Yeltsin previene contra la hegemon¨ªa talib¨¢n al inicio de un viaje a Asia Central

El control del 95% de Afganist¨¢n por parte del movimiento integrista de los talib¨¢n preocupa en los pa¨ªses del Asia Central de la antigua URSS y en la misma Rusia. El l¨ªder del Kremlin, Bor¨ªs Yeltsin, viaj¨® ayer a una de estas rep¨²blicas, Uzbekist¨¢n, para dejar constancia de que Mosc¨² considera a¨²n la zona de importancia prioritaria. Poco antes de emprender viaje, el presidente declar¨® que "el intento de los talib¨¢n de controlar todo el pa¨ªs socava las posibilidades de solucionar el conflicto y aumenta la tensi¨®n" en las zonas lim¨ªtrofes.Es el primer viaje al extranjero en seis meses del presidente ruso, de 67 a?os, tras varias suspensiones oficialmente relacionadas con la crisis econ¨®mica y pol¨ªtica. Su palidez al bajar del avi¨®n en Tashkent no era tranquilizadora. Como en ocasiones anteriores, la atenci¨®n estar¨¢ puesta en si tiene lapsos o fallos de memoria que obliguen a sus colaboradores a rectificar. En el ¨²ltimo a?o, la mala salud de Yeltsin ha multiplicado las especulaciones sobre si podr¨¢ aguantar hasta el fin del mandato presidencial, en julio del 2000.

El presidente uzbeko, Islam Karimov, que dirige con mano de hierro un pa¨ªs de mayor¨ªa musulmana sun¨ª, comparte con Mosc¨² el inter¨¦s por frenar el integrismo isl¨¢mico que, con los talib¨¢n al otro lado de la frontera, podr¨ªa tener un alto potencial desestabilizador. Para conjurar esta amenaza, Karimov no ha dudado en recurrir a la represi¨®n.

Yeltsin, que hoy mismo emprender¨¢ viaje a otro pa¨ªs de Asia Central, Kazajst¨¢n, suscribir¨¢ en Tashkent un tratado de cooperaci¨®n econ¨®mica de 10 a?os de vigencia, junto a otros compromisos en el terreno comercial, cient¨ªfico y tecnol¨®gico.