El "caso Marey" sigue hoy con la declaraci¨®n del jefe operativo del secuestro
La Sala Segunda del Supremo reanudar¨¢ hoy los interrogatorios a los procesados por el secuestro de Segundo Marey. La vista comenzar¨¢ con el ex jefe superior de Polic¨ªa de Bilbao, Francisco ?lvarez S¨¢nchez, responsable operativo del secuestro y de los muchos errores que se cometieron. Le seguir¨¢ Ricardo Garc¨ªa Damborenea, el ex secretario general de los socialistas vizca¨ªnos, hoy en la ¨®rbita del PP. El testigo clave de la semana ser¨¢ Juli¨¢n Sancrist¨®bal, el ex gobernador civil de Vizcaya y te¨®rico enlace con el entonces ministro del Interior Jos¨¦ Barrionuevo y su n¨²mero dos, Rafael Vera.
Juli¨¢n Sancrist¨®bal, gobernador civil de Vizcaya en 1983, fue quien, seg¨²n el fiscal, actu¨® de enlace con el ministerio del Interior la noche del secuestro de Segundo Marey y quien habr¨ªa conversado por tel¨¦fono con sus m¨¢ximos responsables, el entonces ministro Jos¨¦ Barrionuevo y el director general de Seguridad, Rafael Vera, que niegan estos contactos. A Sancrist¨®bal le preguntar¨¢n tambi¨¦n por el malet¨ªn con un mill¨®n de francos de los fondos reservados de Interior, que habr¨ªa recibido de manos de Vera para financiar el secuestro.El fiscal y las acusaciones tambi¨¦n le acusan de haber redactado, junto a Garc¨ªa Damborenea, el primer comunicado de reivindicaci¨®n del secuestro. Dicho comunicado es el que impone como condici¨®n para no matar a Marey la liberaci¨®n, por las autoridades francesas, de cuatro geos espa?oles detenidos cuando intentaban secuestrar a otro etarra, Jos¨¦ Mar¨ªa Larretxea, para tratar de averiguar el paradero del capit¨¢n Mart¨ªn Barrios, que hab¨ªa sido secuestrado por ETA y asesinado de un tiro en la nuca.
De lo acontecido la semana pasada ante el tribunal, el denominador com¨²n sigue siendo el intento de los polic¨ªas de buscar su salvaci¨®n acusando a Vera y a Barrionuevo, a los que han incriminado con reiteraci¨®n. Las continuas apelaciones a la "decisi¨®n pol¨ªtica", las "¨®rdenes del Gobierno" al "visto bueno de Barrionuevo" o a la "cuesti¨®n de Estado", parecen ya el comod¨ªn con que completar cada respuesta de este grupo de procesados.
As¨ª, el ex subcomisario Jos¨¦ Amedo, que abri¨® el turno de interrogatorios, declar¨® que incluso el detalle de que su compa?ero Michel Dom¨ªnguez hablase al secuestrado en franc¨¦s para tranquilizarle obedeci¨® a una decisi¨®n pol¨ªtica del ministerio. Amedo, que cumple en libertad una anterior condena de 108 a?os de prisi¨®n, pronunci¨® la frase del proceso. Le hab¨ªan preguntado por qu¨¦ nunca baj¨® a la caba?a donde estaba secuestrado Marey, a lo que contest¨®: "Para no estropearme los zapatos".
El testimonio de Dom¨ªnguez fue el de mayor impacto. Acept¨® su participaci¨®n en el secuestro, pero mantuvo su denuncia sobre las presiones a las que le someti¨® el juez Baltasar Garz¨®n para que confesara, y sobre todo, ratific¨® los contactos de su abogado con el actual vicepresidente del Gobierno, Francisco ?lvarez Cascos, con la mediaci¨®n del director de El Mundo, Pedro J. Ram¨ªrez , sobre una oferta de indulto de la que estuvo al tanto el hoy presidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar.
Cuentas en Suiza
Dom¨ªnguez relata en el ¨²ltimo n¨²mero de la revista Tiempo que habl¨® con Garz¨®n sobre las cuentas que ¨¦l y su compa?ero ten¨ªan en Suiza y que el juez le dijo: "Tienen ustedes margen hasta que env¨ªe la comisi¨®n rogatoria para sacar lo que necesiten o vaciar las cuentas; a m¨ª lo que me interesan son las cuentas y me da lo mismo si hay dinero o no".Las autoridades suizas enviaron a Garz¨®n el 17 de enero de 1995 datos de las cuentas abiertas en ese pa¨ªs a nombre de Marian Acedo Morales y Alicia S¨¢nchez Carri¨®n, esposas de los ex polic¨ªas. El juez anunci¨® a fines de octubre de 1994 su intenci¨®n de rastrear tales cuentas, pero no fueron bloqueadas hasta enero, con lo que sus titulares dispusieron de dos meses largos para mover los dep¨®sitos, seg¨²n public¨® EL PA?S el 26 de enero de 1995. En esas fechas sumaban un saldo conjunto de 320 millones.
Las defensas de los procesados mantienen estrategias contrapuestas, las mismas que desde la fase sumarial. Vera y Barrionuevo negaron haber ordenado, autorizado y financiado el secuestro, por lo que sus defensores, Manuel Cobo del Rosal y Pablo Jim¨¦nez de Parga, respectivamente, buscan fundar la nulidad de actuaciones en las presiones de Garz¨®n sobre los procesados. En esa l¨ªnea, el explosivo testimonio de Michel Dom¨ªnguez el pasado d¨ªa 25, a preguntas de Cobo del Rosal, puede traer consecuencias para la instrucci¨®n hecha por Garz¨®n, seg¨²n algunos juristas.
Pero una eventual declaraci¨®n de nulidad, si no de toda la instrucci¨®n, de al menos algunas de las actuaciones de Garz¨®n, no tendr¨ªa graves consecuencias para la causa, ya que, al pasar ¨¦sta al Tribunal Supremo, el juez Eduardo M¨®ner hizo ratificarse a los procesados en sus declaraciones. As¨ª, la posterior instrucci¨®n de M¨®ner habr¨ªa dejado a salvo de la nulidad las actuaciones viciadas del juez Garz¨®n.
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