La rotura de una tuber¨ªa en la obra de avenida de Am¨¦rica oblig¨® a cortar dos horas la N-II
Las obras de la Comunidad en la avenida de Am¨¦rica para construir una multiestaci¨®n de transportes sufrieron ayer un nuevo incidente. Despu¨¦s del golpe dado por un cami¨®n a la pasarela que cruza la avenida el pasado d¨ªa 6 y tras el accidente que sufri¨® un veh¨ªculo el martes al estrellarse contra las vallas de la obra, ayer lleg¨® el agua. Una perforadora rompi¨® una tuber¨ªa del Canal de Isabel II a la una y media de la madrugada, el agua inund¨® la calzada, oblig¨® a cortar la N-II durante dos horas y aneg¨® los comercios de la estaci¨®n de metro de Avenida de Am¨¦rica.
"La tuber¨ªa no estaba bien indicada en los planos", puntualiz¨® ayer uno de los responsables de la obra. Inmediatamente despu¨¦s de la rotura se produjo un escape de agua a gran presi¨®n que inund¨® la calzada. T¨¦cnicos del Canal cerraron una v¨¢lvula de seguridad para que el agua no siguiera manando, pero la Polic¨ªa Municipal tuvo que cortar durante dos horas el tr¨¢fico de la carretera N-II en sus dos sentidos a la altura de la confluencia de la avenida de Am¨¦rica y la calle de Francisco Silvela. La interrupci¨®n del tr¨¢fico se mantuvo entre las 2.30 y las 4.30."El corte no se debi¨® a la cantidad de agua acumulada, sino a la posibilidad de que se filtrara y produjera deslizamientos de tierras que debilitaran el firme. La seguridad de los conductores estaba en peligro", afirmaron responsables de la obra. Los bomberos, mientras, se dedicaron a achicar el agua acumulada.
Pero con ¨¦xito relativo. El agua ya hab¨ªa alcanzado la red de metro: varias escaleras mec¨¢nicas de la estaci¨®n de Avenida de Am¨¦rica, en sus niveles inferiores, se mojaron y no funcionaban. Operarios de la compa?¨ªa del Metro mantuvieron clausuradas esas zonas todo el d¨ªa, aunque no se cerr¨® la estaci¨®n ni se interrumpi¨® el tr¨¢fico de trenes. Tampoco se cort¨® el suministro de agua en la zona.
Los viajeros se vieron afectados porque ten¨ªan que dar rodeos para hacer transbordo entre las l¨ªneas que confluyen en Avenida de Am¨¦rica. Pero peor les fue a los propietarios de las cinco tiendas ubicadas en el pasillo de la estaci¨®n. Ayer al mediod¨ªa a¨²n goteaba el techo y las tiendas estaban embarradas. El agua, marr¨®n y pestilente, les hab¨ªa inundado, y ellos intentaban limpiar los establecimientos para salvar lo que pudieran del g¨¦nero de las tiendas. Adem¨¢s no pod¨ªan utilizar la corriente el¨¦ctrica por el peligro de los cortocircuitos.
"Lo tengo todo deshecho", afirm¨® el due?o de un bar. "No s¨¦ qu¨¦ va a pasar con todos los aparatos que tengo y que se han mojado". En otras tiendas hab¨ªan perdido el material almacenado. "Esta agua no s¨®lo moja. Tambi¨¦n mancha", se quejaba la empleada de una tienda de ropas.
A Antonio, un vendedor de la ONCE, le cambiaron su lugar habitual de venta. "Hoy no he podido vender casi nada", se lamentaba.
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