La propuesta de Maragall abre en el PSC el interrogante sobre el papel del partido en la alianza

VIENE DE LA P?GINA 1 Un diputado de Esquerra Republicana, Joan Ridao, explic¨® ayer que su partido "dif¨ªcilmente aceptar¨¢" la oferta de Maragall, porque quiere acudir con su propio perfil a las elecciones auton¨®micas. Pero agreg¨® que los republicanos no desestiman "un escenario de colaboraci¨®n con Pasqual Maragall despu¨¦s de las elecciones". Para el partido socialista, la propuesta de Maragall plantea tambi¨¦n una situaci¨®n nueva. El consejo nacional del partido, m¨¢ximo ¨®rgano de direcci¨®n entre congresos, qued¨® sumido en la incertidumbre acerca de su papel en ella. Uno de los dirigentes territoriales del partido, Jos¨¦ Zaragoza, responsable de la federaci¨®n del Baix Llobregat, se encarg¨® de reclamar a Maragall que el PSC no sea s¨®lo el coraz¨®n de la futura alianza como hab¨ªa dicho el candidato, sino tambi¨¦n la cabeza. Para los socialistas catalanes es muy duro aceptar que su partido pase a ser un elemento m¨¢s en una alianza. Una de las principales caracter¨ªsticas del PSC desde su fundaci¨®n ha sido la voluntad de hegemonizar a la izquierda catalana. En fecha todav¨ªa muy reciente, cuando el primer secretario del PSC, Narc¨ªs Serra, y el propio Maragall manten¨ªan discretas negociaciones con la direcci¨®n de Iniciativa per Catalunya para acercar posiciones, los dirigentes provinciales del PSC en Tarragona, Lleida y Girona sosten¨ªan que lo ¨²nico que se deb¨ªa estudiar con IC era la absorci¨®n pura y simple. Estos capitanes se han visto ahora en la necesidad de apoyar una propuesta cuyo contenido est¨¢ por concretar pero que, en todo caso, supondr¨¢ quedar en segundo plano en una plataforma en la que deber¨¢ haber otras organizaciones y partidos. Est¨¢n a la espera de que Maragall defina el modelo organizativo de la alianza propuesta. Ayer todo eran interrogantes. ?Figurar¨¢n o no las siglas del PSC en la candidatura? ?C¨®mo se dirigir¨¢? Cuando todo esto se defina ser¨¢n ya v¨ªsperas electorales y no tendr¨¢n otra opci¨®n que dejar hacer a su candidato. Moci¨®n de censura Maragall ha dado pruebas recientes de que considera insuficiente la forma en que el PSC hace la oposici¨®n al Gobierno de CiU. El PSC ha sido durante muchos a?os un partido instalado en el conformismo de sus rentas municipales y su condici¨®n de primera fuerza de la oposici¨®n parlamentaria. La candidatura de Maragall ha venido a sacudir esta situaci¨®n. La semana pasada propuso a su partido y a ERC la presentaci¨®n en el Parlament de una moci¨®n de censura al Gobierno de Pujol. La eventualidad produjo una gran alarma entre los propios diputados socialistas llamados a encabezarla como candidatos alternativos a la presidencia de la Generalitat, que deb¨ªan ser Joaquim Nadal y Joan Revent¨®s. Al final la idea fue desechada por los propios socialistas. En la sesi¨®n del consejo nacional del PSC, Maragall explic¨® el s¨¢bado el porqu¨¦ de esa idea. Catalu?a tiene ahora un Gobierno que no gobierna, dijo, que no hace otra cosa que preparar las elecciones y se apresta a adelantarlas sin ning¨²n motivo pol¨ªtico de ¨¢mbito general que lo justifique. Si se adelantan ser¨¢ s¨®lo por que Pujol quiere evitar que la candidatura de Maragall siga gan¨¢ndole terreno. La moci¨®n de censura hubiera abierto la posibilidad de que se llegara a las elecciones "con un Gobierno neutral", argument¨®.