Cobre

?Galeras metalizadas? ?Coquinas al ajillo c¨²prico? ?Camarones con m¨¢s cobre que una cueva tur¨ªstica del Sacromonte? Desde hace mes y medio la Junta, a trav¨¦s de la Consejer¨ªa de Salud, tiene prohibida la comercializaci¨®n de cuatro mariscos por rebasar el l¨ªmite legal de acumulaci¨®n de cobre. En realidad, para los puristas, tal acumulaci¨®n de metal convierte a la galera en la mascota de R¨ªo Tinto. Por contra, para los m¨¢s condescendientes, estos niveles m¨¢ximos no suponen riesgos para la salud. Y para otros, los absolutamente preocupados por el marisqueo del voto en las pr¨®ximas elecciones municipales, la cuesti¨®n es puramente pol¨ªtica; concretamente de pol¨ªtica de indemnizaciones. Las pringosas aguas t¨®xicas que el Guadiamar esparci¨® la pasada primavera contin¨²an multiplicando lodos confusos que salpican a la opini¨®n p¨²blica. En la misma Administraci¨®n auton¨®mica, dos consejer¨ªas, la de Medio Ambiente y la de Salud, han mantenido posiciones diferentes sobre el consumo de mariscos hasta que, visto el ambiente que se creaba por tal esquizofrenia pol¨ªtica, una se quitaba de en medio para hacer mutis por el foro del sonrojo. Hasta el momento se desconocen dimisiones. Total ya dimiti¨® Clemente de la selecci¨®n con lo cual el cupo de la verg¨¹enza lo tiene el pa¨ªs completamente cubierto para un par de a?os. Una comisi¨®n estudia la modificaci¨®n de los valores m¨¢ximos de cobre en estos bichitos. No se crean que cuidan por nuestra salud. Al menos no del todo. En esa comisi¨®n cada parte cuida la salud pol¨ªtica que representa. Por ejemplo, Agust¨ªn Cuevas, la boca municipal sanluque?a, tan contaminada por otros lodos si han de darse por buenas las reiteradas acusaciones de su oposici¨®n municipal, anda preocupado por sacarle a la Administraci¨®n un par de cientos de millones en indemnizaciones para los mariscadores de su zona, consciente, como lo es, de la proporci¨®n directa que existe entre el dinero y el voto en ocasiones muy concretas. Ponerse ahora a estudiar la posibilidad de elevar la zona cr¨ªtica de cobre acumulada en estos mariscos no hace sino confundirnos m¨¢s. ?Se pec¨® antes por defecto o ahora por exceso? ?A qui¨¦n beneficiar¨ªa hoy elevar ese nivel cr¨ªtico de cobre acumulado? ?Si hubiera indemnizaciones las pagar¨ªa Sevilla o Madrid? De su h¨ªgado y el m¨ªo, ni hablamos.