Aznar esperar¨¢ a ver el "fundamento" para pronunciarse sobre la extradici¨®n de Pinochet

El Presidente del Gobierno espa?ol, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar se neg¨® ayer adelantar cu¨¢l ser¨¢ su actitud ante una previsible petici¨®n de extradici¨®n del ex general Augusto Pinochet , y solicit¨® a todos "respeto y prudencia". Sin citar al juez Baltasar Garz¨®n, dijo que "no es situ¨¢ndose encima de una ola, jaleando determinados comentarios, como se puede contribuir a que funcione la justicia y a que funcione la legalidad internacional". En tono firme, se?al¨® que el Ejecutivo "no ser¨¢ instado por nadie a nada". "El Gobierno podr¨¢ recibir o no recibir peticiones", dijo, "y podr¨¢ estudiar o no podr¨¢ estudiarlas, en funci¨®n de que las reciba o no las reciba, y del fundamento de esas peticiones, pero desde luego no voy a adelantar nada hasta que no sepa el fundamento real en los hechos". Su vicepresidente Rodrigo Rato fue mucho m¨¢s escueto y claro al decir que respeta la decisi¨®n judicial.

Aznar no pudo ocultar la inc¨®moda situaci¨®n en que se encuentra su Gobierno ante el proceso iniciado por dos magistrados espa?oles y afirm¨® que no quer¨ªa "alentar un debate pol¨ªtico" tras apuntar las implicaciones internacionales de la petici¨®n judicial. El jefe del Gobierno pidi¨® a todos "respeto y responsabilidad" porque "estamos ante un asunto que no s¨®lo afecta a personas sino que afecta a muchas sensibilidades diferentes en pa¨ªses distintos, y que tambi¨¦n tienen derecho a decir lo que opinan y pueden decir muchas cosas, incluso decir cosas de Espa?a". Aznar, en cualquier caso, se?al¨® que el caso Pinochet no afectar¨¢ a las "excelentes y extraordinarias relaciones" con Chile que, sin duda, van a seguir manteni¨¦ndose. En el Partido Socialista Obrero Espa?ol (PSOE) la sorpresa no sido menor. Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, portavoz del partido, declar¨® ayer a EL PA?S, en conversaci¨®n telef¨®nica, que la detenci¨®n de Augusto Pinochet es una buena noticia. "Que un dictador como ¨¦l pueda llegar a comparecer ante la justicia siempre es una buena noticia. ?Ojal¨¢ hubi¨¦ramos podido hacer lo mismo con Franco!" Rubalcaba no quiso desvelar la actitud del PSOE en este asunto, y se remiti¨® a la reuni¨®n que hoy mantendr¨¢ en Madrid la Ejecutiva Federal. No obstante, calific¨® de "vergonzosa" la primera respuesta dada ayer en Oporto por el presidente Aznar. "Da la sensaci¨®n que la detenci¨®n de Pinochet le ha pillado como la noticia de la tregua de ETA, en babia".

Izquierda Unida, a trav¨¦s de su portavoz parlamentaria, Rosa Aguilar, pidi¨® al Gobierno que respete la decisi¨®n de los jueces y que no interfiera en el proceso de extradici¨®n, seg¨²n informa Europa Press. Diego L¨®pez Garrido, secretario general de Nueva Izquierda, fue algo m¨¢s lejos al anunciar que su partido promover¨¢ declaraciones en los ayuntamientos, comunidades y Congreso de los Diputados para exigir al Gobierno el respeto absoluto a la autonom¨ªa de los jueces. Nueva Izquierda no descarta coordinarse con otros partidos para realizar movilizaciones ciudadanas.

Aznar, por su parte, tampoco quiso entrar a comentar las cr¨ªticas formuladas por algunos dirigentes latinoamericanos sobre el car¨¢cter extraterritorial de la iniciativa de los magistrados espa?oles, y su comparaci¨®n con leyes estadounidenses como la Helms-Burton, abiertamente criticada por Espa?a.

"No es cuesti¨®n de manifestar opiniones sobre lo que es una decisi¨®n judicial. Puede haber un juez en un determinado pa¨ªs, esta vez Espa?a, que entienda que dentro de sus atribuciones est¨¢ la de investigar determinados hechos en otros pa¨ªses. Puede haber fiscales en Espa?a, la fiscal¨ªa general, que pueda entender que no entra en la competencia de los jueces tales decisiones , y por tanto impugne esas decisiones. Nuestra posici¨®n es respetar la decisi¨®n final de la Justicia".

Aznar se?al¨® que no deseaba "adornar" ning¨²n debate sobre esa cuesti¨®n y explic¨® que lo que hace falta es "residenciar esta cuesti¨®n en las decisiones estrictamente judiciales".

La ¨²nica iron¨ªa que se permiti¨® sobre este asunto fue al referirse a la prudente posici¨®n mostrada por Fidel Castro. "Es l¨®gico que el presidente Castro muestre algunas sorpresas, pero eso entra en la l¨®gica del presidente Castro, no de la m¨ªa". Aznar apunt¨® tambi¨¦n la supuesta preocupaci¨®n de otros l¨ªderes latinoamericanos que podr¨ªan ser objeto de iniciativas judiciales similares por tribunales ajenos a los su propio pa¨ªs. Por su parte, el presidente cubano volvi¨® a comentar ayer el caso del ex general Pinochet en su encuentro con la prensa espa?ola, tras el desayuno que mantuvo con el Rey Juan Carlos. Castro confes¨® que la detenci¨®n de Pinochet le parec¨ªa una cosa "extraordinaria que nunca pod¨ªa haber imaginado, teniendo en cuenta la complejidad del problema desde el punto de vista t¨¦cnico-judicial". El presidente cubano, un maestro de la propaganda pol¨ªtica, reconoci¨® que el caso "est¨¢ acaparando toda la atenci¨®n" de la cumbre y que sus trabajos ha sido trasladados a "un segundo plano". A continuaci¨®n, trenz¨® un an¨¢lisis pol¨ªtico sobre los riesgos de lo que calific¨® como un caso claro de "injerencia universal" m¨¢s propio de haber sido emprendido por el Tribunal Penal Internacional, reci¨¦n creado en las Naciones Unidas.