El fiscal solicita tres a?os de c¨¢rcel para De la Rosa por intento de estafa a KIO

La Fiscal¨ªa de Catalu?a ha remitido al juzgado de instrucci¨®n n¨²mero 2 de Barcelona un escrito de acusaci¨®n en el que acusa a Javier de la Rosa de intento de estafa mediante cartas falsas con membrete de la Kuwait Investment Office (KIO) y solicita para ¨¦l una pena de tres a?os de prisi¨®n y multa de seis meses. La juez ha dictado ya un auto de apertura de juicio oral, por lo que ¨¦ste ser¨¢ el primer caso penal, de los varios que tiene pendientes, que se ver¨¢ contra De la Rosa. La Sala Segunda de lo penal de la Audiencia de Barcelona deber¨¢ fijar la fecha.

El fiscal y la acusaci¨®n particular, encabezada por el abogado Ram¨®n Pelayo, sostienen que De la Rosa intent¨® estafar a KlA, -entidad tutelar de la Kuwait Investment Office (KIO), agente inversor de Kuwait y propietario en Espa?a del Grupo Torras- m¨¢s de 51.900 millones de pesetas mediante cartas presuntamente falsas con la firma del ex presidente de KIO, Fahad Mohamed Al Sabah.El origen del asunto se sit¨²a a principios de los noventa, cuando dos sociedades controladas por De la Rosa (Mira y Folma), compraron importantes paquetes de acciones de Torras con cr¨¦ditos de 51.900 millones concedidos por esta ¨²ltima.

Libertad con fianza

En aquella ¨¦poca, De la Rosa, que actualmente se encuentra en libertad bajo fianza por los casos Grand Tibidabo y Torras, presumi¨® por ese motivo de ser "socio" de KIO, rechazando que la condici¨®n de simple representante. Cuando llegaron los problemas, De la Rosa ech¨® mano de dos cartas de fecha marzo de 1992, con membrete del grupo ¨¢rabe y firmadas por Al Sabah, en las que KIO asum¨ªa como propias las deudas de Mira y Folma.Seg¨²n KlA, esos documentos son falsos. Se trata de cartas "pr¨¢cticamente id¨¦nticas", que Al Sabah ha negado haber firmado, adem¨¢s de que ¨²ltimo "carec¨ªa de todo tipo de facultades para obligarse por montantes superiores a 30 millones de d¨®lares [4.500 millones de pesetas]". Por si eso fuera poco, Al Sabah hab¨ªa abandonado sus cargos en KIO un mes antes de la fecha en que supuestamente se firmaron las cartas.

La acusaci¨®n ha aportado un informe del perito cal¨ªgrafo Juan Francisco Orellana que asegura que "cuanto menos, una de las dos firmas no es original ( ... ) ambas son firmas no manuscritas". Otro perito cal¨ªgrafo, en este caso del Home Office Foresinc Science Laboratory brit¨¢nico asegura que "ninguna de las dos firmas es manuscrita y que existen fuertes indicios que indican que una de las firmas ha sido cortada y superpuesta no siendo una firma original".