200 mujeres maltratadas viven ocultas en "casas secretas" de la Comunidad

Concepci¨®n lleva dos meses oculta a los ojos del mundo. Alojada en un piso cuya direcci¨®n es secreta, apoyada noche y d¨ªa por una psic¨®loga y sin posibilidad de pisar la calle m¨¢s que una vez al mes (y s¨®lo hasta las tres de la madrugada), esta mujer de 32 a?os vive su encierro como una liberaci¨®n. "Es la primera vez en un a?o que puedo dormir", dice. Y es que Concepci¨®n es una de las 200 v¨ªctimas de malos tratos dom¨¦sticos que ha encontrado amparo en una casa refugio de la Comunidad; una red de acogida compuesta por tres casas regidas por los servicios sociales regionales, dos subvencionadas y cinco pisos tutelados. All¨ª van a parar las mujeres que sufren casos extremos de malos tratos o simplemente que se han atrevido a denunciar a sus parejas y necesitan de un lugar donde esconderse de sus palizas.Son s¨®lo una peque?a parte del problema que reflejan las 1.862 denuncias presentadas por mujeres en comisar¨ªas de la regi¨®n por delitos o faltas de malos tratos en los siete primeros meses del a?o (nueve al d¨ªa). La cifra, con todo, revela que este tipo de violencia ha experimentado un aumento del 17% respecto al a?o anterior (este a?o se ha presentado una media de 265 denuncias mensuales, frente a las 227 de 1997).

La subida es entendida por la directora general de la Mujer de la Comunidad, Asunci¨®n Miura, como el resultado de las campa?as de sensibilizaci¨®n y tambi¨¦n de la p¨¦rdida de miedo de muchas mujeres frente a sus agresores. "Pero esto no ha de hacernos pensar que las casas refugio sean una soluci¨®n; son s¨®lo una respuesta inmediata a un problema", especifica Miura, quien pide que se tomen medidas contra aquellos jueces y fiscales que adoptan "decisiones inadecuadas" ante las denuncias por agresiones y que son el origen, seg¨²n entidades como el Consejo de la Mujer o el Foro de la Mujer, de que casos de desprotecci¨®n como el de Ana Bel¨¦n B. E., acuchillada el martes pasado pese a haber denunciado 17 veces a su ex marido e incluso acudido a televisi¨®n a pedir ayuda ante sus amenazas.

PASA A LA P?GINA 3

"Un infierno"