Jaque mate

Tan ins¨®lita concordancia de resoluciones constituye un caso sin precedentes de acusai¨®n contra un juez. El archivo de la causa no deber¨¢ sorprender a nadie, pues estaba anunciado desde que fue sobrese¨ªda la posible apropiaci¨®n indebida de las fianzas de los abonados, delito matriz sin el cual quedaban desvirtuadas las restantes acusaciones. Esta instrucci¨®n estaba asentada en bases sumamente d¨¦biles y fue sostenida por un voluntarismo inexplicable de su instructor, expresado en decisiones err¨®neas y medidas cautelares desproporcionadas. Si de estas resoluciones se derivara alguna responsabilidad para Lia?o, justo ser¨¢ pedir cuentas por la actuaci¨®n del fiscal Gordillo, quien aval¨® las medidas decretadas contra los querellados. (...)De aplicarse estrictamente la ley, y si fuera confirmado por el Supremo en apelaci¨®n, el procesamiento dar¨ªa lugar a la suspensi¨®n del magistrado en el ejercicio de sus funciones, efecto razonable en t¨¦rminos generales, pero que podr¨ªa ocasionar perjuicios muy graves en aquellos casos en los que el procesado instruye importantes sumarios. G¨®mez de Lia?o ha cometido muchos errores dentro y fuera de su juzgado, dictando resoluciones sin fundamento y con juicios de valor de car¨¢cter pol¨ªtico; pero nada de esto justificar¨ªa que ahora se le aplicaran los mismos procedimientos inquisitivos que, con raz¨®n, tanto se le criticaron a ¨¦l en su momento. Sin embargo, por m¨¢s moderaci¨®n y prudencia que se reclame, G¨®mez de Lia?o, primero recusado y ahora procesado, ha sufrido ya un jaque mate como juez.