Ayudar a Brasil

La ayuda de 41,5 millardos de d¨®lares para Brasil anunciada el viernes tiene varios asuntos que acometer. Es mayor de lo que se hab¨ªa esperado (...). Incluye compromisos no s¨®lo del FMI y del Banco Mundial, sino tambi¨¦n de Estados Unidos y de otros importantes pa¨ªses. Finalmente est¨¢ basada en la promesa del Gobierno de Brasil de llevar a cabo una amplia y necesaria reforma fiscal. Sin embargo, la ayuda es arriesgada. La moneda de Brasil, el real, sigue sobrevalorada, y nada se est¨¢ haciendo directamente para afrontar el problema. La esperanza es que la existencia en el pa¨ªs de un programa de gradual desvalorizaci¨®n mejorar¨¢ de manera provisional el problema. Pero mientras, la sobrevaloraci¨®n podr¨ªa desanimar la inversi¨®n internacional en el pa¨ªs. S¨®lo una gran inversi¨®n har¨¢ posible a Brasil rebajar las altas tasas de inter¨¦s. (...) Tambi¨¦n queda mucho por hacer, tanto por el Congreso del pa¨ªs como por los gobiernos de los Estados, en materia fiscal, y no es seguro que las reformas necesarias vayan a ser aprobadas. Si no es as¨ª, el FMI y otros prestamistas se enfrentar¨ªan a dif¨ªciles decisiones sobre continuar los pr¨¦stamos. Afortunadamente, los mercados financieros mundiales est¨¢n menos nerviosos de lo que estaban incluso hace un mes. Al ser la m¨¢s grande econom¨ªa de Latinoam¨¦rica, la suerte de Brasil es de gran importancia en la regi¨®n, y la salud de la econom¨ªa regional podr¨ªa marcar la diferencia en determinar si la recesi¨®n de Asia se extiende a Estados Unidos.

, 17 de noviembre