Sacchi entierra el doblete

Arrigo Sacchi est¨¢ decidido a enterrar el Atl¨¦tico del doblete. Si sus planes se imponen, de aquel equipo que conquist¨® Liga y Copa hace tres a?os s¨®lo sobrevivir¨¢n Molina y Santi. Puede que tambi¨¦n Geli y Vizca¨ªno, pero ya con papeles completamente secundarios. El t¨¦cnico italiano, en nombre de las obligaciones de su dibujo t¨¢ctico, continuar¨¢ as¨ª el proceso de destrucci¨®n que de aquel grupo m¨¢gico inici¨® Radomir Antic, su propio creador. El serbio se deshizo de Penev, Soloz¨¢bal y Simeone. Y Sacchi prolongar¨¢ la barrida: Toni, Pantic, Caminero y Kiko.Antic, cuando lleg¨® al Atl¨¦tico, mir¨® los jugadores de los que pod¨ªa disponer y en funci¨®n de sus caracter¨ªsticas elabor¨® un sistema que les beneficiara. Sacchi empieza al rev¨¦s: tiene un sistema y a partir de ah¨ª distribuye a los futbolistas. Esta forma de entender el oficio de entrenador tiene un claro inconveniente, ya que a veces los mejores jugadores no encajan en el dibujo y llega el conflicto: el club debe desprenderse de las piezas que supon¨ªa m¨¢s valiosas. Y eso va a ocurrir ahora en el Atl¨¦tico: Kiko y Caminero son incompatibles con el herm¨¦tico entramado t¨¢ctico de Arrigo Sacchi.

El italiano no disimul¨®. Lo primero que hizo nada m¨¢s firmar con los rojiblancos fue anunciar en el club su t¨¢ctica: "El Atl¨¦tico va a jugar con un 4-3-3, ya hablaremos de altas y bajas". Y avis¨® que tendr¨ªa una defensa en l¨ªnea de cuatro con laterales de poco recorrido, un centro del campo formado con tres jugadores de corte f¨ªsico -si acaso formado por dos volantes y un medio con un poco m¨¢s de llegada, una concesi¨®n a Juninho- y un ataque te¨®ricamente compuesto de tres piezas, en donde s¨®lo habr¨¢ un punta puro y dos extremos de permanente ida y vuelta, que bien podr¨ªan ser considerados como centrocampistas -el sistema se ha vendido como un 4-3-3, pero, en realidad, tiene pinta de 4-5-1-. Y en este dibujo al que se debe subordinar todo lo dem¨¢s, no encajan, seg¨²n Sacchi, Kiko y Caminero, dos especialistas, futbolistas pesadotes y lentos que destacan m¨¢s en la pausa que en el v¨¦rtigo, rasgos que no satisfacen al italiano. "Acepten ofertas por ambos", sentenci¨® m¨¢s tarde Sacchi, a quien el talento de los dos afectados no le pareci¨® argumento suficiente como para retocar su sistema.

Las dos operaciones, especialmente la de Kiko, tiene muy mala venta al p¨²blico . Por eso los due?os del club empiezan a labrarse el terreno. Y comienzan a llenarse la boca con palabras muy demag¨®gicas como profesionalidad y trabajo, poniendo bajo sospecha el comportamiento de los futbolistas que estaban. Sobre todo, aquellos que por man¨ªas de la t¨¢ctica no convencen a Sacchi. El mensaje es poco convincente, pero claro: si no encaja en el dibujo del italiano, es que no es un profesional. Y como resulta que muchos de los afectados son precisamente los que poseen m¨¢s calidad, los jefes alertan a la grada: "Lo mismo ya no se ve en el Calder¨®n el f¨²tbol brillante de estos a?os, pero el Atl¨¦tico va a ser un equipo fort¨ªsimo que estar¨¢ arriba. Un conjunto de profesionales".

Con el esquema t¨¢ctico de Sacchi como biblia del nuevo proyecto, el Atl¨¦tico debe deshacerse de muchos jugadores y, por l¨®gica, incorporar tambi¨¦n a un buen pu?ado de ellos. O sea, que se le anuncia un verano laborioso. De lo que hay, una treintena de futbolistas contando con los cedidos que vuelven, al sistema de Sacchi no le vale ni una tercera parte. Pero desalojar lo que no gusta tampoco va a resultar f¨¢cil. Sobre todo en los casos m¨¢s luminosos: el Atl¨¦tico no est¨¢ dispuesto a vender a Kiko y Caminero a cualquier precio.

En cuanto a lo que viene, la situaci¨®n no se presenta m¨¢s prometedora. Est¨¢n cerradas las contrataciones de Njegus (Estrella Roja) y Mena y Valer¨®n (Mallorca), todos ellos, a priori, pensados antes para reforzar la plantilla que el equipo inicial. Los grandes deseados, un central zurdo (Montero, del Juventus), un lateral izquierdo (Chamot, del Lazio), uno o dos volantes (Jugovic, y otro si Bejbl no convence a Sacchi) y un jugador de banda izquierda (puede valer Lard¨ªn, pero el italiano prefiere a Nedved, del Lazio). De lo que hab¨ªa, con grandes opciones de titularidad, s¨®lo Molina, Santi, Juninho, Aguilera, ya sea de lateral o de extremo, y Vieri.