera V¨ªa lo Espacio Alternativo intentar¨¢n, matizadamente, dejar constancia de su oposici¨®n a una iniciativa que, cuando menos, bordea la ilegalidad.

La reuni¨®n de ma?ana de los coordinadores territoriales de IU puede ser movida. No parece f¨¢cil enterrar el asunto de la cesi¨®n y automatizaci¨®n del fichero de afiliados. Y hay federaciones que no olvidan. Y que tampoco perdonan. Las de Andaluc¨ªa y Navarra son las m¨¢s combativas, aunque no son las ¨²nicas que han mostrado su rechazo a la decisi¨®n adoptada por la secretar¨ªa de la organizaci¨®n. Navarra se siente, adem¨¢s, enga?ada. Tal vez porque sab¨ªa que la ley prohibe la aut¨®matizaci¨®n de datos sin permiso de los afectados entreg¨® el censo de afiliados en etiquetas autoadhesivas para su envio por correo. Con una condici¨®n: los datos no pod¨ªan ser copiados en soporte magn¨¦tico. La direcci¨®n federal, seg¨²n ha denunciado Navarra, dijo qu¨¦ s¨ª, pero incumpli¨® su promesa, copi¨® los datos y los utiliz¨®.Andaluc¨ªa ha ido en sus protestas mucho m¨¢s lejos. El Consejo Andaluz de IU ha puesto el grito en el cielo y ha pedido responsabilidades pol¨ªticas -"por menos en un partido serio se hubiera presetado la dimisi¨®n", asegura uno de sus dirigentes. La direcci¨®n de IU de Andaluc¨ªa ha enviado instrucciones a las agrupaciones para que ninguno de sus afiliados conteste el cuestionario. Hay maldades para todos los gustos. Porque frente a los argumentos del Consejo Andaluz que basa su protesta en el derecho a la intimidad de sus afiliados fuentes federales se?alan que lo que ocurre es que Andaluc¨ªa tiene hinchados sus censos y no quiere que se descubra cu¨¢l es la afiliaci¨®n real.

Maldad por maldad, algunos dirigentes se preguntan qui¨¦n autoriz¨® una operaci¨®n tan delicada. Aunque el responsable es Pedro Granados, lo cierto es que cuando se puso en marcha el proceso no hab¨ªa responsable alguno consolidado en su cargo, salvo el coordinador general. El Consejo Pol¨ªtico no hab¨ªa elegido todav¨ªa a los miembros de la Ejecutiva permanente ni, por supuesto, decidido que ser¨ªa Pedro Granados el responsable de organizaci¨®n.

M¨¢s grave es lo que les ha ocurrido a Nueva Izquierda o a Los Verdes de Andaluc¨ªa. Unos y otros abandonaron hace meses Izquierda Unida, pero todos han recibido en sus casas la tarjeta de la discordia.

Los Verdes de Andaluc¨ªa, como denunciaba recientemente uno de sus dirigentes, tiene m¨¢s raz¨®n para quejarse. Cuando en 1993 firmaron el protocolo de colaboraci¨®n con IU-Convocatoria por Andaluc¨ªa dejaron claro que sus datos no pod¨ªan salir de la comunidad andaluza. ?Qui¨¦n los ha mandado a Madrid?,se preguntan. ?Con permiso de qui¨¦n? Y lo que es peor: ?con esos datos han enviado tambi¨¦n el curr¨ªculo que rellenaron con datos sobre su historial pol¨ªtico y sindical?

Nadie lo sabe. Pero tampoco importa. Por si les sirve de consuelo siempre hay, como en la f¨¢bula, alguien que recoge las hierbas que arroja el sabio. Hay quienes sin haber sido jam¨¢s de izquierda Unida han recibido en su casa la tarjeta de la discordia ?C¨®mo han llegado a IU esos datos? Misterio.