El alto crecimiento econ¨®mico despierta temores de futuras tensiones inflacionistas

La econom¨ªa espa?ola lleva siete trimestres creciendo por encima del 2% y, en cambio, los precios se mantienen estables. Hay 772.000 personas m¨¢s trabajando que a finales 1995, est¨¢ mejorando el consumo y la inversi¨®n. Pero los precios suben lentamente. Algo desconocido hasta ahora en Espa?a, donde siempre que la econom¨ªa crec¨ªa, la inflaci¨®n le segu¨ªa detr¨¢s. Pero ahora algunos analistas comienzan a preocuparse por el riesgo de calentamiento, lo que podr¨ªa dar paso a tensiones inflacionistas si no se acometen las necesarias reformas estructurales.

?Qu¨¦ ha pasado? Los expertos dan estas razones: importaciones baratas; m¨¢s competencia entre las empresas; tipos de inter¨¦s bajos; moderacion salarial; mayor prudencia de los consumidores a la hora de gastar; nuevas tecnolog¨ªas y aumento de la productividad; ¨¦xito del Banco de Espa?a en su lucha contra la inflaci¨®n y del Gobierno al reducir el d¨¦ficit p¨²blico.Hay otro motivo de peso que ha ayudado a sujetar los precios y que el Banco de Espa?a cita en su informe de inflaci¨®n de marzo: los precios de las materias primas han bajado nada menos que un 18,3% desde la primavera de 1997 hasta enero de este a?o. Y el precio del petr¨®leo ha ca¨ªdo un 31% de octubre de 1997 a febrero de 1998. Adem¨¢s, el d¨®lar -la moneda con la que se pagan las materias primas- se mantiene estable.

La inc¨®gnita es saber si los precios seguir¨¢n controlados a partir de 1999, cuando el crecimiento econ¨®mico ya se acerque al 4%.

La subida de precios de abril ha sido un aviso que ha elevado la tasa anual del 1,8% al 2%. La inflaci¨®n, sin contar los precios de los alimentos no elaborados y la energ¨ªa -un ¨ªndice que los expertos consideran m¨¢s revelador que el IPC general-, ha subido al 2,3%. Y la inflaci¨®n media es 0,6 puntos mayor que en el conjunto de la Uni¨®n Europea.

Dos economistas de prestigio como Juan Iranzo y Ant¨®n Costas ven riesgo de subidas de precios si no se toman medidas. Recuerdan que desde enero pr¨®ximo ya no ser¨¢ el Banco de Espa?a quien vigile los precios espa?oles. La vigilancia de la inflaci¨®n la tendr¨¢ el Banco Central Europeo (BCE), que no atender¨¢ a la situaci¨®n de los precios en Espa?a para bajar o subir los tipos de inter¨¦s del euro, sino a la media de los 11 pa¨ªses que han accedido a la nueva moneda europea.

El Gobierno, sin embargo, no teme un repunte de los precios . Luis de Guindos, director general de Pol¨ªtica Econ¨®mica, asegura que el a?o acabar¨¢ en el 2,1% previsto. Asegura que los precios pueden aguantar en estos niveles porque, a diferencia de la expansi¨®n de los a?os ochenta, existe m¨¢s competencia, el d¨¦ficit p¨²blico baja, hay un mercado laboral menos r¨ªgido y reformas en marcha para abaratar el precio del suelo, la energ¨ªa, y m¨¢s competencia en transporte por carretera.

"La gente es m¨¢s prudente que antes a la hora de consumir. Est¨¢ escarmentada de la crisis pasada y por eso se est¨¢ produciendo un crecimiento sano, ya que por primera vez el consumo aumenta menos que el crecimiento" (3,5% el consumo en el primer trimestre, frente al 3,8% que ha crecido la econom¨ªa), dice el director general.

La rebaja del impuesto sobre la renta, aunque meter¨¢ 350.000 millones m¨¢s el a?o que viene en el bolsillo de los contribuyentes, no generar¨¢ inflaci¨®n, seg¨²n De Guindos. No opina lo mismo la Comisi¨®n Europea, que hace unos d¨ªas advirti¨® del riesgo de repunte de la inflaci¨®n que supone una bajada del IRPF como la que se prepara en Espa?a en una etapa de recuperaci¨®n econ¨®mica. Tampoco recalentar¨¢ los precios, seg¨²n el Gobierno, la bajada de casi un punto que tienen que hacer los tipos de inter¨¦s espa?oles para acercarse al 3,30% que tiene el marco alem¨¢n y que se considera que ser¨¢, d¨¦cima arriba, d¨¦cima abajo, con el que arranque el euro.

Algunos economistas, como Guillermo de la Dehesa o Miguel Boyer, han advertido que sin pol¨ªtica monetaria propia se impone bajar el d¨¦ficit p¨²blico a buen ritmo. Afirman que s¨®lo ser¨¢ posible actuar contra una recesi¨®n con pol¨ªticas de gasto y para eso hay que prepararse para tener un d¨¦ficit p¨²blico lo m¨¢s bajo posible. Y, mejor a¨²n, super¨¢vit.