Blair lanza una campa?a a favor del matrimonio y los valores familiares

Los nuevos planes del laborismo en defensa de los valores familiares acaban de llegar a una sociedad, como la brit¨¢nica, que suma la mayor tasa de divorcios de Europa (cuatro de cada 10 matrimonios). Empe?ado en demostrar que el matrimonio es el mejor estado para educar a la prole, el primer ministro, Tony Blair, ha dejado en manos de su titular de Interior, Jack Straw, la tarea de convencer a la ciudadan¨ªa de las ventajas de contraerlo. Las cr¨ªticas no se han hecho esperar. Se?alan la falta de visi¨®n de un Gobierno que promueve las bodas, pero corre el peligro de olvidar la pobreza, el mayor problema de muchas familias ya constituidas.

Interior ha hecho un esfuerzo por presentar la defensa del matrimonio como el ideal al que debe aspirarse, sin criticar por ello otros tipos de relaci¨®n. "La pareja casada forma el mejor n¨²cleo posible para los hijos. Los padres y madres solos o que viven juntos sin papeles tambi¨¦n logran educarlos con ¨¦xito", ha dicho el ministro Straw, que es hijo de madre soltera, est¨¢ divorciado y tiene dos hijos adolescentes.

Las estad¨ªsticas corren de momento en contra de los deseos gubernamentales. La tasa de matrimonios fue en el Reino Unido de 174.000 en 1994, la cifra m¨¢s baja desde 1889. Los ni?os nacidos fuera del matrimonio sumaron en 1995 un 34%. Los padres solteros tambi¨¦n han aumentado: una de cada cuatro familias brit¨¢nicas los tiene a la cabeza.

Ambicioso y de amplio espectro, el proyecto pretende sobre todo apoyar a las familias; buscar el equilibrio entre el trabajo y el hogar, y combatir la violencia dom¨¦stica y los embarazos adolescentes. Para lograrlo contar¨¢ con la ayuda del nuevo Instituto Nacional para la Familia y la Paternidad. Concedido como una aut¨¦ntica escuela de padres, aconsejar¨¢ a las parejas acerca de la mejor forma de educar a sus hijos. Una l¨ªnea telef¨®nica permanente responder¨¢ a sus preguntas y hasta les remitir¨¢ a un especialista si es preciso.

No a las bodas r¨¢pidas

Para los j¨®venes que deseen contraer matrimonio, el camino ser¨¢ menos llano que nunca. Las bodas civiles r¨¢pidas, que s¨®lo requieren un aviso con 24 horas de antelaci¨®n, ser¨¢n suprimidas. La pareja deber¨¢ acudir en su lugar al registro para inscribirse y ser¨¢ advertida de la relevancia y repercusiones del paso que va a dar, cursillos prematrimoniales incluidos. Y para que no queden cabos sueltos, el Gobierno conceder¨¢ rango legal a los acuerdos prenupciales que detallan el reparto de las posesiones de los contrayentes en caso de separaci¨®n.Una vez formada la familia, los asistentes sociales y sanitarios ver¨¢n ampliadas sus obligaciones. En lugar de visitar al beb¨¦ y comprobar si la nueva madre se encuentra bien, seguir¨¢n al peque?o en la primera infancia. Si se observan signos de maltrato, podr¨¢n alertar a las autoridades locales.

Si el divorcio resulta inevitable, el Gobierno brindar¨¢ a la pareja la posibilidad de una conciliaci¨®n. Podr¨¢n reunirse de nuevo tres meses antes de que comience el proceso judicial y en presencia de consejeros matrimoniales. ?stos tratar¨¢n de subrayar el efecto de la ruptura para los hijos y buscar¨¢n formas de arreglo.

Mod¨¦licos sobre el papel, los planes s¨®lo servir¨¢n "para discriminar a las parejas sin hijos y entrometerse en la intimidad de todos los hogares patrios", seg¨²n la oposici¨®n conservadora. Gingerbread, un grupo ben¨¦fico que promueve los derechos de los padres y madres solteros, ha alertado ya del riesgo que supone bendecir un solo modelo de familia.

A la comunidad homosexual tampoco le ha gustado nada que Jack Straw critique la adopci¨®n de ni?os y los tratamientos de fertilidad defendidos por sus miembros.