Con cierta esperanza

En la Federaci¨®n de Trabajadores de la Ense?anza de UGT del Pa¨ªs Valenciano siempre hemos opinado que el dictamen que deb¨ªa emitir el Consell Valenci¨¤ de Cultura sobre la lengua, podr¨ªa ser un punto de partida positivo. Obviamente, la premisa obligada en esta cuesti¨®n pasaba por conseguir que el dictamen fuese un documento que sirviese de umbral para resolver con un cierto grado de garant¨ªa el falso conflicto ling¨¹¨ªstico que sufrimos los valencianos. No pod¨ªamos olvidar que, por desgracia, en nuestro pa¨ªs estamos demasiado acostumbrados a contemplar la puesta en marcha de mil y una tentativas, con la mejor voluntad y los mejores avales por todas las partes, que a la corta y a la larga s¨®lo han servido para abrir nuevos foros de pol¨¦mica o azuzar el conflicto con m¨¢s fuerza. Con todo, desde el 17 de septiembre del pasado a?o, cuando las Cortes Valencianas encargan al Consell Valenci¨¤ de Cultura que emita un dictamen sobre "cuestiones ling¨¹¨ªsticas", se abri¨® un debate en la sociedad valenciana que, al parecer, no ha sido tan negativo como, por tradici¨®n, cab¨ªa esperar. Quiz¨¢s los propios avales de que dispon¨ªa el Consell Valenci¨¤ de Cultura, al ser un ¨®rgano estatutario que representa la soberan¨ªa del pueblo valenciano, o la intenci¨®n previa e interesada de los partidos mayoritarios por tal de que al fin hubiese alg¨²n tipo de soluci¨®n, o es posible - por qu¨¦ no decirlo-, el deseo mayoritario del pueblo valenciano de poner fin de una vez a los intentos y maniobras de quienes nunca quisieron promover o dignificar el uso del valenciano, quiz¨¢s todo esto hac¨ªa esperar una conclusi¨®n positiva. Por eso, la FETE-UGT del Pa¨ªs Valenciano se suma en principio a toda una serie de declaraciones que han hecho p¨²blicas aquellos que muestran su satisfacci¨®n por el dictamen emitido por el Consell Valenci¨¤ de Cultura. Se ha abierto una puerta para intentar poner fin al esteril y falso conflicto ling¨¹¨ªstico que desde hace d¨¦cadas bloquea el proceso de normalizaci¨®n de nuestra lengua. Ahora bien, somos conscientes de la ambig¨¹edad calculada del dictamen. Aunque tambi¨¦n seamos conscientes de que esa ambig¨¹edad no niega las tesis b¨¢sicas que, en torno al valenciano, siempre hemos defendidos en la FETE-UGT. En primer lugar, que el valenciano es la misma lengua que se habla en las islas Baleares, en los valles de Andorra, en la franja oriental de Arag¨®n, en el Principado de Catalu?a, en la ciudad de L"Alguer en la isla de Cerde?a y en el Departamento de los Pirineos Orientales del sur de Francia, conocido modernamente como la Catalu?a Norte. En segundo lugar, que las Normas de Castell¨®n de 1932 eran el punto de partida incuestionable para la normalizaci¨®n del valenciano. Y por ¨²ltimo, que la denominaci¨®n estatutaria de nuestra lengua no pod¨ªa excluir otras denominaciones, tanto las avaladas por la tradici¨®n hist¨®rica como la tradici¨®n popular o legal, y, entre estas ¨²ltimas, aquella que apunta a la sentencia del Tribunal Constitucional sobre la denominaci¨®n de la lengua en el ¨¢mbito universitario. El reconocimiento de estas tres tesis b¨¢sicas hace que, si bien no estamos de acuerdo con la forma del dictamen por su ambig¨¹edad, per¨ªfrasis verbales o elipsis ret¨®ricas, al menos nos permite sentirnos identificados, con dosis suficiente de prudencia, con el contenido o fondo del documento aprobado. Pero hay m¨¢s. La FETE-UGT del Pa¨ªs Valenciano siempre ha reconocido al Instituto Interuniversitario de Filolog¨ªa Valenciana como la autoridad ling¨¹¨ªstica entre los valencianos. Es curioso, por no utilizar otro calificativo, recordar que mientras se elaboraba el dictamen, las propias Cortes Valencianas retiraban al IIFV la potestad de velar por la normativa gramatical en los libros de texto. En la FETE nos vendr¨¢ cuesta arriba reconocer alg¨²n ente nuevo de referencia que, a lo peor, no tenga el respaldo de las universidades valencianas y que no prosiga el trabajo llevado a cabo por el Instituto Interuniversitario de Filolog¨ªa Valenciana durante los ¨²ltimos a?os. En cualquier caso, el dictamen s¨®lo ser¨¢ v¨¢lido y cumplir¨¢ su funci¨®n si el Gobierno del Partido Popular de la Generalitat sigue las recomendaciones que el Consell Valenci¨¤ de Cultura tiene la intenci¨®n de incluir en la ponencia sobre la lengua, y que ser¨¢ la que se someter¨¢ a votaci¨®n en las Cortes Valencianas. S¨®lo un impulso serio en el proceso de normalizaci¨®n del valenciano, la potenciaci¨®n de su aprendizaje en todos los niveles educativos, la actitud ejemplar en el uso de la lengua de todas y cada una de las administraciones p¨²blicas valencianas, y la puesta en marcha de una pol¨ªtica de promoci¨®n -flexible, pero decidida-, que potencia el uso del valenciano en el comercio, las empresas, las instituciones privadas y en todos los ¨¢mbitos sociales valencianos, har¨¢ creible todo el proceso. La FETE-UGT conf¨ªa al cabo que el dictamen se acoja de una forma positiva. La valoraci¨®n ¨²ltima s¨®lo se har¨¢ seg¨²n evoluciones el acuerdo en el seno de la sociedad valenciana y en todos los ¨¢mbitos sociales, sobre todo el mundo de la cultura, el universitario, el pol¨ªtico. Si el dictamen, el pacto, ha de servir para amordazar a la Universidad y al mundo de la cultura, dif¨ªcilmente tendr¨¢ viabilidad i se reducir¨¢ a un pacto pol¨ªtico que, no nos equivoquemos, no servir¨¢ para nada. Si, por el contrario, es un pacto abierto, dispuesto para ser perfeccionado y completado al menos en la praxis, ser¨¢ apto para el objetivo final; ese objetivo que esperamos haya sido el que le haya dado origen y lo haya motivado: la defensa y recuperaci¨®n real de nuestra lengua propia, el valenciano.

Gonzalo Castillo Maldonado, Secretario General de FETE-UGT del P.V.