Paco de Luc¨ªa presenta "Luz¨ªa", un trabajo dedicado a su madre
De Paco de Luc¨ªa se ha dicho todo. Un guitarrista excelso que ha dado un vuelco al flamenco por su forma revolucionaria de tocar el instrumento. Han pasado nada menos que ocho a?os desde que Paco de Luc¨ªa no entregaba una obra con nuevas composiciones. Y lo ha hecho ahora con Luz¨ªa, un disco magistral dedicado a su madre, fallecida hace tiempo y que presenta a lo grande en el Palacio de Congresos.
En Luz¨ªa -con zeta, porque la familia de su madre Luc¨ªa ten¨ªa ascendencia portuguesa- el guitarrista, m¨¢s sereno que nunca, aborda buler¨ªas, rumbas, sole¨¢s, tangos y hasta una ronde?a dedicada a Camar¨®n, en la que incluso se atreve a cantar. No es De Luc¨ªa un gran cantaor, precisamente, pero queda como homenaje emotivo dedicarle en propia voz unos versitos a su amigo fallecido, el que le ayud¨® a cimentar sus primeros pasos en la renovaci¨®n flamenca venida luego.
Paco de Luc¨ªa act¨²a hoy en el Palacio de Congresos (paseo de la Castellana, 99; metro Santiago Bernab¨¦u) a las 21
00. De 3.350 a 5.850 pesetas.
Paco de Luc¨ªa naci¨® en 1947 en Algeciras, C¨¢diz. Francisco S¨¢nchez G¨®mez (que as¨ª se llama en realidad el maestro) empez¨® con su hermano Pepe, al cante, en un singular d¨²o llamado Los Chiquitos de Algeciras. Unos empresarios internacionales les llevaron por el mundo en los a?os sesenta y Paco empez¨® a adquirir en todo el planeta, mucho antes que en Espa?a, una fama de guitarrista fabuloso.
Adelantado a todo y a todos, se mezcl¨® con guitarristas cl¨¢sicos, brasile?os, de fusi¨®n o de jazz para darle nuevas dimensiones al instrumento, pero siempre pensando en flamenco. Incluso se debe a ¨¦l el cambio de postura de los guitarristas que tocaban con el m¨¢stil en perpendicular al suelo. Paco lo baj¨® hasta el regazo, se puso la guitarra como quien mece a un beb¨¦ y se dispuso a buscar nuevas armon¨ªas. Desde ¨¦l, la guitarra flamenca se toca de otra manera.
La fusi¨®n con el jazz
Paco de Luc¨ªa es un monstruo en vida, una instituci¨®n en el arte milenario. Ha marcado un antes y un despu¨¦s, y sin su aportaci¨®n muchas cosas no hubieran sucedido. Ha conseguido, entre otras, que fusionar el flamenco con el jazz de Chick Corea o Al Di Meola, no sea considerado una herej¨ªa. Los m¨¢s puristas y ortodoxos le respetan, pues ¨¦l, como el que m¨¢s, respeta al flamenco aunque le haya incorporado otras sonoridades.Un monstruo en vida que se la juega, porque as¨ª lo siente y lo dice en p¨²blico, siempre que act¨²a en Madrid. El sudor fr¨ªo que le recorre las manos cuando sale al escenario se transforma en pasi¨®n y arrebato, por mucho que cada vez se muestre m¨¢s reposado y sereno. De la fiesta a la ceremonia, un concierto de guitarra de Paco de Luc¨ªa es, sobre todo, una cita ineludible con la intensidad, la emoci¨®n y el arte.
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