"Hago de facha pero mi pel¨ªcula es antifascista"

Muchos auguran que Torrente, el brazo tonto de la ley va a ser el Airbag del 98, pero Santiago Segura, que debuta como director y protagoniza el filme, tiene "m¨¢s miedo que verg¨¹enza" a la acogida del p¨²blico. La pel¨ªcula, en la que reaparece Tony Leblanc, ha tenido un presupuesto de m¨¢s de 200 millones y se estren¨® el viernes en toda Espa?a. "La he rodado para m¨ª y para mis amigos, pero espero que le guste a mucha gente", asegura.Lo primero que sorprende de Santiago Segura (Madrid, 1962), despu¨¦s de ver al ex polic¨ªa Torrente moverse por las calles de Madrid, es la pulcritud que luce el reci¨¦n estrenado director. "Soy pesimista, realista y precavido. Desde peque?ito. Al salir de los ex¨¢menes, les dec¨ªa a los amigos: 'No creo que lo saque', y luego me pon¨ªan un notable". Era un truco de colegial para darse ¨¢nimos, pero en la hora del estreno le viene bien a Santiago Segura aplicarse aquella misma terapia, aunque no tiene miedo a las acusaciones de pol¨ªticamento incorrecto que le van a llover al filme, donde sale el mayor n¨²mero de freakies del cine espa?ol. "El protagonista es un facha, pero la pel¨ªcula, para nada. Al rev¨¦s, arremete contra todo eso y se ve todo con iron¨ªa".

Segura ha aprendido, al concluir la pel¨ªcula, lo que cuesta un sue?o. Torrente, el brazo tonto de la ley ha sido durante seis a?os la obsesi¨®n de su creador. Decidi¨® que el personaje central ser¨ªa ¨¦l -"Me he sentido como si me dirigieran desde dentro"-, eligi¨® personalmente a los actores, convenci¨® a Tony Leblanc -que llevaba 25 a?os sin actuar- para que volviera, camel¨® a El Fari para que cantara un tema de la banda sonora y apost¨® a tope por la comedia. "Este papel de polic¨ªa podrido es muy dif¨ªcil; esto lo hacemos mal y no nos llama nadie nunca m¨¢s", le previno su admirado Tony Leblanc, pero ¨¦l no se arredr¨®. "La medida de una comedia es la risa, y la gente se ha re¨ªdo en los pases de la pel¨ªcula. Yo soy un estudioso del humor, el mundo de los humoristas me fascina y me encanta que me hagan sonre¨ªr. Estoy obsesionado con eso; lo peor que puede pasar con el humor es analizarlo".

La gente joven le llama Josemari por la calle, le ofrece drogas y le recita de memoria las frases de El d¨ªa de la Bestia. "Se nota que el papel de Josemari estaba hecho para ti", le argumentan los admiradores al referirse a un papel que, en principio, ?lex de la Iglesia destin¨® a Gabino Diego, pero Santiago Segura ya se ha acostumbrado a que la gente identifique persona y personaje. Sabe que hay un sector del p¨²blico, de entre ocho y 20 a?os, que considera El d¨ªa de la Bestia como una pel¨ªcula de culto. No sabe por qu¨¦ ni le interesa el fen¨®meno, pero s¨ª le gustar¨ªa que su pel¨ªcula tuviera una acogida parecida. Si ahora los chicos le gritan "?D¨®nde vas Torrente?", ¨¦l responder¨¢ con una sonrisa y una parida, si viene al caso.

De Andr¨¦s Vicente G¨®mez, el productor de la pel¨ªcula, le gusta que, lo mismo que compra un best seller y llama a dos estrellas de Hollywood para que la protagonicen, "coge a un pelanas como yo con un gui¨®n bajo el brazo y le financia la pel¨ªcula". La confianza del productor en el director fue rec¨ªproca. De hecho, nada m¨¢s acabar el rodaje, le propuso rodar otros tres filmes, pero Segura se neg¨® en redondo. "Soy una persona bastante dispersa, me gustan tantas cosas que me siento incapaz de rodar otra pel¨ªcula ahora; es demasiado sacrificado. Tu vida acaba siendo una pel¨ªcula durante el tiempo que dura el rodaje".