La "Sinfon¨ªa alpina" y el Concierto para oboe de Strauss
El a?o pr¨®ximo se cumplir¨¢ medio siglo de la muerte en G?rmisch de Richard Strauss, cuando contaba 85 a?os de edad y uno de desnazificaci¨®n. En Espa?a se han adelantado las conmemoraciones y una de las m¨¢s interesantes las promovi¨® en marzo la Fundaci¨®n Juan March con su ciclo de c¨¢mara y los melodramas sobre Tennyson y Uhland, sin olvidar la contribuci¨®n de Joan Guinjoan a partir de dos in¨¦ditos juveniles de Strauss. Por lo dem¨¢s, incidimos inevitablemente en el gran repertorio sinf¨®nico y as¨ª, en pocos d¨ªas, hemos escuchado dos veces la Sinfon¨ªa alpina.La m¨¢s reciente ha sido en el programa dirigido a la Orquesta Nacional, en su serie del Auditorio, dirigida por G¨¹nther Herbig, quien fuera, todav¨ªa, disc¨ªpulo de Abendroth y Scherchen y ya, de Karajan y Jansons. Frente a la alpina, de 1915, disfrutamos del Concierto para oboe, de 1945, exhibici¨®n de magisterio dentro del aura filobarroca que campe¨® en tantas creaciones straussianas. El solista de la ONE Ram¨®n Puchades (Valencia 1962) toc¨® con dominio, afinaci¨®n y belleza sonora, pero en conjunto la versi¨®n fue un tanto plana y sin el preciosismo que la obra reclama.
Result¨® excelente la interpretaci¨®n de la Sinfon¨ªa alpina con la que Strauss cierra su inmensa contribuci¨®n al mundo del poema sinf¨®nico y la sinfon¨ªa poem¨¢tica. Pienso que no debe incluirse en programa la gu¨ªa pormenorizada de los distintos acontecimientos de la ventura alpina ya que pueden dar lugar a confusi¨®n y sugerir que se trata de una composici¨®n fragmentaria cuando la realidad es muy otra. El Alpe sinf¨®nico de Strauss est¨¢ ah¨ª, en forma de soberbia mole, frente al hombre erguido, envuelto en nieblas y luces y situado entre perspectivas sonoras y distancias geogr¨¢ficas. Y al escuchar la alpina es casi inevitable que venga a la memoria la pintura de Caspar David Friedrich aunque Strauss ensalce e idealice el realismo al tiempo que acepta la afluencia rom¨¢ntica que circula por las venas de su producci¨®n.
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