Defensa pondr¨¢ en venta las 4.088 hect¨¢reas que compr¨® para el campo de tiro de Anchuras
Casi 10 a?os despu¨¦s de su aprobaci¨®n, el 20 de julio de 1988, el Consejo de Ministros decidi¨® ayer derogar el real decreto por el que se declar¨® de inter¨¦s para la defensa nacional la zona de Anchuras (Ciudad Real), con el objetivo de instalar un campo de tiro para el Ej¨¦rcito del Aire. Defensa pondr¨¢ en venta, a trav¨¦s de la Gerencia de Infraestructura, las 4.088 hect¨¢reas que adquiri¨® en la zona. El Gobierno del PP renunci¨® en septiembre de 1996 al pol¨ªgono de tiro, tras una pol¨¦mica entre los ministros de Defensa, Eduardo Serra, y Medio Ambiente, Isabel Tocino.
La decisi¨®n del Consejo de Ministros pill¨® ayer por sorpresa a los miembros de la Coordinadora para la Defensa de Anchuras, que se constituy¨® para oponerse a la instalaci¨®n del campo de entrenamiento. Santiago Mart¨ªn, alcalde de la localidad cuando se aprob¨® el decreto, expres¨® su alegr¨ªa, todav¨ªa te?ida de escepticismo. "La lucha permanente del pueblo de Anchuras ha dado sus frutos, pero no me lo creer¨¦ hasta que lo vea publicado en el BOE", dijo.El exalcalde advirti¨® que a¨²n quedan muchas inc¨®gnitas por despejar, como el futuro de las fincas adquiridas por el Ministerio de Defensa, cuya titularidad p¨²blica defiende la coordinadora, informa desde Ciudad Real Mar¨ªa Rivas.
"La ministra Tocino dijo que se estudiar¨ªa alguna figura de protecci¨®n para Anchuras, dada su proximidad al Parque Nacional de Caba?eros, y ahora debe aclarar qu¨¦ protecci¨®n va a tener", a?adi¨®.
Fuentes de Defensa explicaron que su prop¨®sito es desafectar las propiedades y ponerlas a disposici¨®n de la Gerencia de Infraestructura para su posterior venta. El departamento que dirige Eduardo Serra tiene un total de 4.088 hect¨¢reas en la zona, distribuidas en cuatro fincas: Dehesa de El Rosalejo (2.781 hect¨¢reas), Las Pe?ascosas (670), Dehesa de La Sevilleja (550) y Dehesa de El Arreciado (87).
Estas fincas fueron adquiridas mediante permuta, a cambio de los terrenos que el propio ministerio hab¨ªa comprado antes en Caba?eros. Defensa ha estudiado la posibilidad de deshacer estas permutas, pero ha renunciado finalmente a la idea en favor de la venta.
El presidente del Patronato del Parque Nacional de Caba?eros, Antonio Salinas, dijo ayer que la decisi¨®n del Consejo es "una gran noticia para el parque, porque la instalaci¨®n de un campo de tiro en Anchuras hubiera sido un gran riesgo para Caba?eros", informa Efe. Salinas descart¨® una ampliaci¨®n del per¨ªmetro del parque nacional y agreg¨® que "es indiferente que El Rosalejo sea de titularidad p¨²blica o privada, de las dos formas se pueden llevar a cabo medidas de protecci¨®n".
Extinci¨®n de empleos
La venta de las fincas dejar¨¢ sin trabajo a unas 20 personas que fueron contratadas por Defensa para tareas de vigilancia y mantenimiento. Entre los contratados estaban algunos concejales socialistas, lo que agudiz¨® la divisi¨®n de los vecinos.
La derogaci¨®n del decreto ha sido un proceso muy lento y complejo. El ¨²ltimo hito se cumpli¨® cuando la Junta de Defensa Nacional, presidida por el Rey, decidi¨® desclasificar el expediente sobre Anchuras, que en su d¨ªa fue declarado secreto. La renuncia al pol¨ªgono de tiro se hizo p¨²blica en septiembre de 1996, a los cinco meses de la llegada del PP al poder, despu¨¦s de que el ministro Eduardo Serra dijera en el Congreso que Anchuras segu¨ªa siendo de inter¨¦s para la defensa.
La ministra Isabel Tocino, responsable de Medio Ambiente y diputada por Toledo, le contradijo de inmediato, asegurando que "Anchuras no tendr¨¢ campo de tiro", en coherencia con las promesas efectuadas por su partido cuando estaba en la oposici¨®n. Aznar zanj¨® el asunto en favor de esta ¨²ltima y oblig¨® a Serra a rectificar.
La decisi¨®n del Gobierno no resuelve, sin embargo, el problema que dio origen al conflicto: la necesidad de que el Ej¨¦rcito del Aire tenga un pol¨ªgono de tiro. El ¨²nico disponible actualmente es el de Bardenas Reales (Navarra), pero su arrendamiento expira en el 2002.
Defensa ha estudiado otras alternativas, como usar alg¨²n campo de maniobras del Ej¨¦rcito de Tierra, especialmente el de Chinchilla (Albacete), pero se ha topado con la oposici¨®n de las autoridades locales y regionales. El portavoz de la Junta de Castilla-La Mancha, Emiliano Garc¨ªa Page, mostr¨® ayer su confianza en que "el final de la batalla de Anchuras no suponga el inicio de la de Chinchilla".
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