Ricardo Franco rueda una pel¨ªcula sobre la impotencia del amor ante la locura
El cineasta filma "L¨¢grimas negras, con Ariadna Gil
A pesar de la "imposibilidad de contar una pel¨ªcula", Ricardo Franco (Madrid, 1949) explic¨® ayer lo que ¨¦l espera que sea L¨¢grimas negras, la historia que empieza a rodar en Madrid el pr¨®ximo 4 de mayo. "Ser¨¢ una pel¨ªcula de lo que yo siempre he llamado romanticismo duro", afirma el cineasta. "Esa visi¨®n rom¨¢ntica de que todo se puede arreglar, ese s¨ªndrome de Lanzarote del Lago del hombre que como un caballero medieval se lanza in¨²tilmente a salvar a la mujer enferma pensando que con su amor todo se cura".
Ariadna Gil y Fele Mart¨ªnez son los dos int¨¦rpretes principales de L¨¢grimas negras, un gui¨®n de hace cuatro a?os que Ricardo Franco retom¨® hace unos meses junto a la guionista ?ngeles Gonz¨¢lez Sinde tras el ¨¦xito de La buena estrella. Con un presupuesto que ronda los 300 millones de pesetas y producida entre Sogetel y Aurum, L¨¢grimas negras se rodar¨¢ durante siete semanas en Madrid Y Lisboa. L¨¢grimas negras es la historia de un joven de vida organizada y prudente que, al enamorarse de una mujer con graves trastornos de personalidad, se ve arrastrado por la firme creencia de la capacidad redentora de su pasi¨®n incondicional. "M¨¢s que la historia de una mujer con el alma enferma, es la historia de la locura de amor del protagonista, que cree que, con su amor y cuidados, una mujer que tiene problemas dejar¨¢ de tener los", afirma Franco. "En ning¨²n momento es la historia de un caso cl¨ªnico, sobre todo porque todo ocurre bajo los ojos de ¨¦l, que cree que el problema de ella s¨®lo es su sufrimiento".
"La elecci¨®n de un actor joven para el personaje es porque si yo viv¨ª algo parecido, fue con la edad de Fele. En mi vida se han cruzado dos o tres veces personas con problemas psiqui¨¢tricos graves, y yo los viv¨ª como algo literario, cuando en realidad era algo mucho m¨¢s simple".
Ricardo Franco recuerda que el gui¨®n de L¨¢grimas negras (t¨ªtulo de un viejo bolero) tambi¨¦n tiene que ver con La canci¨®n del condenado, un documental sobre la pena de muerte que rod¨® para Amnist¨ªa Internacional y que fue galardonado en el Festival de Cine de Nueva York. "Durante el rodaje conoc¨ª a una psiquiatra norteamericana que trabajaba en el corredor de la muerte y que me cont¨® que su especializaci¨®n eran los ni?os asesinos menores de cinco a?os. Aquella conversaci¨®n me dej¨® perplejo, y de alguna manera el gui¨®n tambi¨¦n empez¨® ah¨ª. De ah¨ª y de la creencia de mi generaci¨®n -una de las m¨¢s est¨²pidas de este siglo- de que los locos deb¨ªan salir de los manicomios y vivir en un ¨¢mbito familiar que lograra estabilizarlos. Un error tremendo, pues, desgraciadamente, si un loco entra en un ¨¢mbito familiar, s¨®lo se consigue que tambi¨¦n ese ¨¢mbito se desintegre".
Franco asegura que, quiz¨¢ por las limitaciones que provocan sus problemas de salud (hace un mes fue operado del coraz¨®n), prefiere lo que ¨¦l denomina "pel¨ªculas peque?as". "Prefiero moverme en producciones donde pueda controlarlo todo, pero no por una cuesti¨®n de autor¨ªa, sino de comodidad". Sobre el reparto, el cineasta se?ala que Ariadna Gil siempre estuvo presente. "De Fele me atrajo su aspecto larguirucho".
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