M¨¢s de 100.000 personas visitan el Penyal d"Ifac en su und¨¦cimo aniversario como parque natural

El Penyal d"Ifac de Calpe, el primer espacio que recibi¨® la denominaci¨®n de parque natural en la Comunidad Valenciana, cerrar¨¢ el a?o de su und¨¦cimo aniversario de dicha clasificaci¨®n con el mejor de los reconocimientos: el del n¨²mero de personas que estuvieron en ¨¦l. M¨¢s de 100.000 visitantes -el 20 de noviembre ya se superaba esa cifra- han pasado por el Penyal, que consolida su posici¨®n como el parque natural m¨¢s visitado de todo el territorio valenciano. La mayor parte de los visitantes se concentra en los per¨ªodos estivales y de Semana Santa. En este ¨²ltimo fueron 15.000 las personas que ascendieron hasta el descomunal promontorio y s¨®lo en el mes de julio, se superaron las 13.000 visitas.

Tal es la afluencia de p¨²blico en estas fechas de alta intensidad tur¨ªstica que la direcci¨®n del parque se vio obligada a limitar el acceso a 150 personas por turno para evitar aglomeraciones. Los que quedaban fuera recib¨ªan un billete que les daba acceso preferente en la siguiente apertura de puertas, una medida que, seg¨²n la memoria anual del Penyal, apenas levant¨® protestas. El a?o que acaba ser¨¢ recordado por los habitantes de esta localidad de la Marina Alta como uno de los que mayores alegr¨ªas ha deparado para su hito ecol¨®gico. Porque 1998 ha sido el a?o en que el Penyal ha resultado vencedor en su batalla m¨¢s antigua, la que libra contra el urbanismo depredador, que pretend¨ªa edificar hasta el l¨ªmite del per¨ªmetro. La Generalitat adquiri¨® recientemente 30.000 metros cuadrados de la ladera norte destinados a la ampliaci¨®n del parque natural, con lo que esta zona ansiada por los que identifican progreso con monta?as de ladrillos recibir¨¢ la misma protecci¨®n que el resto del parque. El Penyal d"Ifac hizo tambi¨¦n historia este a?o por otros motivos. A finales de agosto se convirti¨® en el primer espacio abierto de la Comunidad Valenciana en el que se impuso la prohibici¨®n de fumar. La ausencia de lluvias durante el periodo estival y la inconsciencia de algunos visitantes, que arrojaban al suelo colillas a medio apagar, elev¨® el riesgo de incendio, por lo que el director del parque, Daniel Su¨¢rez, decret¨® la prohibici¨®n. La Consejer¨ªa de Medio Ambiente aprob¨® la medida, pese a que en los montes, parques naturales y espacios protegidos de la Comunidad s¨®lo se impide fumar cuando se est¨¢ en situaci¨®n de alerta 3. Otra actuaci¨®n llevada a cabo en las inmediaciones del Penyal fue la inauguraci¨®n, el pasado 28 de julio, del Paseo Ecol¨®gico Pr¨ªncipe de Asturias, un camino de un kil¨®metro construido en granito que discurre pegado a las faldas del parque y que supuso la recuperaci¨®n de la zona, destrozada desde que en 1957 se dinamitara para conseguir la roca que se emple¨® en la construcci¨®n del puerto. Entre este paseo y el Penyal se instalar¨¢ un jard¨ªn en el que crecer¨¢n especies aut¨®ctonas, como el margall¨® mar¨ª y la silene de Ifac. Esta ¨²ltima era hasta hace poco una especie en peligro de extinci¨®n y, el 19 de enero, cuando el hito cumpli¨® 11 a?os como parque natural, un grupo de escolares plant¨® semillas de silene como regalo de cumplea?os. Evitar el deterioro En la reuni¨®n que la Junta Rectora del parque natural celebr¨® a principios de esta semana se plantearon las propuestas de actuaci¨®n para el a?o entrante. Entre otras iniciativas se prev¨¦ iluminar el t¨²nel que atraviesa la inmensa roca. Las visitas que se realizan al parque son guiadas, y los turistas recorren una ruta por senderos previamente establecidos, con lo que se evita el deterioro de la vegetaci¨®n por el tr¨¢nsito de los turistas. Parte del recorrido establecido se realiza por el interior del t¨²nel de 45 metros de longitud que fue excavado en la roca calc¨¢rea en el a?o 1918. El suelo del mismo es muy abrupto y, en algunos tramos, est¨¢ muy pulido por el paso continuo de personas y presenta riesgo de resbalones y ca¨ªdas. Este a?o se instalaron maromas a ambos lados de la galer¨ªa para evitar tropiezos, pero en la parte central sigue existiendo el problema de la oscuridad, por lo que se propone la iluminaci¨®n de la v¨ªa mediante focos alimentados por energ¨ªa solar. El coste estimado de esta propuesta asciende a cerca de medio mill¨®n de pesetas.