El p¨²blico, tan pr¨®digo como manirroto
Ante la evidente y casi escandalera profusi¨®n de orejas cortadas en la nueva plaza de Illumbe, de la feria donostiarra, quisimos conocer qu¨¦ pensaba el m¨¢ximo y ¨²nico responsable de concederlas, o sea, el presidente, El¨ªas Elorza. Le acompa?aba el asesor taurino, Txomin Recondo, hermano de quien fuera matador de toros Jos¨¦ Mar¨ªa Recondo.De manera casi conjunta, reconocieron como cierta esa disposici¨®n un tanto manirrota del p¨²blico. Lo atribu¨ªan a que se trata de una plaza nueva, con unos espectadores que est¨¢n por hacerse, que es como decir por aprender ellos mismos con sus errores.
Respuesta tan contundente como ambigua. Recuerda aquella definici¨®n de la vida que propon¨ªa el poeta Wallece Stevens, "no hay nada en la vida excepto lo que uno piensa de ella". La diferencia era que nuestra conversaci¨®n flotaba sobre las astas de unos toros que iban a sortearse diez minutos despu¨¦s. Como presidente ten¨ªa que conceder la primera oreja si el p¨²blico la pide con insistencia, argumentaba la m¨¢xima autoridad. "?Y las dos segundas que se concedieron los dos primeros d¨ªas, que son potestad exclusiva del presidente,se pueden calificar de excesivas?", preguntamos,mirando a un toro colorado, que luego le toc¨® salir el primero de la corrida de Algarra. Con total sinceridad, reconocieron que a lo mejor se hab¨ªan pasado un poco.
Dilema
?Qui¨¦n es el guapo o el feo que objeta algo cuando se dice lo que se siente? Horas m¨¢s tarde, la oreja que el p¨²blico ped¨ªa para Vicente Barrera, el presidente se guard¨® el pa?uelo. Y no la concedi¨®. Se demuestra con ello c¨®mo a veces si los presidentes aguantan un poco, de esa manera se ense?a a los p¨²blicos f¨¢ciles. Ni por exceso ni por defecto. Conceder lo que sea justo, ese es el dilema hamletiano torero, por as¨ª decirlo.Al despedirnos, el presidente nos recomend¨® que vi¨¦ramos la exposici¨®n del pintor donostiarra Amable Arias, muerto unos a?os atr¨¢s. No s¨®lo de toros vive el hombre. A veces para lo que hay que ver, m¨¢s vale irse de exposiciones.
Prometimos ir a verla. Puestos los motores del arte a punto, estuvimos viendo la exposici¨®n de tema taurino del pintor Anciones, en el hotel Londres de la propia ciudad de San Sebasti¨¢n. Diecis¨¦is tintas negras y cinco de color componen la muestra. Mir¨¢ndolo bien, a lo mejor la recomendaci¨®n del presidente sobre el tema del arte era una forma original de cambiar de tema.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.