La Copa Intercontinental, sin brillo ni calendario
El Real Madrid aspira a ganar un desaf¨ªo Europa-Am¨¦rica bastante despreciado
La Copa Intercontinental, que naci¨® como un desaf¨ªo entre el campe¨®n de Europa y el campe¨®n de Am¨¦rica, ha perdido algo de glamour. Ya no reporta grandes beneficios econ¨®micos y es dudoso a estas alturas de siglo aceptar de buena fe si el ¨¦xito permite al ganador el derecho moral a denominarse mejor equipo del mundo. La FIFA guarda en alg¨²n caj¨®n el proyecto de organizar una especie de Mundial de clubes para darle otro contenido a este trofeo, pero la oposici¨®n de la UEFA y el ya manoseado problema de calendario lo han impedido.De momento, sin embargo, la Copa Intercontinental se mantiene sin grandes dificultades en el formato de partido ¨²nico a primeros de diciembre con sede en Tokio y un patrocinador s¨®lido como es Toyota. Es por ello que, oficialmente, se denomina Copa Toyota, t¨¦rmino que espanta a los cl¨¢sicos. La UEFA no lo incluye en sus competiciones oficiales y la CONMEBOL (Confederaci¨®n Suramericana de F¨²tbol) le da mejor tratamiento. Y ello se debe, quiz¨¢s, a que fueron los clubes europeos quienes pusieron mayor n¨²mero de inconvenientes a la celebraci¨®n de este duelo en los a?os setenta. Durante aquella d¨¦cada, lleg¨® a convertirse en rutina que el campe¨®n europeo terminara renunciando a su derecho a jugar. Lo hab¨ªan hecho clubes como el Bayern de M¨²nich (su renuncia permiti¨® al Atl¨¦tico de Madrid sustituirle y ganar la edici¨®n de 1974), el Liverpool y el Nottingham Forest, a los que lleg¨® a a?adirse el Boca J¨²niors argentino. Por entonces se disputaba a doble partido y los europeos terminaban poniendo muchos problemas en la elecci¨®n de fechas. De hecho, no se lleg¨® a disputar en 1975 y en 1978.
La salvaci¨®n lleg¨® con la oferta de la federaci¨®n japonesa y el patrocinio de Toyota en 1980. La Copa Intercontinental pas¨® as¨ª a celebrarse en Tokio y servir como promoci¨®n del f¨²tbol en Jap¨®n. Desde entonces, no ha fallado ning¨²n campe¨®n europeo aunque m¨¢s de uno terminara quej¨¢ndose de la inoportunidad de un desplazamiento tan largo y de las consecuencias que ocasionaba, puesto que obligaba a suspender partidos de Liga (es el caso del Madrid-Salamanca este a?o) y desgastaba en exceso a los jugadores. Esa queja se ha hecho manifiesta ahora que el calendario europeo se ha cargado en exceso. Hay que tener en cuenta que el Real Madrid regresar¨¢ de Tokio el mi¨¦rcoles 2 de diciembre para jugar el s¨¢bado ante el Espanyol en Barcelona y el mi¨¦rcoles siguiente un partido decisivo ante el Spartak de Mosc¨² con la clasificaci¨®n en juego para los cuartos de final de la Liga de Campeones.
Para el madridismo, no hay dudas, en ese furor que vive el club por actualizar su sala de trofeos. Tras tardar 32 a?os en volver a conquistar la Copa de Europa, el Real Madrid se encuentra en disposici¨®n de remover de nuevo su pasado y adjudicarse la Copa Intercontinental 38 despu¨¦s de aquella que alz¨® Z¨¢rraga en el Santiago Bernab¨¦u. En aquella ocasi¨®n (era el 4 de septiembre de 1960) se disputaba la primera Copa Intercontinental, tras haber decidido la confederaci¨®n americana organizar un torneo equivalente a la Copa de Europa, la Copa Libertadores. En esa primera edici¨®n, el Madrid hab¨ªa empatado a cero en Montevideo con el Pe?arol y ganaba 5-1 a los uruguayos en el Bernab¨¦u. Seis a?os despu¨¦s, el Madrid jugar¨ªa su segunda Copa Intercontinental justo ante el mismo rival: el resultado fue contundente puesto que el Pe?arol gan¨® en la ida y en la vuelta por un id¨¦ntico 2-0.
Desde el lado estad¨ªstico, cabr¨ªa apuntar un ligero dominio de los equipos suramericanos, que han ganado el trofeo en 20 ocasiones por 16 los europeos, pero esa evidencia num¨¦rica no ha terminado siendo aceptaba como un indicativo de superioridad futbol¨ªstica. Desde que el torneo se llama Copa Toyota (1980) el balance se ha igualado algo (10 triunfos americanos por 8 europeos) aunque conviene apuntar que los europeos han ganado las tres ¨²ltimas ediciones (Ajax, Juventus y Borussia Dortmund). Si tuvi¨¦ramos que buscar a aut¨¦nticos dominadores de la Copa Intercontinental nos encontrar¨ªamos con la presencia del Pe?arol (ganador en tres ocasiones, 1961, 1966 y 1982) y del Nacional de Montevideo (otras tres, 1971, 1980 y 1988), dos clubes uruguayos que han pasado a mejor vida en el panorama internacional. A ellos s¨®lo se les iguala el Milan (1969, 1989 y 1990). S¨ª puede aceptarse que, adem¨¢s de los mencionados, marcaron una ¨¦poca y lo refrendaron en este torneo el Santos de Brasil (1962 y 1963), el Inter (1964 y 1965) y el Sao Paulo (1992 y 1993).
Ahora bien, para definir ahora qui¨¦n es el mejor equipo del mundo parece que hace falta algo m¨¢s que ganar la Copa Intercontinental. Normalmente, se tiene en cuenta su palmar¨¦s reciente, su estilo de juego y el destello que produzcan sus principales estrellas. Del ¨²ltimo club que se habl¨® en esos t¨¦rminos fue del Juventus. El Madrid tendr¨ªa alg¨²n derecho adquirido para merecer ese calificativo (gan¨® la Copa de Europa y cuenta con siete jugadores nominados al bal¨®n de oro) si no fuera porque su estilo de juego no ha sido muy homogeneo a la vista de que ha pasado por las manos de Capello, Heynkes y Hiddink, tres t¨¦cnicos con tres ideas diferentes. Y tambi¨¦n porque llega a Tokio envuelto en muchas dudas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.