Buenas notas

El director del colegio, Nicanor V¨¢rez, le regal¨® ayer a Pedro Duque una carpeta con las calificaciones que obtuvo entre los 6 y los 10 a?os de edad. La carpeta se la entreg¨® cerrada, pero Esperanza Aguirre no pudo contener su curiosidad:-Pero l¨¦anos usted las notas que sac¨®, hombre.

El director se resisti¨® por discreci¨®n, pero la ministra fue inflexible, le quit¨® la carpeta de las manos y ley¨® ella misma las notas en voz alta, para entusiasmo de la chiquillada.

-Escuchad esto, ni?os -dijo la ministra-. Lectura, 7 en el primer trimestre, 9 en el segundo y 10 como nota final. Escritura, 9 como nota final. Matem¨¢ticas, 10. Lengua, 10. Religi¨®n, 10. Historia y Geograf¨ªa... ?A que no sab¨¦is qu¨¦ nota sac¨® en Historia y Geograf¨ªa?

-???10!!!

-Exacto, un 10. Pero ojo: en formaci¨®n art¨ªstica s¨®lo sac¨® un 8,5. Un poco flojo ah¨ª, ?eh?

Duque parec¨ªa ruborizado. Desde luego, es como para sonrojarse que una ministra le lea a uno la cartilla, pero la cosa puede acabar teniendo su importancia, porque Aguirre asegur¨® que el astronauta era "un ejemplo para la escuela p¨²blica".

El padre del viajero espacial, un controlador a¨¦reo tambi¨¦n llamado Pedro Duque, contaba a la salida del acto que Pedro hijo dio desde muy peque?o muestras de un gran inter¨¦s por la ciencia, el espacio y las matem¨¢ticas. Tambi¨¦n tuvo la suerte de que en casa no faltaban libros ni est¨ªmulos. Su antiguo profesor Manuel Cubillo, que todav¨ªa trabaja en el colegio, recuerda que sus preguntas dejaban clavado a cualquiera. Pedro prob¨® ayer su propia medicina.