"Se pod¨ªa dejar un calabozo", dice S¨¢nchez Montero

"Quiz¨¢ se pod¨ªa haber mantenido alg¨²n calabozo en pie, como recuerdo. Me habr¨ªa parecido bien, pero la verdad es que me preocupa m¨¢s el futuro que el pasado". As¨ª habla el veterano comunista Sim¨®n S¨¢nchez Montero, un visitante forzoso de los calabozos de la Puerta del Sol. Los pis¨® media docena de veces entre 1945 y 1977.

"Casi siempre me met¨ªan en una celda aislada de arriba. S¨®lo en una ocasi¨®n estuve en los calabozos del s¨®tano. Cuando lo pas¨¦ peor fue en 1959: una noche los polic¨ªas me pegaron un paliz¨®n que me dejaron sin sentido", sintetiza S¨¢nchez Montero. En su reciente libro Camino de libertad (Temas de Hoy) describe vivencias como ¨¦sta en Sol: "Un d¨ªa me bajaron a la celda donde me torturaban y me hicieron una serie de preguntas concretas, que despu¨¦s se convirtieron en afirmaciones. Como segu¨ªa negando, me tiraron al suelo y se ensa?aron". "Los calabozos eran muy peque?os. No se o¨ªan ruidos" recuerda este ex dirigente del PCE. "Los despachos de la Brigada Pol¨ªtico-social estaban en la parte de San Ricardo", prosigue. Precisamente desde una de las ventanas que dan a ese callej¨®n se arroj¨® el tambi¨¦n comunista Juli¨¢n Grimau, seg¨²n la versi¨®n oficial. "Yo sigo sin creerme que ¨¦l se tirara", apostilla. Aquello ocurri¨® en abril de 1963. Veinte a?os despu¨¦s, en 1983, un delincuente, Santiago Corella, El Nani, fue internado all¨ª. No volvi¨® a saberse de ¨¦l.

La sede policial de Sol alberg¨® otros detenidos, a la postre ilustres, como el secretario general de la OTAN, Javier Solana; el escritor Rafael S¨¢nchez Ferlosio o el sindicalista Marcelino Camacho, quien volvi¨® a visitar los calabozos cuando el Gobierno regional se instal¨® en el edificio. Uno de los ¨²ltimos pol¨ªticos que lo pis¨® fue Santiago Carrillo, cuando era secretario general del ilegal PCE. S¨¢nchez Montero, de 82 a?os, conjur¨® la tentaci¨®n del regreso tur¨ªstico. "Pens¨¦ en hacerlo, pero estaba muy ocupado". Lo que no ha olvidado es el miedo que sinti¨® durante casi 40 a?os a que le llevaran a Sol. "Pod¨ªa ser preludio de golpes primero y de c¨¢rcel despu¨¦s", concluye.