Barrionuevo declara que sus "adversarios pol¨ªticos" ya han dictado sentencia contra ¨¦l

"A lo largo de mi actuaci¨®n pol¨ªtica y personal no he hecho m¨¢s que tratar de evitar sufrimientos, intolerancias, violencia y atentados contra las personas. Siempre me he ajustado a los valores constitucionales. Ni por acci¨®n ni por omisi¨®n consciente he causado ning¨²n da?o al se?or Marey". Con esta declaraci¨®n, el ex ministro del Interior Jos¨¦ Barrionuevo, el ¨²ltimo en tomar la palabra antes de que el presidente del tribunal declarase visto para sentencia el caso Marey, se quej¨® de que sus "adversarios pol¨ªticos" y otros "adversarios con poderes en medios de comunicaci¨®n" hayan dictado ya sus "sentencias" condenatorias.

La ¨²ltima de las 22 sesiones del juicio se inici¨® ayer con el informe de conclusiones finales de Pablo Jim¨¦nez de Parga, defensor de Barrionuevo, y de Rafael Mi?arro, representante de la Abogac¨ªa del Estado. Despu¨¦s, pasadas ya las dos de la tarde, el presidente requiri¨® uno a uno a los 12 procesados para que manifestaran si ten¨ªan algo que a?adir a lo ya dicho por sus respectivos abogados.

El primero en intervenir fue el ex subcomisario de polic¨ªa Jos¨¦ Amedo y el ¨²ltimo, en torno a las 14.50 de la tarde, el ex titular de Interior. Cuatro de los encausados -el ex gobernador civil de Vizcaya Juli¨¢n Sancrist¨®bal; el ex secretario general de los socialistas vizca¨ªnos Ricardo Garc¨ªa Damborenea; el ex jefe superior de Bilbao Francisco ?lvarez; y el ex inspector Michel Dom¨ªnguez- se limitaron a contestar que no ten¨ªan "nada" que a?adir.

"Quiero hacer constar que como he indicado reiteradamente, las acusaciones contra m¨ª son falsas. Si se tiene en cuenta mi trayectoria personal y pol¨ªtica, son terriblemente injustas", empez¨® diciendo Barrionuevo.

"Deseo de ofender"

El ex ministro del Interior prosigui¨®: "He o¨ªdo por parte de las acusaciones algunos t¨¦rminos que no puedo interpretar m¨¢s que como un deseo de ofender. Uno de ellos es el de la falta de sensibilidad, pero a quien eso dice yo podr¨ªa relatarles decenas, centenares, de casos que movieron mi sensibilidad. Son casos que parece que los que me han acusado no quieren conocer". Barrionuevo se quej¨® tambi¨¦n de que se le acuse de haber atentado contra las libertades, algo sobre lo que es, dijo, "muy sensible".En su declaraci¨®n final, el ex ministro se centr¨® en el secuestro de Segundo Marey: "Ni por acci¨®n ni por omisi¨®n consciente he causado ning¨²n da?o al se?or Marey. Quede claro que en todo este asunto ha habido un juicio paralelo y previo en el que se han manifestado ya las sentencias. Una sentencia pronunciada por adversarios pol¨ªticos; otra sentencia por adversarios con poderes en medios de comunicaci¨®n. Ahora queda hablar a la Justicia. En eso confiamos, se?or¨ªas".

La declaraci¨®n del ex ministro estuvo precedida por otra mucho m¨¢s breve de su ex n¨²mero dos, Rafael Vera, quien se limit¨® a ratificar su inocencia y a proclamar que todas sus actuaciones "han estado al servicio de Espa?a y de sus intereses democr¨¢ticos".

El inspector Luis Hens empez¨® por decir que su declaraci¨®n ha supuesto para ¨¦l "una descarga, por hacer p¨²blicos unos hechos" y verse "liberado de una carga muy pesada". "Siempre obedec¨ª y obr¨¦ con el convencimiento de que este servicio era con todas las garant¨ªas legales y de buena fe", manifest¨®. Y, ya lanzado, prosigui¨®: "Nunca he recibido recompensa econ¨®mica, profesional, ni de ninguna clase por este asunto. Es m¨¢s, me alegro de no haberla deseado".

Sobre el secuestro de Marey, Hens pidi¨® que no se lee suponga "una mala fe, una frialdad y una crueldad que gracias a Dios no tenemos". Reiter¨® que lamenta "profundamente haber contribuido al sufrimiento" del industrial.

El polic¨ªa Juan Ram¨®n Corujo remach¨® que nunca recibi¨® "recompensa" por su intervenci¨®n en la custodia de Marey, al que pidi¨® "disculpas si se siente ofendido por algo".

El comisario Francisco S¨¢iz Oceja, tras decir que "siempre obedeci¨® las ¨®rdenes, aunque hubiera irregularidades", se?al¨® que lleva 31 a?os en el Pa¨ªs Vasco, sabe "lo que es el roce del plomo en el cuerpo" y ha visto muchos muertos.

El tambi¨¦n comisario Julio Hierro repiti¨® una vez m¨¢s que se limit¨® a obedecer ¨®rdenes creyendo que lo de Marey era legal y "una cuesti¨®n de Estado" consistente en "el traslado de un detenido que se le dijo que era de ETA". Por eso, continu¨®, no entiende c¨®mo 15 a?os despu¨¦s se halla procesado y el ministerio p¨²blico pide que se le condene.

Miguel Planchuelo, jefe de la Brigada de Informaci¨®n de Bilbao cuando en 1983 se produjo el secuestro de Segundo Marey, fue parco en palabras y se limit¨® a remachar lo dicho por sus compa?eros: que siempre ha actuado "cumpliendo ¨®rdenes".