Miedo
Los inversores de todo el mundo vivieron ayer una sesi¨®n marcada por el temor a un derrumbe generalizado de los mercados de valores, cosa que finalmente sucedi¨®. La Bolsa de Madrid sufri¨® el mayor descenso de los ¨²ltimos siete a?os, precisamente desde que se produjo el golpe de Estado en la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica en agosto de 1991.
El miedo a que la crisis financiera, centrada hasta ahora en el sureste asi¨¢tico y en Rusia, se traslade a Am¨¦rica ha provocado ventas masivas que, por efecto del contagio entre mercados, en algunos momentos adquiri¨® tintes dram¨¢ticos. Como cab¨ªa esperar algunos valores bancarios espa?oles sufrieron directamente las consecuencias de la llegada de los problemas a Am¨¦rica del Sur y sus cotizaciones cayeron en algunos momentos hasta el 12%, unas cifras que no alcanzaron ni durante el crash de 1987.
Si los analistas hab¨ªan mantenido durante mucho tiempo cierto rechazo a la posibilidad de que los efectos de la crisis asi¨¢tica se trasladaran a Europa, y m¨¢s concretamente a Espa?a, ayer no ten¨ªan ninguna duda de que los efectos de una devaluaci¨®n masiva en Suram¨¦rica har¨ªa mucho da?o a las empresas espa?olas, tanto por la depreciaci¨®n de activos como por el recorte en los resultados, una vez traducidos a pesetas.
Como en los d¨ªas anteriores, una parte del dinero que se movi¨® en los mercados espa?oles intent¨® tomar posiciones en deuda, un mercado m¨¢s estable y con posibilidades de lograr una orientaci¨®n al alza en precios.
La rentabilidad de la deuda espa?ola a 10 a?os cay¨® hasta el 4,64%, nuevo m¨ªnimo hist¨®rico, pero una vez m¨¢s el proceso fue mucho m¨¢s agudo en Alemania, en donde la rentabilidad del bund ca¨ªa hasta el 4,24%, tambi¨¦n m¨ªnimo hist¨®rico.
El diferencial entre ambos productos subi¨® hasta los 0,40 puntos, el m¨¢s alto de este ejercicio y que indica que los problemas a?adidos no se olvidan ni siquiera en momentos de crisis como el actual.
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