El BCE carga contra el dise?o del nuevo impuesto a la banca y pide analizar sus efectos

El Banco Central Europeo (BCE) carga contra el nuevo impuesto a la banca. El supervisor europeo ha emitido su dictamen sobre el nuevo gravamen, que ha dise?ado el Gobierno en los ¨²ltimos meses para entrar en vigor a partir de 2025, en el que considera que puede restringir el cr¨¦dito y la capacidad del sector por reforzar sus colchones de capital. Critica tambi¨¦n los aspectos t¨¦cnicos de la tasa ¡ªcomo su tratamiento contable o su efecto sobre impuestos¡ª, al tiempo que reclama un seguimiento sobre sus consecuencias.

El texto del dictamen replica en gran medida al que el supervisor emiti¨® en 2022, cuando el Ejecutivo introdujo la primera tasa temporal, en ese momento para gravar los impuestos extraordinarios del sector derivados de las subidas en los tipos de inter¨¦s. Ya en ese momento el BCE alert¨® de que la tasa puede afectar a la competencia y afirm¨® que deber¨ªa trasladarse al cliente. En este caso, adem¨¢s, subraya que el texto legislativo del nuevo impuesto, en la exposici¨®n de motivos, ¡°no contiene explicaciones espec¨ªficas sobre la justificaci¨®n del impuesto sobre el margen de intereses y comisiones de determinadas entidades financieras¡±.

Apunta tambi¨¦n a que las subidas en los tipos de inter¨¦s ya se han reducido por el actual ritmo de desinflaci¨®n. As¨ª, se?ala que en este ritmo de reducci¨®n del precio del dinero, el BCE tambi¨¦n debe velar por que los bancos mantengan ¡°bases de capital s¨®lidas y provisiones adecuadas¡± y que transmitan a empresas y hogares las decisiones de pol¨ªtica monetaria.

¡°El BCE tambi¨¦n ha subrayado que la imposici¨®n de un gravamen especial al sector bancario podr¨ªa reducir la capacidad de las entidades de cr¨¦dito para constituir colchones de capital adicionales, ya que estas medidas reducen los beneficios no distribuidos, debilitando as¨ª la capacidad de resistencia del sector bancario frente a perturbaciones econ¨®micas¡±, se?ala el documento. En este sentido, alerta tambi¨¦n sobre el efecto que puede tener sobre la reducci¨®n del cr¨¦dito.

Igualmente, la entidad que pilota Christine Lagarde matiza que elevar los tipos de inter¨¦s incrementa los ingresos de los bancos, pero tambi¨¦n incrementa el riesgo de tasas de mora elevadas. Pondera la exoneraci¨®n en el pago del impuesto que ha introducido el Gobierno en caso de que la rentabilidad de los bancos sea negativa en un ejercicio, pero considera que este mecanismo no tiene en cuenta la necesidad de crear colchones antic¨ªclicos en periodos de alta rentabilidad.

Otro de los riesgos a los que apunta est¨¢ en una posible fragmentaci¨®n del sistema financiero europeo y menoscabar la igualdad de condiciones en la uni¨®n bancaria, as¨ª como en el contexto espa?ol en concreto, as¨ª como la aplicaci¨®n de una escala progresiva en el mercado espa?ol puede dar lugar a asimetr¨ªas competitivas en funci¨®n del tama?o de los bancos.

Finalmente, sus cr¨ªticas se centran tambi¨¦n en algunos aspectos concretos de su dise?o. Considera, de un lado, que la deducci¨®n planteada sobre el Impuesto de Sociedades no tienen en cuenta los gastos operativos ni el coste del riesgo de cr¨¦dito, de modo que el impuesto puede no ser plenamente proporcional a la rentabilidad y generaci¨®n de capital. De este modo, las entidades con m¨¢s baja solvencia podr¨ªan reducir su capacidad de absorber los riesgos de eventuales crisis econ¨®micas. El car¨¢cter progresivo de la tasa agravar¨ªa esta situaci¨®n.

¡°Esto podr¨ªa dar lugar a una situaci¨®n en la que determinadas entidades de cr¨¦dito con menor rentabilidad neta (o incluso con p¨¦rdidas tras la deducci¨®n de las p¨¦rdidas crediticias) acaben pagando un impuesto a un tipo efectivo m¨¢s elevado, ya que la hip¨®tesis impl¨ªcita en el c¨¢lculo del gravamen de que las entidades de cr¨¦dito con una base liquidable mayor tienen beneficios netos superiores no siempre es el caso¡±, afirma.