Varios l¨ªderes occidentales se solidarizan con Clinton y conf¨ªan en que remonte la crisis
El ¨²ltimo giro de tuerca que ha tomado el caso Lewinsky con la difusi¨®n del informe del fiscal Kenneth Starr ha causado perplejidad en el resto del mundo, as¨ª como fuerte preocupaci¨®n entre los aliados de Estados Unidos por el impacto que puede tener en la soluci¨®n de los conflictos internacionales actualmente abiertos. Tres de los mejores amigos de Bill Clinton -el primer ministro brit¨¢nico, Tony Blair, el presidente franc¨¦s, Jacques Chirac, y el canciller alem¨¢n, Helmut Kohl-, han expresado solidaridad al presidente estadounidense y conf¨ªan en que la pesadilla termine pronto.
Dos horas escasas despu¨¦s de que se hicieran p¨²blicos los primeros detalles acerca de la relaci¨®n sexual mantenida por el presidente Clinton con Monica Lewinsky, el primer ministro brit¨¢nico llam¨® a su hom¨®logo norteamericano para expresarle su "apoyo personal y amistad", informa Isabel Ferrer desde Leicester. Blair no hab¨ªa podido leer toda la transcripci¨®n del informe del fiscal , pero vio los telediarios de la noche antes de telefonear.Seg¨²n Downing Street, Blair le dijo a Clinton que "le ten¨ªa presente y comprend¨ªa la crisis pol¨ªtica, y personal, que atravesaba". En febrero pasado, poco despu¨¦s de producirse las primeras acusaciones por el mismo caso Lewinsky, el primer ministro brit¨¢nico le apoy¨® en t¨¦rminos similares. Aprovech¨® para ello una visita ya pactada, en la que asegur¨® que estaba orgulloso de considerar a Clinton "un colega y un amigo". Le parece, adem¨¢s, el presidente que m¨¢s ha hecho por la paz de Irlanda del Norte, y no se cansa de repetirlo.
La reacci¨®n de Blair ha provocado sentimientos encontrados en el seno de su partido. Varios diputados laboristas, entre ellos Donald Anderson, presidente del Comit¨¦ de Asuntos Exteriores, le han pedido cautela hasta que la suerte de Clinton est¨¦ m¨¢s clara.
Tambi¨¦n Kohl
En medio de la campa?a para las elecciones legislativas alemanas del pr¨®ximo d¨ªa 27, el canciller Kohl ha querido tambi¨¦n manifestar su apoyo a su amigo norteamericano, aunque de modo menos claro que Blair. En una entrevista que ayer public¨® el diario Bild, el l¨ªder cristianodem¨®crata alem¨¢n expres¨® el deseo de que Washington supere las "turbulencias" del esc¨¢ndalo y pueda concentrar su atenci¨®n en asuntos de mayor importancia, fundamentalmente de la escena internacional. Kohl lament¨® en sus declaraciones que "la ¨²nica potencia mundial pueda retrasar el cumplimiento de sus obligaciones". "Hay problemas por todas partes, en Asia, ?frica, India, y no puedo m¨¢s que desear que las turbulencias de Washington acaben lo antes posible", dijo el canciller federal.En Francia, donde la prensa nacional ha criticado con m¨¢s fuerza que en ning¨²n otro sitio la conducta del fiscal Starr y la difusi¨®n del informe por parte del Congreso estadounidense, el presidente de la Rep¨²blica, Jacques Chirac, decidi¨® emular a Blair y telefonear ayer a su hom¨®logo de Washington para transmitirle su "estima y amistad". "En un momento en que el mundo afronta graves incertidumbres pol¨ªticas y financieras, es esencial para todos que el presidente estadounidense se encuentre dispuesto a ejercer plenamente sus responsabilidades", declar¨® la portavoz del El¨ªseo al comentar la conversaci¨®n de media hora que mantuvieron Chirac y Clinton.,
El primer ministro sueco, Goran Persson, que al igual que Kohl est¨¢ enfrascado en campa?a electoral, confes¨® estar estupefacto con la evoluci¨®n del caso Lewinsky y afirm¨® con iron¨ªa que el pueblo norteamericano es afortunado al no tener que ocuparse de problemas m¨¢s serios que el de la aventura sexual de su presidente.
En Espa?a, la reacci¨®n oficial vino del ministro de Administraciones P¨²blicas, Mariano Rajoy: "Deseo y tengo la firme convicci¨®n de que [el caso] no va a producir repercusiones econ¨®micas".
Por su parte, el jefe del Gobierno israel¨ª, Benjam¨ªn Netanyahu, cuya conducta sexual ha sido a veces motivo de cr¨ªtica interna , rompi¨® ayer una lanza en favor de Clinton. El l¨ªder conservador declar¨® a la Radio Nacional israel¨ª que "Bill Clinton es un amigo de Israel, que desea nuestro bien, al igual que nosotros a ¨¦l y a su pa¨ªs". "Conf¨ªo en que el caso concluya r¨¢pidamente y que EEUU har¨¢ lo que el mundo entero espera de una gran potencia: proteger la paz y alejar las amenazas que pesan sobre ella", dijo Netanyahu, un pol¨ªtico cuyas relaciones con la actual Administraci¨®n estadounidense son fr¨ªas. Entretanto, la prensa mundial, adem¨¢s de publicar extensamente el escabroso informe del fiscal Starr, ha dedicado este fin de semana art¨ªculos editoriales sobre el impacto del esc¨¢ndalo faldero. Asahi Shimbun, el diario m¨¢s influyente de Jap¨®n, calific¨® ayer el informe del sa?udo letrado de "asqueroso", y lament¨® el da?o que ha causado a la credibilidad de Clinton justo cuando m¨¢s se necesita el liderazgo de Estados Unidos para afrontar la crisis financiera asi¨¢tica o el incierto futuro de Rusia.
Para el vespertino franc¨¦s Le Monde, la investigaci¨®n de Starr tiene aires de un "nuevo mccarthysmo", en referencia a la sa?a con que el senador Joe McCarthy persigui¨® en los a?os cincuenta a pol¨ªticos e intelectuales estadounidenses sospechosos de simpatizar con el comunismo.
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