M¨²sica viva y resucitada

Se llen¨® el Auditorio Nacional para escuchar a Fr¨¹hbeck de Burgos y la ONE un programa dedicado a Beethoven, Claudio Prieto y Jes¨²s de Monasterio en su Concierto en si menor.Esta obra, recientemente reeditada por el Instituto Complutense de Ciencias Musicales, data de 1859, como el primer concierto de Saint Sa?ns. Es anterior, pues, a la Sinfon¨ªa espa?ola y el Concierto de Lal¨® y al primero de Bruch, aunque tenga como antecedente rom¨¢nticos los conciertos de Beethoven, Schumann y Paganini. Son datos que conviene recordar para medir el valor de estas p¨¢ginas fluidas, muy de su tiempo, virtuosistas y afiliadas al sentimiento de la escuela franco-belga. Fue protagonista V¨ªctor Mart¨ªn, de tan bello sonido como expresividad natural y mesurada.

Antes, otro reestreno mucho m¨¢s cercano: la nueva versi¨®n del adagio de la Fr¨¹hbeck-Symphonie de Claudio Prieto dedicada al maestro burgal¨¦s en 1994. M¨²sica, al decir de su autor, incierta en el denominado "nuevo lirismo" y ausente de connotaciones nacionalistas, nos habla del buen hacer ee Prieto en su actual pr¨¢ctica neoconsonante y en su voluntariedad afectiva. Compositor e int¨¦rpretes fueron muy aplaudidos.

Para final, la Quinta sinfon¨ªa de Beethoven, entendida y realizada por Fr¨¹hbeck con gran sentido constructivo, admirable continuidad y fuerte impulso energ¨¦tico, acrecent¨® las ovaciones.