La polic¨ªa de EE UU investiga dos j¨®venes por el "asalto inform¨¢tico" al Pent¨¢gono

"El ataque m¨¢s sistem¨¢tico y organizado contra el Pent¨¢gono", como lo defini¨® el n¨²mero dos de la Defensa de Estados Unidos, pudo ser obra de dos adolescentes que residen en Cloverdale, una diminuta localidad situada en el norte de California. La polic¨ªa ha preferido no detener todav¨ªa a los dos estudiantes de 16 y 17 a?os, con un alto nivel de conocimientos de inform¨¢tica. El viernes regresaron con normalidad al instituto, aunque dijeron a sus profesores que no hab¨ªan podido hacer los deberes "porque el FBI hab¨ªa estado registrando sus casas durante toda la noche".

El FBI tiene suficientes datos como para pensar que los dos estudiantes son los principales responsables del episodio de pirater¨ªa inform¨¢tica que m¨¢s da?o ha hecho a los sistemas de seguridad del Pent¨¢gono, especialmente en -su credibilidad. Los agentes encargados del caso sospechan que los dos adolescentes entraron al menos en 11 redes inform¨¢ticas y sistemas militares del Ej¨¦rcito de Estados Unidos y posiblemente en docenas de ordenadores con informaci¨®n gubernamental, incluyendo laboratorios de investigaci¨®n de armamento nuclear.El Pent¨¢gono reconoci¨® el pasado mi¨¦rcoles que se trataba del ataque cibern¨¦tico m¨¢s intenso que hab¨ªa sufrido hasta la fecha, aunque los responsables de la Defensa insistieron en que no se hab¨ªa accedido ni manipulado la informaci¨®n clasificada secreta. Sin embargo, John Hamre, n¨²mero dos del Departamento de Defensa, asegur¨® que los piratas hab¨ªan entrado "en mayor o menor medida" en todas las redes inform¨¢ticas del Pent¨¢gono.

Fuentes oficiales admiten que desconocen todav¨ªa los motivos que se esconden detr¨¢s de esta invasi¨®n inform¨¢tica, aunque los compa?eros de los dos estudiantes est¨¢n convencidos de que lo hicieron tan s¨®lo por el placer de conseguirlo. Agentes de la polic¨ªa y el FBI investigan todav¨ªa si la entrada en los ordenadores del Pent¨¢gono se produjo como resultado de una especie de competici¨®n con otros grupos de piratas inform¨¢ticos. Los dos j¨®venes lograron introducirse en algunas redes de ordenadores con lo que se denomina en terminolog¨ªa inform¨¢tica "poderes de administrador", es decir, el nivel superior de acceso y gesti¨®n de datos; los encargados de la investigaci¨®n aseguran que esa condici¨®n les pudo permitir tareas "prohibidas" a otros usuarios, como borrar ficheros o tener acceso a contrase?as.

Los 5.500 habitantes de Cloverdale, a 100 kil¨®metros al norte de San Francisco, no pod¨ªan entender por qu¨¦ decenas de agentes del FBI rodeaban las casas de dos familias perfectamente integradas en esa peque?a localidad, y s¨®lo conocidas por tener hijos con fama de buenos estudiantes. Fuentes de la investigaci¨®n citadas por el San Francisco Chronicle aseguran que uno de los estudiantes estaba conectado con los ordenadores del Pent¨¢gono cuando los agentes del FBI entraron en su habitaci¨®n. George Grotz, portavoz del FBI en San Francisco, confirm¨® que la polic¨ªa hab¨ªa registrado minuciosamente los domicilios de los dos adolescentes y confisc¨® ordenadores, impresoras y todo el material inform¨¢tico.

Los piratas utilizaron su conexi¨®n con un servidor de Internet para manipular su identidad y comenzar su paseo por ordenadores cerrados al p¨²blico. William G. Zane, propietario de Netdex, el servicio de acceso a Internet desde el que operaban los dos j¨®venes, asegur¨® que sus t¨¦cnicos detectaron c¨®mo ambos usuarios hab¨ªan logrado concederse a s¨ª mismos "privilegios" inform¨¢ticos dentro del servidor, y observaron sus primeros movimientos hacia redes gubernamentales. Puestos en contacto con el FBI, los agentes decidieron investigar su actividad mediante la instalaci¨®n de un software que permit¨ªa el seguimiento de las actividades inform¨¢ticas de los dos individuos. "Decidimos asumir un poco de riesgo", dice Zane, "pensamos que era mejor darles un poco de cuerda, que jugaran un tiempo, y que acabaran colg¨¢ndose". Zane relat¨® que los piratas ni siquiera ten¨ªan una cuenta en su servicio de Internet: usaron otro proveedor para entrar de forma supuestamente an¨®nima en los servidores de Netdex.

El FBI se resiste a dar informaci¨®n sobre las investigaciones aunque admite un cierto asombro por el alto nivel de sofisticaci¨®n de las herramientas inform¨¢ticas manejadas por los dos adolescentes. Al menos uno de los dos estudiantes hab¨ªa descubierto hace una semana que el FBI estaba someti¨¦ndole a un seguimiento inform¨¢tico, y trat¨® de borrar los ficheros que pod¨ªan delatar sus actividades. Los compa?eros de los dos j¨®venes en el peque?o instituto de Cloverdale describen a los supuestos piratas como chicos "absolutamente normales, buenos estudiantes". "Si lo hicieron", relata una compa?era, "fue por su inter¨¦s en la inform¨¢tica, no porque quisieran hacer nada malo". Un profesor alab¨® el comportamiento habitual de los dos estudiantes y reconoci¨® que ambos le ayudaban en clases de inform¨¢tica "porque sab¨ªan mucho m¨¢s que yo".